Gracias al miedo que Dash produjo al dueño del motel no denunció lo ocurrido a las autoridades.
Llegamos a otro pueblo pequeño, nos establecimos en una cabaña abandonada a las afueras del pueblo , que era utilizada por bandidos para realizar trapicheos de medicamentos por si la enfermedad sin nombre se atrevía a pasar tras la muralla.
Nos hicimos dueños de la roída edificación , y la reforzamos con tablones de madera . Comenzamos una nueva vida en el pueblo de Scrup .
Dash se convirtió en el curandero del pueblo; un mago al que respetaban por el miedo qu a los habitantes ignorantes y analfabetos. Producía lo desconocido; la magia.
Yo me encargué , de comprar los alimentos al pequeño recado en la modesta plaza del pueblo. Luck y Selfire , araban un pequeño huerto al rededor de la cabaña para conseguir verdura .
Por supuesto seguí practicando con el arco todos los días por la noche.
Y así pasaron los meses...
VIVIENDO EN SCRUP PARTE 1
-Sofia,, pásame el ungüento que esta encima de la repisa de la cocina , la señora Stun esta esperando- Dash recibía al cliente en la entrada-.
- Ya voy, deberías tener los pedidos en la entrada, así seria más fácil...- recogió el frasco-.
-Jovencita, no te atrevas a decirme lo que tengo que hacer.- concluyo Dash.-
Dash entrego a la señora Stun el ungüento cremoso, y le explico el modo de uso, se aprovechaba del terror de los habitantes para venderles puras mezclas sin sentido.
-¿Donde aprendiste a engañar a los demás así?- La curiosidad de Sofia hablo-.
- No se aprende, ser adulto te da esa virtud - sonríe internamente.-
- ¿ Mentir es una virtud?... pues vaya, ser un adulto es ser un estafador.- aprieta la mandíbula decepcionada.-
- O comes, o te comen.- finalizo la conversación-.
- Prefiero ser buena persona...a crecer como un tonto como tu...- susurró marchándose.-
En el modesto pueblo , la religión era de suma importancia y el organismo eclesiástico de Scrup quería que toda su disminuida cantidad de juventud fuera a la escuela para familiarizarse con las doctrinas del mismísimo.
Entonces ellas, llamaron a la puerta.
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La maldición.
FantasiaSofía es espectadora de una epidemia que azota su pueblo, acabando con casi toda la población, su madre, para salvarla, la esconde fuera de las murallas que protegían a los habitantes sanos y fuera de peligro.
