Mafiosos ©

Capítulo 7:

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Capitulo 7:

Me acerque con cuidado hacia él. Lucia completamente pálido: sus ojos aun permanecían cerrados y su cuerpo intentaba mantenerse en equilibrio (aun apoyado en la pared). Murmuraba cosas sin sentido, como cuando te recriminas constantemente por algo malo que has hecho. Toque su hombro y se espanto al instante, "abriendo" sus ojos dentro de lo que podía.

-¿Justin?...- me miro desconcertado.- ¿Qué haces aquí...y en ese estado?

-Yo...te conozco. – me señalo y sonrió para luego dejar salir un eructo impregnado es un asqueroso aroma a alcohol. Algo completamente cautivador.

Demonios, tenía que dejar de ser sarcástica conmigo misma.

-Ale...A...creo que lo tengo. – bufo dejando caer su cabeza con brusquedad. Por un minuto pensé que iba a desmallarse y me acerque rápidamente hacia él para tomarlo por los hombros, sin importarme golpear su pecho con las bolsas en mis manos. – ¡Alyssa! La chica de los ojos lindos. ¿Cómo olvidarte? – sonrió seductor y toco mi mejilla.

-¿Dónde has dejado tu auto?

-¿Tan rápido quieres pasar a la acción, nena? –rodé los ojos y me aparte de su lado. – No, no, no...por favor, no me sueltes. El mundo me da vueltas como los mil demonios. –volví a tomarlo por el brazo. –No he venido en mi auto. – suspiro quejándose.

-¿Tienes a alguien a quien pueda llamar, o un lugar cercano para dejarte?

- No llames a nadie. Solo harás que se vuelvan locos y comiencen a buscarme cuando lo que menos quiero es ver un rostro conocido. – arrastro las palabras. Dios mío, ¿Cuánto había tomado este chico? - ¿Te han dicho que hueles muy bien?

Comencé a mirar a mí alrededor sin saber qué hacer. Simplemente no podía dejarlo solo aquí, en un lugar tan horrible como el callejón en el que estábamos. Estaba claro que no haría eso. Mire a Justin mientras ponía una mano en su boca y se alejaba de mí para vomitar tras un contenedor de basura.

Vale, no quedaba de otra.

-Justin. –palmee sus mejillas y este me miro con los ojos llorosos. –Vamos, te llevare a un lugar seguro.

-Esta bien. –asintió despacio y se recompuso. -¿Puedes hacerme un favor? –alce una ceja. –Puedes dejar de moverte tanto.

-Bien, camina. –pase su brazo por sobre mi hombro y comencé a caminar rumbo hacia al departamento.

[...]

-Tu novio sí que pesa. –Mateo rió mientras me ayudaba a sacar a Justin del ascensor.

-Que no es mi novio.- respondí frustrada mientras me apresuraba para abrir la puerta del departamento.

-¡No me toques! – Justin intento forcejear por quinta vez contra Mateo para que el pobre hombre no se acercara.- ¿Quieres robar mis cosas, imbécil? –tomo a Mateo por los hombros y lo estampo contra la pared. Mateo me miro asustado y tan rápido como pude me acerque hacia él y le quite a Justin de encima. Pidiendo disculpas una y otra vez a Mateo por el comportamiento del idiota a mi lado, finalmente logre hacerlo entrar al departamento.

-Pareces furiosa.

-Lo estoy. – Deje las cosas sobre la mesa y me quite la chaqueta para colgarla en el perchero.- Has llamado la atención de los residentes.

-Lo siento. Creí que ese tipo quería robar mi billetera. – rodé los ojos y deje escapar un suspiro de los labios. No valía la pena hablar con él y menos en ese estado. Con suerte podía procesar sus propias palabras, y sería estúpido intentar hacerlo entender lo que había hecho.