My most precious diamond

Capítulo veintitrés

Diamond POV'S

Al día siguiente...

—¡Cuidado abajo!— grita Junior tirándose del trampolín.

Todos nos cubrimos el rostro y cae en el agua empapándonos a todos.

Estábamos en la piscina disfrutando los hermosos días de verano.

—Mierda Junior. — Kenzia se sienta en la reposera y limpia las gotas de con una toalla. Estaba tomando sol.

—¿Es legal que una embarazada se exponga al sol?— pregunta Oliver.

—No lo sé. — responde mi mejor amiga escojiéndose de hombros.

Maddie llega a la piscina con un bikini negro resaltando sus curvas. Wow, que mujer.

Liam suelta un chiflido.

—Pero que hermosura. — alaga a su novia.

Intento no rodar los ojos porque sería muy notorio, ¿verdad?

Maddie ríe.

—¿Quieren coca cola?— pregunta señalando las botellas de gaseosa.

—Uy yo si, me cansé de tomar el agua de la piscina. — dice Junior.

Fruncimos el ceño riendo.

—Ou, yo me tiré un gas en la piscina. — dice Oliver.

Automáticamente salgo de la piscina.

—Eres un cerdo. — exclama Kenz sin dejar de mirar su revista de modas.

—Así me amas, linda. — responde Oliver cuidando su ojo.

Mi mejor amiga rueda los ojos.

Tomo una botella de coca cola y la destapo. Ni siquiera pude tomar un sorbo cuando la potente voz de Mary Jane se hizo presente.

—¡Diamond! Prepara tus cosas, hoy en la noche vuelves a New York.

Quito la botella de mi rostro y la miro con el ceño fruncido.

—¿Qué?— pregunto desconcertada.

—Mañana en la mañana sí o sí tienes que presentarte en Élite. — dice resaltando los sí y la o.

—Pero... — ella me interrumpe.

—Pero nada, faltaste el primer día, no lo volverás a hacer. Responsabilidad por favor.

Se retira del patio trasero y se adentra a la casa.

—Iré contigo. — dice Liam seriamente. —Tengo que cuidarte, soy tu guardaespaldas, ese es mi trabajo.

Maddie lo mira sorprendida, al igual que yo.

—Sí claro, gran excusa. — suelta Junior riendo.

Kenzia le pega en el hombro y él hace una mueca de dolor.

(...)

Casi termino de empacar mis cosas y alguien toca la puerta de mi cuarto. Voy a abrirla y es mi mejor amiga.

—Hey. — la saludo sonriendo.

Me hago a un lado y entra. Se sienta en la cama y me mira pícara.

—Así que... — me mira pícara. —estarás sola con Liam hasta el pasado mañana.

¿QUÉ?

—¿Por qué hasta pasado mañana?— pregunto con el ceño fruncido.

—Hay anuncio de tormenta, no podremos viajar mañana. — informa sonriendo.