La maldición de la fotografía es que guarda lo que debe quedar en el pasado, resalta lo que debe estar oculto y enmarca el error que no quieres mirar.
Después de tres meses de haberte soltado por fin me atrevo a caminar por los pasillos de mi mente donde te tenía almacenada. Risas en las esquinas y bailes por las salidas, la mente guarda lo que el corazón ya no puede. Al final del recorrido me encuentro con lo que no quería, con la prueba de que nunca te irás por completo y que siempre habrá una parte de ti que me pertenecerá.
Trato de barrer tu recuerdo, de aspirar tu fragancia y de fumigar tu sonrisa, pero me es imposible. Mi cerebro te guarda como una fotografía, una de ésas que debió ser quemada, que nunca debió imprimirse y que un marco siempre le quedó grande.
A la cámara y a la mente les gusta jugar conmigo, las dos me dicen que siempre estarás ahí, en la esquina más oscura y en el rollo más viejo; siempre serás parte de lo que no se puede borrar.
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Letras creando sentimientos.
PoesiaEstar al comienzo de una relación conlleva muchos problemas, muchas ilusiones y algunas penas, pero no quiere decir que se deje de sufrir después; cuando ya estás compartiendo un vínculo con alguien no todo es amor y no todo es alegre, existen numer...
