Mi Sexy Profesor || YoonMin +18 !

40.

Narra Jimin:

-Jimin, tu turno.-me miró con una apenas perceptible sonrisa. Estaba tan concentrado en las canciones de los demás que se me olvidó que yo también tendría mi momento.

Caminé hecho un matojo de nervios hasta el escenario improvisado, no esperaba ponerme nervioso, de hecho hasta hace unos instantes estaba bastante confiado. Finalmente me paré frente a toda la clase y me senté en la pequeña silla de piano, sus miradas me atravesaban como espadas y las piernas me temblaban a más no poder, menos mal que esta mañana no desayuné, sino estaría ahora rezando para no cagarme en cuanto diera la primera nota.

-¿Y bien? Cuando quieras.-Dijo YoonGi quien parecía muy pendiente de mí mientras me daba la señal para que comenzara desde lo lejos.-Pero tampoco te pases, no tenemos todo el día.-Lo miré con cara de cachorrito asustado y fui respondido con una sonrisa y un guiño de su parte en forma de apoyo. Por suerte, él estaba al fondo del aula mientras nos examinaba, eso hacía que nadie pudiera ver nuestras "miraditas".

-Ya estoy listo, profesor.-mencioné decidido tras tomar una buena bocanada de aire.

Min asintió y puso el nuevo track del instrumental que le envié por email ayer en la noche, edité unas cuantas partes para impresionarle aún más. La melodía comenzó a sonar en cada rincón con una gran calidad gracias a los altavoces y de reojo vi como él se disponía a grabarme con el móvil, igual que hizo con el resto.

En ese instante cerré los ojos, me coloqué el pequeño micro a la boca, posé las manos sobre las teclas que interpretarían el acompañamiento que tanto entrené y relajé todos mis sentidos hasta apreciar un peculiar momento de paz en mi interior. Abrí la boca, desplegé mis alas y comencé a cantar como una dulce brisa de verano. En un momento dado me sentí libre, como un pájaro que persigue el amanecer, mis notas altas eran las ganas de atravesar ese misterioso horizonte infinito, y las bajas un pequeño llanto al saber que nunca lograría bañarme en esa sombra anaranjada que parecía tintar las cálidas aguas del mar, pero seguía volando con la cabeza alta y firme, descendiendo y ascendiendo montes, mis tonos. Y el aire, quien acariciaba mi traje de plumas como un manto de seda era mi compañero, mi voz y mi guía.

El final de la canción se acercaba, mis manos se ocupaban de las teclas y se coordinaban con el instrumental que resonaba una y otra vez, como un perro que persigue su cola. Unos segundos más y toqué la nota final, mi despedida, regresé al mundo real y como un eco percibí los aplausos de todos mis compañeros, rápidamente dirigí mi mirada al final de la clase, y ahí estaba el señor Min, con el brillo en los ojos más hermoso que había contemplado y esa gran sonrisa que dejaba ver parte de sus encías. Mi piel tomó un color rojizo"¿De verdad lo he hecho tan bien?" me cuestionaba mientras me levantaba del asiento.

-¡Te tiraría una rosa!-gritó Jin emocionado levantándose de la silla.

-¡Pues yo me lo tiraba a él!-Mencionó Wonho de broma desde la segunda fila mientras sacaba la lengua, él era el típico graciosillo de clase junto con Hoseok, se hicieron muy cercanos últimamente.

No pude evitar reír ante sus comentarios inadecuados, pero sinceramente lo veía venir, la última vez fue un "¡hazme un hijo!".
El caso es que parecía haber impresionado a toda la clase, incluso a...¿Hoseok? Tengo que volver a preguntar a Taehyung sobre ese tema, pero hace tiempo que no logro contactar con él, y ahora que lo pienso, con Jungkook tampoco, eso sí que es extraño, nunca faltaría a un trabajo ni aunque se estuviera muriendo.

Tras las felicitaciones volví a mi sitio correspondido en la clase, estaba nervioso porque Yoon Gi me hizo un signo de "luego hablamos" con los dedos. Me pasé el resto de la clase sonriendo a la nada y escuchando a los dos últimos compañeros.
Admito que me sorprendí al escuchar al "caraponi", que así era como lo llamaban mis amigos, por el hecho de que mostró un poco de sentimiento sincero entre sus letras. No sabía que creer.

La clase finalizó, y tras esa muchas otras, acababa de terminar de hacer educación física, la última, genial, tras haberme dejado medio pulmón en música ahora viene a hacernos correr y a quitarnos la otra mitad. Por suerte, ahora era libre de ir a ver a mi hombre, eso sí, no sin antes pasarme por los vestuarios, porque venía bañado en sudor y no quería ese tipo de presentaciones.

-Min~-saludé nada más entrar en su sala y cerrar la puerta con pestillo.

-¡Bebé!-vino corriendo a abrazarme.-Estuviste genial, me emocionaste, ¿sabes?-me enrrolló aún más fuerte con sus brazos hasta el punto de levantarme del suelo.

-¿De verdad?-sonreí mientras estaba aún sin tocar el suelo despegué mi cabeza de su hombro y me quedé frente a frente con él esperando por su respuesta.

Él se acercó inesperadamente a atrapar mis labios y yo correspondí al momento. Buscamos desesperados en la boca del otro nuestro típico sabor de siempre, él a caramelo de limón y yo a un toque de vainilla y canela.

-¿Esto responde a tu pregunta?-se separó un segundo y yo asentí mientras buscaba continuar. Me aproximé de nuevo a él y mordí suavemente su labio inferior, en ese momento lo miré a los ojos, sonreí y me separé haciendo que volviera a tocar el suelo.

-Creo que puedes responderme a la pregunta de otra manera.-acaricié su torso con una mano y me dirigí al escritorio para tumbarme en él de una manera provocativa.

-Conque el cachorro quiere su recompensa, ¿eh?-me miró con una pícara sonrisa.

-Puede.-dije tratando de sonar travieso.

-Pues estás de suerte, porque la bestia quiere a su presa.

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Sólo diremos que...prepárense para el próximo capítulo 7w7.

Comenten si quieren que sea extra largo, el capítulo, no malpiensen...porque con la de YoonGi ya es suficiente ufff. XD creo que nos emocionamos.

Y bueno, ¿les está gustando la historia? Sois libres de decir lo que queráis, nadie os está apuntando con un cuchillo. :3

Nos leemos pronto lectores/as ;3

Por hoy nos despedimos:
roddma (la pervertida) y little_m0onie (la que se hace la inocente)

❤️❤️❤️