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(Nuestras disculpas abajo)

Narra Jimin:

Acabamos desplomados en la cama con los ojos fijados en el techo blanco. Nuestras mejillas ardientes y el aire ajitado que entraba y salía de nuestros pulmones se debilitaba según los segundos pasaban.
Aún no me imagino qué hubiera sido de mí si jamás hubiese conocido al señor Min, siento que la vida sin él es puro delito.

-Jimin...-Esa grave y ronca voz me volvía loco, y cuando pronuncia mi nombre, todo encaja de nuevo.

Nuestros cuerpo se ladean dejando ver la curvada linea lateral que forman nuestros cuerpos desnudos. Nos miramos y observamos tiernamente, tras ello, YoonGi alza su mano y me aparta un mechón del flequillo de la cara, después acaricia mi mejilla suavemene, y respondo posando mi mano sobre la suya. Su tacto es cálido y único, me transmite cariño, incluso después de todo el salvajismo de esta noche. Sonrío y formo dos medias lunas en mis ojos, está claro, YoonGi me hace feliz.

"Y un cursi..."

-Dime YoonGi...-Digo casi en un susurro.

-Este ha sido mi tercer regalo.-

-Los he disfrutado mucho, ha sido el cumpleaños más entretenido de mi vida, hoy han ocurrido tantas cosas...- Dije en un estado de calma y felicidad. Él ríe.

-Suenas como si dieras por echo que no hay más.-Alza una ceja y sonríe un poco.

-¿Eh?, ¿M-más...?- Quedo sorprendido.

-Sí, un último regalo, tan solo es una cursilería mía. Pero te lo daré después de ducharnos.- Toma mi mano y juntos nos levantamos, y como suele ocurrir, necesité un poco de ayuda para ello.

Poco a poco mi cuerpo se acostumbraba a YoonGi, el dolor que antes sentía no se comparaba al de ahora, el placer se volvió más intenso, y el experimentar una doble penetración sin duda alguna me había dejado sin aliento.
Miré la hora. Diez menos cuatro. Mamá llega a las once, pero he visto que cerca del aeropuerto hay atasco. Igualmente, no voy a arriesgarme a que mi madre sepa que salgo con su amor platónico.

-Una ducha rápida, ¿eh? Que no nos pase lo de siempre.-Sonrío en mi interior.

-Claro pequeño. ¿Dijiste rápido no? Déjamelo a mí. - Continué sin saber a lo que se refería hasta que mis pies perdieron el contacto del suelo cuando un brazo pasó por debajo de mis piernas y otro por mi espalda siendo elevado horizontalmente hasta el pecho de YoonGi.

"Me siento una princesa ahora mismo."

Desnudos y sin cambiar de posición, Min me llevó en brazos hasta el baño, nada más entrar, deseé que la imagen reflejada en el espejo pudiera volverse una fotografía para admirarla en mis peores días. Pero, ¿para qué fotos si lo tengo a él entero?

-A dentro.-Nos metimos dentro del plato de ducha, donde al fondo, hay un banco que suelo usar para dejar los jabones de baño y que él vio como asiento con solo apartarlos un poco hacia los lados.

Aún en sus brazos, me agarré de su cuello para poder sentarme correctamente sobre sus muslos apuntando hacia él. Le bastó con estirar un poco su brazo para alcanzar el mango de ducha que estaba colgando del mismísimo grifo por mi pereza a colgarlo en la pared en su debido momento.

-Si nos besamos mientras la temperatura del agua se regula no perderemos tiempo.-Acaricia mis brazos.

-No digas más.-Pego mis labios a los suyos.

"Joder. Son tan buenos..."

Qué pena no poder saborearlos por más tiempo. El agua templada ya recorría mi espalda, y lo mejor, no tuve que mover ni un dedo ya que YoonGi se dispuso a enjabonarme y frotarme con la esponja como niño pequeño.

-Te doy las gracias Yoonie, pero, ¿no crees que si yo lo hago será más rápido?-Dudé.

-La rapidez no es tu punto fuerte Jimin. Así que déjame encargarme hoy por ti. Te prometo que será más rápido. -Le di la razón y dejé que su tacto y espuma se apoderara de mi cuerpo.

-E-entonces...¿puedo frotar tu pecho y brazos? En esta posición me será fácil.-Asintió y sonreí en mi interior.

Agarré la esponja e hice lo dicho. Nos enjabonamos todo el cuerpo y me di cuenta de que la piel de YoonGi parece demasiado pura comparada con su cerebro pervertido. Me ruborizé tras soltar un gemido después de que pasara la esponja por mis zonas sensibles, perfectamente sé que lo hizo aposta, estaba al tanto de mis expresiones.

Ya limpios ambos, YoonGi plantó un suave beso en mi hombro, justo donde había dejado una gran marca de amor previamente y salimos de la ducha. Ya tocaba el suelo con los pies.

-Ten.-Le pasé una de las toallas blancas, nos secamos lo justo y nos la enrollamos en la cintura para después salir del baño y entrar a mi habitación de nuevo.

Nada más entrar vi el reloj de la pared. Hemos tardado doce minutos ahí dentro. Esto es un récord.
Comenzamos a vestirnos con algo de prisa.

-Pero YoonGi, aún no te pongas la chaqueta, hace mucho calor.-Río y hago un gesto de tener calor.

-Está bien, entonces te daré el regalo antes.-Hace una breve pausa y mira mi mesilla de noche donde la tarta, o lo que queda de ella, reposaba.-Recuerda esconder la tarta.-Menciona.

-No te preocupes por la tarta, puedo decir que me la han traído mis amigos al venir a visitarme. -Se me ocurre de imprevisto.

-No suena mal, pero ten cuidado.-

-Lo tendré.-Digo ya casi terminando de coger y ponerme las últimas prendas limpias de mi armario. Pero antes de poder ponerme la camisa, sentí las manos de YoonGi rodear suavemente mi cuello y me detuve por la sensación metálica y fría que me causó un pequeño escalofrío.

-Listo.- Me sonrió y me hizo una señal para que me diera la vuelta y me viera al espejo de enfrente. -Espero que te guste.-

Curioso observé una linda cadena de plata con una pequeña clave de sol colgando delicadamente de mi cuello hasta la clavícula.
Antes de decir nada, YoonGi interviene.

-La música fue lo que nos unió, ¿no es así?-

-Es precioso...Lo cuidaré con todo mi corazón.-Me sigo examinando en el espejo con una gran sonrisa.

-Más te vale. -Sonríe y me abraza de la cintura.-Te queda perfecto, prefiero esto en vez de la cutre idea de las iniciales.

-Tienes razón, esto es más original y discreto.-Me doy la vuelta aún atrapado entre sus brazos quedando cara a cara con él. -Gracias por absolutamente todo, no sé cómo pudiste aguantarme un día entero.-

-Porque te quie...¿Jimin...?

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Personitas a través de la pantalla, ¡HEMOS VUELTO PARA QUEDARNOS! Antes de todo, no nos maten, una de nosotras ha tenido problemas tecnológicos después del último mes de exámenes, ese en el que os avisamos de que se pararía el fanfic para así poder dar el máximo rendimiento académico.

Pero ya pasó todo, os hemos echado muchísimo de menos, de verdad, sobretodo vuestros comentarios graciosos, de amor, de apoyo...Y aquí estamos para que eso vuelva y que no se quede atrás. A esta historia le queda mucho jugo, así que, ¡Más vale que os prepareis!

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Este capítulo va dedicado a todxs los que nos seguís apoyando y enviándonos amor, muchas gracias.

Os queremos!!

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Mi Sexy Profesor || YoonMin +18 !Donde viven las historias. Descúbrelo ahora