perdonar

Capítulo 5

Capítulo 5

Anthony besaba lentamente a Candy, dando besos cortos y suaves mientras juntaba su frente a la de Candy

—oh mi dulce Candy, te he extrañado tanto, disculpa mis celos por favor, realmente no sé qué me pasa es que a veces me parece mentira que puedo tener el amor de mi bella princesa solo para mi

—amor mío, yo también te he extrañado tanto, tanto, no sé qué hay en esa cabeza tuya que te causa tanta desconfianza, pero tú sabes que mi amor es solo tuyo, debemos confiar el uno en el otro

—lo se amor, aun me parece un sueño, recuerdas me parece que fue ayer cuando nos besamos por primera vez

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Inicio del recuerdo

Tomados de la mano en la mansión de Londres, Candy y Anthony se encontraban un poco tristes antes de las vacaciones de verano, debido a que Anthony debía viajar a Francia a reunirse con su padre a quien hacía mucho no veía

—me harás tanta falta Candy

—y tú a mi Anthony, pero no puedes dejar de ir, no has visto a tu padre en mucho tiempo y debe estar ansioso por verte y sé que tú también a el

—si no lo niego que ansío verlo, pero eso no quita que te extrañare mucho, pero será por unas semanas, llegare a Escocia antes de finalizar el verano, mientras promete que trataras de pasarla bien

—si te lo prometo, pero debido a que no estarás tú con nosotros he decidido que me quedare en el colegio de verano y no en la villa de los Andrew en Escocia, las chicas también se quedaran conmigo en el colegio

—sabes que preferiría que estuvieras en la villa después de todo es tu derecho, pero con la presencia de Eliza y Niel entiendo que no estarás cómoda sin contar que no quiero que Niel aproveche mi ausencia para querer hacer de las suyas

—gracias por comprender, aún tengo que hablar con la tía abuela, no quería que ella pensara que le hago un desaire al no alojarme allí con ella

—te ayudare y hablaremos juntos con ella si

—gracias Anthony

—solo disfruta el verano y espérame que yo también estaré ansioso por volver a verte

Con la emoción de la inminente despedida los rubios se abrazaron tiernamente, y Anthony beso tiernamente la frente de Candy, pero al hacerlo sus ojos se encontraron y guiados por el momento y la emoción que sentían bajo su rostro lentamente hasta besar con ternura su nariz, luego sus mejillas, hasta besar suavemente los labios de la rubia, quien llena de emoción respondió el beso

Fin del recuerdo

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—después de esa vez ya no pude dejar de buscar la dulzura de tu boca o mi dulce Candy, te quiero

—y yo a ti, le respondía toda sonrojada la rubia y ansío por fin convertirme en tu esposa

—yo también Candy, yo también

—y a todo esto dime, porque sigues con el tema de Terry, creí que con lo sucedido en el San Pablo había quedado cerrado de una vez toda esa paranoia tuya, si a final de cuentas ustedes son amigos, fuiste el único del que se despidió, hasta me entregaste la nota de despedida que dejo y me entregaste la carta que él me envió cuando llego a New York avisando que estaba bien, no comprendo

—discúlpame Candy, no hagas caso por favor y no hablemos más de eso, tienes razón no sé qué me paso, mira me parece que debemos regresar o los demás se preocuparan, pero antes...

Y dándole varios besos cortos la toma nuevamente de la mano y regresan a la mansión.

Al día siguiente Candy se despide pues debe volver al hospital a seguir con sus estudios, prometiendo volver al tener su día libre, Anthony y los chicos la acompañaron

Así pasaron varias semanas entre trabajo, estudio y visitas a la mansión Andrew, Anthony no había hablado más de la boda y eso tenía un poco preocupada a la rubia, sin contar que los acosos de Niel no habían cesado y una nueva preocupación opacaba su usual alegría y en un día en que los chicos fueron a visitarla al hospital no pudieron dejar de notar su tristeza y le preguntaron qué sucedía a lo que ella les respondió:

—oh chicos, es tan triste

— que sucede Candy, le pregunto Anthony preocupado por el estado de esta pues ella siempre suele estar alegre e irradiar su entusiasmo

—es el señor Albert

—que sucede con él, has sabido algo de él, ya apareció, le decían Stear y Archie quienes hacia algunos meses atrás supieron a través de las cartas de Candy que ella se encontraba preocupada por él, al no tener noticias de su amigo

—él está aquí en el hospital, está muy mal, lo han traído de Europa, lo tienen en la habitación cero, la que es destinada para los pacientes sin familia, los abandonados

—que es lo que tiene Candy, le pregunto Stear

—el, él no me recuerda, les decía mientras rompía en llanto causando conmoción entre todos, —él ha perdido la memoria, si lo vieran ya no es ni la sombra de lo que fue

—podemos verlo Candy, le decía un muy preocupado Archie

—si vamos hay que verlo, apoyaron Annie y Paty

—yo debo retirarme tengo algunos asuntos pendientes que tratar

—pe pero Anthony

—nos veremos pronto Candy discúlpame por favor, y dando un suave beso en los labios de la rubia se retiró dejando a todos un tanto desconcertados ante la extraña actitud del rubio

—siempre se comporta así cuando se trata del señor Albert, no lo comprendo, nunca quiso conocerlo y siempre se portó extraño cuando hablaba de el

—no hagas caso Candy, seguro fue a hacer algún trámite de la universidad, ya ves que está tramitando su ingreso le contesto Stear

—bueno vamos entonces los llevare con el señor Albert respondió la rubia un poco preocupada por la reacción de Anthony, además de sentirse triste pues él no le había comentado que ya había iniciado trámites para la universidad y sentía que no la estaba incluyendo en sus cosas y su vida

Después de visitar a Albert los chicos se despedían de Candy, Annie se quedó un poco más para charlar con su casi hermana pues sentía que ella la necesitaba

—Candy, dime estas bien, te conozco y esa mirada, sé que estas preocupada y no es solo por el señor Albert

—tú me conoces bien Annie, no se quizá sean ideas mías y no sea nada importante

—vamos Candy, tu sabes que puedes confiar en mí, dime hermana que te pasa, es por Anthony verdad

—tan obvia soy

—si lo eres, pero mucho más para mí, nosotras nos conocemos y cuando tu sufres...

—cuando tu sufres yo también, le respondió emocionada Candy al saber el cariño que le unía a su hermana

—dime entonces te escucho

—es que no se, algo en mi corazón me inquieta, la actitud de Anthony está muy extraña, a veces lo noto tan desconfiado conmigo, luego se disculpa, luego siento que está lejos aunque este a la par, siento que ya no nos comunicamos como antes y aunque no tengo pruebas, sé que la culpable de todo esto es Eliza

—Candy... no creo que estés tan equivocada, creo que todos hemos notado la actitud extraña de Anthony, incluso lo hemos platicado con los chicos, después que te fuiste del colegio Eliza siempre busco estar con Anthony, prácticamente se le pego como garrapata, hasta estoy segura que ella intercepto tus cartas, deben hablar sobre esto, tienes que hacerle ver tus inquietudes, ustedes se quieren no pueden permitir que dañen su cariño

—tratare de ser fuerte, gracias por escucharme Annie, tienes razón hablare con Anthony

Continuara...