Cap. 6

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Cuando llegué a casa casi medio ahogada de tanto correr, me esperaba en la entrada un William de brazos cruzados y una sonriente Dayan.

Esperé a que me echaran la bronca pero eso nunca llegó.

Joder, solo habia llegado 15 minutos tarde, Williams podria ahorrarse esa cara!

Aunque creo que lo que más le jodía era que estaba en bikini, casi le da un infarto al verme pero aguantó sus comentarios. Creo que Dayan lo tenia amenazado.

Yo para tranquilizarlo le dije que con las prisas me habia dejado la ropa en la playa y creo que mi mentirijilla coló porque se destensó un poco, solo un poco porque la cara de ogro aun la tenia.

Fuy a mi habitación a darme una ducha y bajé a cenar con ellos, no duré mucho tiempo ahí porque me moría de sueño y me fuy a la cama.

Después de mi gran sobada me habia levantado más energetica que nunca y me puse a guardar mis cuatro cosas en el armario.

- Mara, el desayuno esta listo - me dijo Dayan desde la puerta -

- Desayuno? Pero aquí cuantas veces se come?

- Nunca has desayunado? - negué con la cabeza - Pues es la comida mas importante del dia cariño. Cuánto tiempo hace que no te haces un chequeo en el hospital?

Pensé durante unos minutos, chequeo...

- Creo que cuando cumplí cinco años me hicieron uno

- Qué?! Eso no puede ser posible Mara! - me dijo escandalizada - Ahora mismo pido cita con el doctor! - salió de la habitación hablando sola como las locas -

Desayuné unos roscos que estaban bueníssimos, creo que se llamaban donuts o algo asi y la leche de aqui tenia un sabor diferente a la que yo tomaba.

- Mara, mañana por la mañana tenemos cita con el doctor

- Qué pasa Dayan, se encuentra mal?

- No William, resulta que no se ha echo un chequeo desde que tenía cinco años.

- Cómo?! - casi escupe el café -

Joder, tampoco era para tanto no?

- Nunca te has encontrado mal?

- Si, pero robaba unas aspirinas en la farmácia y listo

- Ted nunca te llevó al médico?

- No le convenia llevarme - les dije mientras cojia otro donut -

- Por qué dices eso, por el dinero?

- Aparte de que preferia gastarse el dinero en cervezas antes que en mi o en mi madre, no le convenia porque los médicos verian mis morados y eso...

- Ése hijo de perra te pegaba? - gritó William -

- Y qué esperabas William que me adorase? Él sabia que yo no era su hija, siempre habia sido su estorbo mas preciado. A él lo único que le interesaba era el poco dinero que cobraba mi madre para gastarselo en putas y alcohol.

- Lo siento tanto! - me dijo -

Por primera vez vi a un hombre apenado de verdad por mi.

- Tranqui William que tampoco es para tanto, estoy viva no? - sonreí - Aparte, solo lo hacia cuando coincidiamos en casa y no era muy a menudo.

- Creo que no estoy preparado para escuchar más anécdotas de tu vida por hoy Mara. Quiero matar a ése hijo de puta!

- Me caes bien William - me miró sorprendido - Creo que podré llevarme bien contigo

Rompiendo las olas (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora