Cloud «Duff McKagan» ✔

07 | Dreams

Purple.

Bajé a la cocina para cenar algo junto a Donna. Mis padres estaban trabajando y mis hermanos no están en casa porque lo que cenaría sola.

-Hola, Donna -sonreí al pasar el umbral. Ella me recibió con su magnífica sonrisa, pura y sincera.

-¿Qué tal, cariño? -Alza una ceja- Te he preparado lasaña.

Mi estómago rugió y la boca se me hizo agua. Me senté en la mesa mientras me disponía a comer. Donna guardaba algunas cosas en la despensa.

-Últimamente te veo muy feliz, cielo. Dime qué ha pasado -me guiña un ojo y sonrío.

Trago saliva.

-Me besé con un chico el sábado -me sonrojo.

-¡Ay, cariño! -Aplaude con orgullo- ¿Te gusta?

Niego la cabeza.

-Sé perfectamente lo qué quieren los tipos cómo él, pero luego hay alguien qué me confunde tanto...

-Michael -masculla con una sonrisita.

Abro los ojos cómo platos y la enfoco.

-Vamos, Purple -Ríe- He visto cómo te mira, ya no eres una niña.

Mi corazón comienza a latir frenéticamente en mi pecho.

-Sí fuera por mí, estarías juntos desde hace tiempo -Hace una pausa dejándome sorprendida- Pero ya sabes cómo son las cosas en tu familia. Tienes qué olvidarte de él.

Algo en mi se rompe.

Tiene razón.

Agacho la cabeza mientras mastico mi cena -Lo sé, Donna.

La mujer toma sitio a mi lado y me mira con ojos profundos mientras agarra mi mano con fuerza.

-¿Tus amigas van a salir está noche? -Indaga y asiento- Sal y diviértete, mi amor. Yo te cubriré las espaldas con tus padres -Agrega y me guiña un ojo.

-Gracias, te quiero Donna -confieso.

-Yo también, princesa, yo también.

🌙🌙🌙🌙

Recojo todo mi pelo liso en una coleta de caballo. Me pongo mis pendientes de aro y arreglo mi simple y sencillo maquillaje. Lo único destacable era mi pintalabios rosa mate. Llevo un mono de color blanco, a juego con unas sandalias con una poca plataforma y una chaqueta vaquera.

Salgo de mi casa por el jardín delantero sin qué nadie me vea y camino por las calles iluminadas únicamente por las farolas y la luz de la luna.

El club Náutico de la ciudad estaba situado al lado del paseo marítimo. Tiene piscina, campos de golf, etc...
La gente más rica de la ciudad era socia de ese club, yo lo llamo el club de la hipocresía.
Por suerte a mis padres nunca les llamo la atención pertenecer a eso. Lo qué interesaba era la discoteca de verano organizaba especialmente para los jovenes, para lo que no son socios, la entrada cuesta seis dólares.
La gente prefiere llevar su propio alcohol al paseo y emborracharse allí. Te juntabas con toda la gente joven de la ciudad.

Al llegar camino con la mirada curiosa de algunas persona, no me molesta, al contrario, me gusta qué me miren. No soy cómo ellos, no me gusta ser un clon.
Diviso a Avril sentada en un banco junto a Cody y Lexie.

-Está Slash, y te está mirando -Me informa Avril mirándome sobre mi hombro mientras bebe de su vaso de plástico.

Me tenso y giro la cabeza disimuladamente.