THE INMORTAL (Borrador)

Capítulo 28

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-¡Necesito que me escuchen por que no lo volveré a repetir - dijo Mariè de una manera imperativa.

Mientras ella reclamaba atención, dos guardias se aproximaban hacia ellos de manera simultánea, los dos la observaron atónitos y sorprendidos ante su osadia.

- Nosotros esperábamos a Cate, no a ti - dijo Salvador.

-¡Dejemos que hable la niña! - respondió el hombre misterioso ante su enfado de Salvador.

Los guardias llegaron para llevar a Mariè hacia fuera del lugar, pero el hombre misterioso realizó una señal con su mano dando la orden de que se marcharán del lugar.

- Necesito que encuentren a Juliette, que tiene poder de revivir a los muertos - dijo Mariè Antoiniettte sin pestañear.

- ¿Que tiene de especial esta bruja?- preguntó el hombre misterioso.

- Ella sabe la ubicación exacta de una persona, además tiene un poder oculto -respondió Mariè.

-¿De todos los aquelarres de brujas, sólo conoces a una? - preguntó Salvador.

- Ella proviene del aquelarre de brujas más antiguo y por lo tanto, más poderoso - respondió ella, agregando una frase mas - "¡Es del aquelarre de Trious!"

Los dos hombres se quedaron atónitos con lo que estaba comentando Mariè sobre Juliette.

-¿A quién van a desenterrar? - preguntó Salvador.

(Sólo les diré que está conversación no duró mucho, y hasta ahora no logró decifrar a quien se refería, sin embargo sólo Salvador logró esbozar una ligera sonrisa)
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Una hora antes

-¡Tenemos que concentrarnos en la misión! - dije para que se concentrará en buscar a la princesa del reino.

- ¿Y si preguntamos a guardias si han visto algo raro? - dijo Beatriz.

Estuvimos un buen rato preguntando a los guardias respaldaban el castillo, pero nadie tuvo respuesta alguna del paradero de la prima de Cate, así que decidimos adentrarnos en el bosque.

Me sentía atraído hacia este lugar, tenía la sensación de haber estado aquí en el bosque anteriormente, pero no lo tenía del todo claro, sin embargo a Beatriz si que le parecía haber estado en este bosque y hasta sabía que más adelante del trayecto, esta una cabaña con una pareja de leñadores viviendo.

-¡Este bosque es igual al de mi sueño que tuve hace un tiempo atras, y en ese sueño, todo empezaba de nuevo una y otra vez, prácticamente todo se repetía, pero lo único que cambiaba eran las acciones que yo hacía en ese momento - dije, con una reacción de extrañado del lugar en el que nos habíamos encontrado.

Estábamos al pendiente de cualquier cosa que pasará en ese momento, ya que cualquier cosa sería fundamental para nuestra existencia, los dos teníamos recuerdos malos acerca de este bosque.

En los entrenamientos que haciamos, siempre teníamos que luchar con nuestra peor miedo y derrotarlo, porque para un agente no existe el miedo si luchas para combatirlo.

Y me imagino lo que está delante de nosotros, son nuestro peores miedo que tenemos que combatirlos, para salir victoriosos de esta misión; sin embargo hay algo que no me termina de convencer de todo esto hay una pieza de este tablero que no encaja, pensé.

Por lo visto, este lugar no sólo logró afectarme, sino también a Beatriz ya que ella también sentía miedo al entrar, lo cual significa que hay algo o quizás alguien a quien le tema.
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Unos minutos antes

¡

Erick, estas ahi!- dijo Beatriz, solo escuchaba su eco pero no lograba verla, porque de repente todo se empezó a nublar, esta nube no era como las demás, ya que está era mas densa y oscura, porque todo a mi alrededor oscureció repentinamente.

-¡Sólo escucho tu voz pero no logró divisarte! - exclame, estaba cegado por la neblina.

-¡Quizás si encendemos una fogata con lo que encuentres en el bosque, nos sirva de ayuda para ver lo que hay a nuestro alrededor, hasta podría servirnos de ayuda para encontrarnos el uno al otro y seguir con la misión - dije, sin pensar que haría al pie de la letra todo lo que mencioné anteriormente.

Estaba de espaldas pero sentía que un objeto de acercaba a tal velocidad que la única persona que se aprovecharía de este momento de ceguera sería Cate.

Sentía como poco a poco su espada se iba incrustando en mi espalda perdiendo así la estabilidad y simplemente caí.

Mis párpados los tenía demasiado pesados para mantenerlos abiertos, el sueño me ganaba conjuntamente con el dolor insoportable de la espada, todo estaba oscuro, no había nadie cerca como para que me auxilien. Sin embargo noté una luz muy brillante que procedía del horizonte pero mis ganas de sueño lograron vencerme y me quedé tirado en medio del bosque con la neblina en todo su esplendor, sin nadie que este cerca de mi.

Por otro lado Beatriz había encontrado ramas secas caidas de los árboles y así lado estaban dos piedras, así que pensó inmediatamente en hacer una fogata para que al menos pueda distinguir en que lugar del bosque estaba situada.

-¡Erick, estas ahi! - gritó Beatriz
- ¡Respondeme! - pero esta vez sus grito de auxilio de Beatriz no se escuchaban, era como gritar al vacío, nadie te podía escuchar.
Se empezó a desesperar, el bosque estaba jugando con su mente y la desesperación junto con el miedo.

Este bosque como era como los demás, este era especial porque podía distinguir el miedo y las inseguridades de las personas que pisaban este lugar.

Cate miraba a su alrededor y todo estaba distorsionado, cualquier animal los observaba como si fueran mounstros salidos de cuanto para niños, ya no diferenciaba la realidad con la distorsión.

- ¡Cate, necesitamos salir de aqui, este bosque esta maldito! - mencionó Bart aterrado ante lo que veían sus ojos.

Pero Cate sacó su espada y dio el primer toque, sin embargo Bart lo esquivó mientras que Cate seguía dando toques hacia la nada, hasta que llegaron hacia un punto del bosque donde la neblina estaba en su máximo esplendor pero esta neblina era oscura.
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En el presente

En otro punto del bosque ni tan cerca de Bart, ni tan lejos de Beatriz, estaba Erick caminando a ciegas y Cate dando toques mortales con su espada, hasta que atinó a clavarle su espada a Erick, sin darse cuenta que no estaba matando a un ogro como observaban sus ojos, sino que estaba matando a la persona que amaba y que eligió estar con Trinna que con ella.

Luego de unos minutos, la niebla densa se despejó y de pronto la inmensa oscuridad cesó, llegó la luz del sol iluminando el bosque a toda plenitud, pero Beatriz había apreciado la desgracia de la situación que se vivía con Erick desangrandose en el pasto derramado por la sangre de él.

Mientras que Cate estaba arrodillada con la espada enganchada en una roca como en la historia del Rey Arturo.

Bart estaba a unos metros de distancia de Beatriz, Erick y Cate, pero el distinguía la realidad distorsionada, había logrado conseguir una espada de un guarida real y dijo en voz indistinguible para que el enemigo no lo entendiera:

"¡Sólo espero el momento para matarlos a todos, estas abominaciones de la naturaleza No deberian seguir coexistiendo con las demás personas, yo seré el héroe para Cate y el elegido por Salvador!"