XXV- Mi vida eres tú

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¿Y si la vida es amar?
y ver una flor resplandecer.

¿Y si la vida es aquella que pasa mientras nos vemos frente a un espejo crecer?

¿Y si es perfecta?
y no la sabemos valorar, creyendo en todo aquello que pertenece a otro lugar.

¿Y si tu vida, es mi vida y la de todos los demás, y si es un vínculo, una misma unidad?

Y es que la vida, es vida cuando empezamos a amar.

Son tus ojos a los que no me puedo negar.
Tú mirada tan dulce y distinta a las demás.

Tu piel erizada cada vez que mis manos se disponen a tocar.

Tus labios acompañados de una dulce melodía con las olas que golpean frente al mar.

Tú fragilidad pertinente a la hora de sentir, que me eleva hasta lo más alto y hace vivir.

Llevándome al punto de descubrir que mi vida eres tú, un ángel caído del cielo que no necesita luz, sino que brilla a destello.

Y es que si tú eres noche amada mía yo por ti soy un sueño, hipnotizando tus desvelos con cada beso.

Interminables como la eternidad, como tú y yo en un mundo paralelo.

No llevemos la cuenta del tiempo, abrázame y hazme sentir tu alma y cuerpo.

Porque no darle lugar a nuestros sentimientos, si amarte es lo que quiero.

Nuestro destino es hoy, la densidad del amor se encendió.

Cierra los ojos y déjate llevar, acariciándote suavemente tus miedos se irán.

Y así comprenderás que el amor existe y es real.

Una magia que en segundos te logra enamorar.

-Héctor F. Palavecino

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