Por favor, enamórate de mí | Taemin y Tú

031

Lunes Lleno de Cosas.

Qué podría hacer en día como hoy.
Me siento apenada, muy pero muy avergonzada mas aún no puedo faltar a clases si no estoy realmente enferma.
Quisiera descartar toda probabilidad de encontrarme frente a frente con Taemin. Pero evitarlo sería tan imposible como no sentir nada por Baekhyun.

Realmente pienso que estoy enloqueciendo con todo esto aunque, pensarlo es poco con lo que de por sí ya es evidente.

Luego del fin de semana y de haberme dejado en casa después de la fiesta, Baekhyun estaba totalmente diferente.
Es como que de la noche a la mañana lo que hubiera sido un cálido té ahora es uno totalmente frío, por así decirlo.
Las cosas cambian cuando uno menos se lo espera. Ya lo creo que sí. Y quizá, tal vez siempre ha sido de este modo y no lo he notado.

Pensé que él ha estado cansado aquel día y que hoy todo volvería a la normalidad.

Después de la primera clase, fui en busca de unos supuestos libros a mi casillero. La realidad era que esto solo era una excusa para poder ver a Baekhyun.
Si se enteró de lo sucedido aquella noche, entonces podría ser el mejor momento para explicarle todo.
Fue genial poder encontrarlo, sin embargo, una vez que me acerqué con la mejor sonrisa que podría darle él me miró como si yo fuera una extraña.
Intenté preguntarle qué le sucede, pero antes de poder abrir la boca él solo dijo: "Estoy ocupado ahora, a menos que lo que me digas sea importante entonces lo demás puede esperar".

Me quedé en silencio entonces y lo dejé ir. Sus palabras fueron tan hirientes en ese momento que quise salir corriendo de ahí. Pero no podía, todos notarían lo sucedido y me fastidiarían. Eso era lo que menos necesitaba.
A cambio de todo, traté de calmarme y hacer como si nada hubiera pasado. Tal vez haya tenido un mal día como cualquier persona.

En tres días sería su cumpleaños y quería hacerle el mejor regalo. El único problema que tenía era que no sabía qué es lo que podría gustarle.
Hoy no era un buen día para averiguarlo, claro está. Pero quizá mañana sí lo sea.

Baekhyun

La razón por el que estaba siendo tan frío con (__) era simple.
Aquel día de la fiesta mientras estaba saludando a la gente que conocía, me encontré con Jessica en la cocina.
Conversamos un largo tiempo y me di cuenta que aún podría haber una oportunidad con ella.
Porque mis sentimientos por Jessica no se habían ido, además el ser lo que se podría llamar: "el novio de (__)", quien para entonces era la buena amiga de el tonto ese de Taemin, había llamado su atención.

Tenía que romper con (__), pero ella era buena conmigo y no quería hacerle demasiado daño.
Pensé que la mejor opción sería que ella rompiera conmigo; entonces yo sería un tipo frío, ella se daría cuenta de que no soy lo que esperaba y terminaría la relación.
Tampoco es como si ese Taemin fuera el tipo correcto, porque si somos justos aquí, el que le hace más daño es él, no yo.
Sin embargo, hay un contra en esto: ella es muy ingenua y despistada a veces. Ahora no sé que tan frío deba ser para que lo note.

Hoy no fue tan difícil como esperaba, noté que se sintió mal por lo que dije. Me sentí mal también, pero esta es mi única manera de hacer que las cosas funcionen.
Quiero pensar que de esta manera no la lastimo.

(__)

Al día siguiente fue el mismo cuento: Baekhyun me evitaba y eso era tan claro como el agua.
El  día siguiente también fue lo mismo, me miraba como si fuera una extraña y a la vez como si estuviera enojado. Y, aunque también quise explicar tanto, él solo seguía alejándome.

Hoy es su cumpleaños, hice lo mejor que pude para darle un buen regalo.
No estaba segura de acercarme esta vez pero, es mi novio y es lo menos que puedo hacer.

—Baekhyun...

Estaba asustada para entonces, parada detrás de él.

—Qué quieres ahora —suspiró girando hacia mí.

Sonreí.

—¡Feliz cumpleaños! —extendí la pequeña bolsa de regalos.

—¿Qué se supone que es?

—Es para ti —sonreí una vez más— espero que te guste.

—Yo no te pedí regalos.

—Lo sé pero, en un cumpleaños no es algo que uno pid...

—Basta. No quiero nada de eso.

—Pero Byun y...

—Puedes quedártelo o dárselo a alguien más. Yo no lo quiero —se marchó.

No me dejó decirle nada más.
A estas alturas ya debería estar odiándolo, pero es más tristeza lo que siento de lo que lo otro se trata.
No quiero darle la razón a nadie aún, puede que esté actuando de esa manera por algún problema familiar.
De verdad no puedo saberlo, aunque lo quiera con todas mis fuerzas, no puedo hallar la razón a su forma de actuar.

Digo, quién cambia drásticamente en solo minutos.
Antes entendía que se enojara conmigo, después de todo, era tan torpe con él.
Incluso me gané el enojo de Taemin la primera vez, y no puedo decir nada en contra de ello.
Ahora, sin embargo, no sé cómo rayos explicar todo este asunto.

[...]

Más tarde, cuando salí a dar un paseo fuera de mi cuarto, justo en el instante en el que sentí sofocarme sin haber sol siquiera, Chanyeol apareció frente a mí sin haberlo dicho siquiera.
Choqué mi cabeza en su pecho sin querer.

—Oh, lo siento —dije.

—Qué mas da. No es algo que importe.

—De acuerdo, adiós entonces.

—No estás bien.

—Y tú qué sabes. Tú no sabes nada de mí.

—Sí, como digas.

Tenía razón, no estaba bien. De algún modo me estaba sintiendo mareada y más sofocada, era como si en cualquier momento mi respiración se detendría.
Mi vista se nubló y lo único que pude recordar luego es a Chanyeol corriendo hacia mí.
Todo lo demás desapareció como desaparece una sombra en la oscuridad.