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Supongo que durante todo el tiempo que ha pasado he sido tan tonta como para fijarme en alguien como Baekhyun, alguien a quien no le importé ni en el más mínimo detalle. Sin embargo, quisiera que en su momento halle a alguien adecuada para él.
Una persona que lo ponga en su lugar cada vez que diga estupideces por ejemplo.

Salí del hospital, pero no con Taemin porque se fue antes de que yo despertara, fui con Chanyeol.
Teníamos mucho de que hablar, el tiempo entre nosotros había pasado como el tiempo que toma un rayo al impactar la tierra.
Una gran parte de mí se emocionó y la otra estaba simplemente nerviosa.
Tengo muchas cosas dando vueltas alrededor de mi cabeza, son tantas que no puedo descifrarlas.

Chanyeol notó que estaba en otro mundo y que también tenía frío.
La verdad es que no sé desde cuándo se ha vuelto tan observador, tal vez así ha sido siempre y no lo he notado por pasar la mayoría del tiempo discutiendo y peleando por cosas sin sentido.

—Ven aquí —dijo tomando mi brazo y acercándome a él— ¿Por qué si estabas enferma anoche no llevabas contigo una bufanda?, ¿intuías que llegaría hacia ti?

—Tal vez —sonreí— y... ¿viniste solo a la ciudad?

—No. Yo vine con un familiar

—¿Familiar?

—Mi primo, es casi como un hermano para mí.

—Ah vaya era tu primo, que alegría.

—¿Por qué?

—No lo sé, solo pensé que vendrías con una chica... una novia.

—Es muy pronto para olvidar lo que sentía y siento aún por ti. Pero... ¿qué es lo que sucede?

—Durante el momento que no estabas te extrañé tanto.

—Oh pequeña, ven aquí.

—Solo no me estrujes demasiado.

—No lo haré —sonrió y me abrazó—quisiera que este momento durara una eternidad.

—Me temo que eso no es posible.

—Lo sé, pero al menos quería imaginarlo.

—No te vuelvas a ir por mucho tiempo, ¿de acuerdo?

—De acuerdo.

Mi teléfono sonó.
Era Minho.

—Espera aquí un momento —le dije a chanyeol— vuelvo en un segundo.

—¿Esta todo bien?

—Supongo que sí.

Me alejé.
Usualmente Minho no me llama y mucho menos me manda más de veinte mensajes en un solo minuto.
Lo peor de esto, es que mi teléfono ni siquiera vibró, debería tirarlo a la basura y comprar otro.

—¿Qué es lo que sucede? —contesté enojada— No pudiste solo escribir de qué se trata todo esto en lugar de mandar mil mensajes pidiendo que te conteste.

—Claro, pero ya contestaste así que te diré lo que sucede.

—Que sea rápido.

—Eres un caso.

—Solo dime qué sucede.

—Taemin no está.

—Tal vez solo salió a comprar algo.

—Al inicio creí que estaba contigo.

—Pues al hospital nunca llegó.

—He estado llamando a su teléfono pero suena apagado y ya son muchas horas.

Por favor, enamórate de mí | Taemin y TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora