BLACK STONE ─PETER PARKER [SAGA DEL INFINITO]

CAPÍTULO 29

ACTO DOS | CAPÍTULO VEINTINUEVE

❝Promesa del corazón❞

Si estuviera muriendo de rodillas, tú serias el único que iría a rescatarme. Y si te estuvieras ahogando te daría mis pulmones para respirar. Te tengo, hermano. No, no compartimos la misma sangre. Eres mi hermano, y te amo. Esa es la verdad.

   El sonido de una llamada proveniente de mi celular logra despertarme de un profundo sueño, me refriego los ojos, adormilada. Analizo a mi alrededor para comprender que mi hermana se fue, al ver el horario en el reloj me doy cuenta que el torneo ya terminó, por lo que debí  quedarme dormida. Tomo el celular con mis manos para atender a la llamada de Peter.

Anoche, después del encuentro con Allison en el pasillo, tuve que quedarme con ella con la excusa de que debía ayudarme con unas tareas mientras Peter se dirigió a seguir a los vendedores, por alguna razón, mi hermana se encuentra sospechando de algo, y sé que no nos dejara tranquilos hasta averiguarlo. 

Ella puede ser muy inocente pero cuando pone sus ojos en algo, no para hasta conseguirlo. Por lo que eso fue lo único que se me ocurrió en el momento. Como dice el dicho, maté dos pájaros de un tiro, porque con tantas explicaciones sobre la escuela, termine quedando completamente dormida. Estoy agradecido de no haber tenido nuevamente esa pesadilla. 

— Estuve llamando toda la mañana, Gemm —escucho decir a Peter, sin dejar tiempo a hablar—. La cosa esa que brilla —grita.

Su voz suena bastante exaltada, su obvia agitación solo me deja en claro que algo no esta bien. Sin embargo no puedo tomar mucha importancia ya que apenas comienzo a despertar.

— La tiene Ned... creo que fueron al torneo —suelto un bostezo—. Debió llevarla con él.

— Es peligrosa, Gemm —me informa, al borde de la desesperación—. El equipo esta en el monumento a Washington, no puede pasar por los rayos laser. Puede matarlos.

Aquello hace que me despierte en un instante, enseguida mi pecho se llena de preocupación. Lo único que puedo pensar es en el peligro que mi hermana esta corriendo. 

— Nos vemos allá —determino.

Me toma apenas dos minutos cambiarme por completo la ropa, me visto con el traje y el antifaz de Stone Black. Unos segundos después me transporto hacía el monumento. Si algo tengo en claro, es que no dejare que nada malo le pasé a mi hermana. Nunca más.

  El lugar se encuentra rodeado de policías, quienes ayudan a los adolescentes a salir del ascensor averiado. Ni siquiera me tomo el tiempo de entender lo que sucede, sé que tiene que ver con aquella piedra brillante que dijo Peter.

Mi instinto es el primero en reaccionar, el ascensor esta a punto de caer, mientras los únicos que quedan dentro son Allison y Liz.

Cuando el ascensor comienza a caer, los gritos de las adolescentes invaden mi mente, entre ellos el de mi hermana, así que me lanzo hacia el, con todas mis fuerzas logro frenar la caída pero es demasiado peso para subirla. Llevo mis manos hacía los costados de mis caderas cerrando en un puño, concentrando mi fuerza. Siento la sangre hervir, mis manos traspiradas por la fuerza que estoy usando.