Trigésimo noveno paso; Encontrando esperanza

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-¿Que haces aquí?- pregunta Jack quien me recibe con cara sorprendida. Parece incrédulo ante mi presencia

-Vengo a cuidar a Dan- respondo intentando entrar al apartamento, pero él lo impide tomándome del brazo, le observo, parece enojado- ¿Cariño?

-No- gruñe. Su agarre se hace más fuerte, me duele- No lo vas a tocar- sus ojos están llenos de ira. Me suelto de su agarre y le miro con el ceño fruncido.

-No me vuelvas a agarrar de esa manera- exijo- Vengo a cuidar a tu hermano para pasar el tiempo contigo, y creo que ni eso quieres en este momento- me acerco a su rostro lo que más puedo y lo enfrento- Donde está Dan, Jack- gruño, él parece cambiar su rostro a uno de temor. Me hace una seña con la cabeza y camina hasta las escaleras. Subimos, la primera habitación a la derecha.

-Toca a la puerta antes de entrar- susurra antes de retirarse de mi vista

-Gracias- comento enojada. No estoy para que me traten de esa manera, mucho menos que se aprovechen de mi poca paciencia. Respiro profundo y toco a la puerta- ¿Dan?- llamo. No escucho respuesta. Vuelvo a llamar.

-¿Quien?- pregunta Dan con voz suave

-Sheri- contesto. Hay un largo silencio

-¿Sheri?- pregunta. Su voz parece temblar. Escucho sus pasos sobre el suelo, la perilla se mueve y Dan me mira envuelto en una sabana, como si fuera un monje- Sheri- sonríe- Te abrazaría pero...

-Estoy bien así, gracias- contesto. Mi humor cambia cuando me sonríe

-¿A que vienes aquí?- pregunta entrando de nuevo a la habitación, se sienta en la cama y recuesta su cabeza contra la almohada

-A cuidarte- contesto entrando

-No te creo- ríe. Le muestro la bolsa de medicina y parece sorprenderse- ¿Enserio?- sonrío, pero su sonrisa desaparece después de un instante- Pasar tiempo con Jack, ¿cierto?

-Iba- afirmo con expresión sarcástica- Ya no estoy de humor para ello- no puedo descifrar su expresión, parece... ¿complacido?- Ahora, ¿como estás tu?- acerco mi mano a su frente, su fiebre es demasiado alta- Definitivamente peor que ayer

-O tal vez mejor que ayer- susurra. Se envuelve en la sabana y me observa con una sonrisa- Gracias- y cierra los ojos. Acaricio su rostro suavemente, no suelo cuidar enfermos así que va a ser mi primera vez en ello. Dejo la medicina junto a mis cosas en la mesita de noche y me acerco al baño. Una toalla mojada, sopa de verduras y medicina va a ser suficiente por ahora.

Como Olvidar A Tu ExDonde viven las historias. Descúbrelo ahora