Como Olvidar A Tu Ex

Quincuagésimo tercer paso; Quien quiere vivir para siempre

Para ser sincera no pensé que este trabajo me fuera a costar tanta energía y capacidad mental. Creo estar en mi límite y la verdad no me gusta. El asunto con Jack aún no lo hemos resuelto y eso agrega un peso muerto en mi cerebro. Aún no sé como llamar a esto, y me cuesta un poco pensar en como arreglar esta porquería, así que estoy aquí con Sandra, terminando el trabajo y tratando de no pensar en cosas sin sentido por el momento.

Tengo que arreglar ese asunto rápidamente o me joderá todo el maldito semestre, y no es en lo que tengo que concentrarme. Debo pensar como sacar el tema a flote sin empezar otra pelea, podría preguntarle a Dan por una posible solución, aunque podría ser trampa.

-Hey, concéntrate- reclama Sandra con el ceño fruncido. Hago un puchero y continúo, enserio necesito concentrarme.

Terminamos todo a las ocho de la noche, para nuestra fortuna. Puedo respirar ahora. Tomo mi teléfono para encontrar llena la bandeja de mensajes, algunos son de mi mamá, otros del grupo de la universidad el grupo de la familia... siento como si no tuvieran más que hacer. Maldita sea la gente con su tiempo libre, y uno aquí matándose.

Volviendo al asunto, hay un mensaje de Dan el cual me sorprende; -¿Has hablado con mi hermano?- pregunta

-No- respondo- ¿Por?- siento que es importante, pero por alguna razón lo tomo como una pequeña broma, como si me fuera a decir "Ya arreglen las cosas y dejen de ser tontos", pero ese mensaje no llega y eso me preocupa más de lo normal.

-No lo he visto en horas y no me contesta- eso es lo que recibo realmente. Por un momento pienso en las cicatrices que tiene en sus antebrazos, pero lo descarto rápidamente, no es así ahora, él mismo lo dijo, tengo que confiar en su palabra.

Tomo el teléfono y llamo su numero, timbra tres veces, pero no contesta. Vuelvo a llamar, es el mismo resultado -¿Que haces?- pregunta Sandra con el ceño fruncido.

-Jack no contesta el teléfono- contesto mientras lo intento de nuevo.

-Tal vez está en el baño, ¿sabes?- comenta con la mirada seria

-Hace horas- comento con una sonrisa

-Una carga llena- admite con una sonrisa, no puedo evitar reír con ella. Tal vez estoy exagerando como dice Sandra, pero no puedo evitarlo, me preocupa. Antes de llamar por quinta vez, un mensaje llega de parte de Dan; -Estamos en el hospital.