CAPÍTULO 13

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Nunca había pensado que por una vez en mi vida iba a estar agradecida de que aquí en mi país fuese normal y cotidiano aquello de los matrimonios arreglados entre familia. Pero precisamente así es como me siento ahora con respecto a ese tema.

Antes de despedirme de Hoseok y de darle mi número telefónico para estar en contacto, le respondí a su pregunta con una verdad a medias. Le comenté que estaba casada con Namjoon, pero en vez de decirle que lo habíamos hecho por amor como la mayoría de gente creía o de haberle dicho la verdad, me permití decirle que nuestras familias habían arreglado toda esa farsa.

Ahora, sentada en el asiento del conductor de mi auto, me pregunto seriamente por qué he mentido. Vale, yo muchas veces miento, pero esta vez se siente que la mentira tiene un trasfondo y me encantaría encontrarlo porque sinceramente me siento incómoda con mis acciones.

¿En qué demonios estaba pensando cuando dije aquello? Ahora tengo que cargar con dos mentiras sobre una sola verdad y va a ser mucho más difícil cuando ambas farsas choquen entre sí. Joder, qué voy a hacer.

Miro la hora en el reloj y me sorprendo al ver que son las nueve de la noche. Pasé gran parte del día fuera de casa en busca de distraerme un poco. Luego de salir de casa de los Kim, me dirigí a casa de Yoongi en busca de una distracción de tipo sexual, cosa que conseguí a medias: pude distraerme, pero no con sexo; más bien lo hice con las últimas anécdotas del susodicho con el chico de grandes posaderas del bar gay.

Fue muy divertido para mí escuchar a Yoongi decir que casi se lleva la paliza de su vida —en realidad no dijo eso ya que es muy orgulloso y macho alfa como para admitir aquello— luego de haber intentado nuevamente ligar con el tal Jinyoung y justo cuando según él estaba a punto de conseguir su objetivo apareció un tipo que le sacaba poco más de una cabeza y musculoso con la intención de golpearlo por haberse metido con su chico. Sí, resulta que Yoongi se equivocó y su amor platónico o capricho no mintió al decir que tenía pareja.

La charla se extendió durante varias horas hasta que, sorpresivamente, recibí una llamada de un número desconocido que resultó ser de Hoseok. Estuve hablando con él por sólo un par de minutos hasta que confesó su verdadero objetivo tras la llamada, y yo gustosa acepté su oferta de invitarme a cenar, sin importarme mucho que estuviésemos al ojo de la ciudad.

En medio de la cena decidimos ponernos al corriente y me enteré de muchas cosas, entre esas que luego de haber terminado su carrera logró conseguir fácilmente ser contratado en una clínica privada, la misma en la que internaron a mi padre hace poco, en la cual lo han considerado como uno de los mejores doctores. Me confesó también que ha estado considerando la opción de hacer una especialización en pediatría ya que adora a los niños.

Cuando quise meter el tema de su misteriosa amada de una manera un tanto indirecta —debido a que pregunté cómo iba su vida amorosa— sólo me respondió que su vida amorosa se resumía a su sobrino de meses al cual adoraba y con el que pasaba el rato cada vez que iba a visitar a Dawon, su hermana mayor.

Estuvimos conversando sobre varias cosas más, entre esas algunas cuestiones sobre mi casamiento con Namjoon a las que obviamente tuve que hacerles unos cuantos cambios para que concordara con la versión de la historia que le había dado a Hoseok. Y en cuanto consideramos que debíamos dejar ciertos temas para nuestro próximo encuentro, nos despedimos.

¿Enserio se me ha ido tanto tiempo hoy en sólo eso?

Salgo de la ducha y me coloco mi pijama a pesar de que aún es temprano, pero dado a que hoy ha sido un día demasiado agotador decido permitirme el lujo de darme una siesta.

***

Y sin más, la presencia de alguien en medio de mis sueños me hace despertar, sobresaltándome al instante al ver que mi sueño ha sido un reflejo de la realidad.

ESPOSOS CON DERECHOS;️ K. Namjoon ✔ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora