ᴍysᴛᴇʀʏ ᴛᴇᴀᴍ {sᴛᴀɴᴄᴇsᴛ]

El dolor

Stanchez... BiFord.. stancest ¿Ahora que más falta? ¿Riford? Jajsja

Stan se separó de Rick alzando la mirada, este se encontraba mirando algo borroso y las luces del lugar no ayudaban mucho ya que era de colores. —Yo me voy —dijo entre cortado tratando de hablar bien.

—Peross la eztamoz pasantdo biem —contesto peor que Stan mientras se levantaba del suelo en donde había caido hace unos segundos.

—¡Necesito ir con Ford y ese mal nacido! —tomo el brazo de Rick y lo paso por sus hombros.

Ya en la calle el aire frio y el atardecer recien pasado haciéndose presente la oscuridad hizo que se sintiera peor y con ello de nuevo su cabeza aprovechará para torturarse ¿Por qué tenía que golpearle tan fuerte algo que sinceramente no iba a funcionar? Por dios, eran hermanos y para acabarla del mismo sexo ¿Por qué su mirada se le hacia tan sensual? No podía evitar tocar sus labios y pensar que el hacia lo mismo con solo recordarle ¿Por qué tenía que hacerle daño?

Dejó a Rick en la banca mientras ambos terminaban de vaciar otra botella. —Ahora entiendo tu dolor —gimio Stan mirando a Rick quien dejaba su mirada perdida en su vodka, pensando que detrás de ella estaba Will para regañarle y tratarlo de calmar.. odiaba ver las megillas del de cabellos azules cuando llegaban a llenarse de lágrimas. Tocar sus frágiles megillas se había convertido en una obsesión que le enloquecía.

Alzó la mirada encontrando a Bill con una sonrisa completamente orgullosa. —¿Que quieres de mí? —dijo Stan algo cansado pasando una mano por su rostro limpiando todo rastro de lágrimas— Estoy mal por ti, por el ¿Aún tienes que hecharmelo en cara?

Este no contesto pero no obstante comenzó a reírse mientras se posiciona a su izquierda. —Si ¿Que tendria de divertido si no? —continuo con su risa haciendo que Stan se levantará y le diera un golpe dándose cuenta que era parte de una ilución por culpa de su adicción.

—Te odio —maldijo bajando su puño mientras susurraba insultos y tomaba su mano.. una lágrima callo a su mejilla ¿Por qué era débil ahora?— ¿Que me has hecho, pedazo de imbécil? —gimoteo sabiendo que su gemelo lo había hecho así.

(...)

—Demonios es el tercer lugar al que vamos y ni rastro de estos dos ¿Otro lugar? —pregunto fiddleford pasando su mirada al asiento de atras.

—Yo caminaré un rato.. si lo encuentran me llaman.

—Pero Stanford.

Este azotó la puerta detrás suyo, camino unos metros y giro la esquina ¿Por qué Stanley tenía que ser tan irresponsable? Pero algo que igual le estaba torturando como agujas era el pensar si había visto lo que hizo con Bill— ¿¡Por qué soy tan idiota!? —grito dándole un gran golpe a la pared sin éxito de hacerle algún daño solo llevándose una punsada en este, escucho unas risas y alzó la mirada molesto encontrando a alguien de cabello azul riéndose con una botella en mano, de inmediato le reconoció y corrió tomándolo del hombro.