ᴍysᴛᴇʀʏ ᴛᴇᴀᴍ {sᴛᴀɴᴄᴇsᴛ]

• Parte 67 •

Una corazonada le hizo despertarse con desesperación a horas de la madrugada. Su corazón se agitabá y se sobresaltabá de una manera extraña.
Era una sensación bastante parecida a la adrenalina.

Podía sentirla en sus huesos esta vez. Quería saber qué significaba y sin pensarlo más salió de los brazos de su "acompañante" de esa noche. Tomó con furia sus llaves y salió encendiendo su auto. Quería regresar con Rick a su habitación de hotel y hablarle sobre lo que sentía, ese presentimiento raro que le hacia querer llorar de angustia.

Soñar con los ojos abiertos era algo que siempre caracterizó a Stanford, jamás decía sus esperanzas a los cuatro vientos pero era tan modesto al recordarse los a las personas más cercanas a sí vida cada minuto. Fiddleford se había tomado el tiempo de notar que lo hacía más veces en un día de las que se había bañado en un año.

- ¿Lo sientes en los... Hueso? -pregunto Rick como un terapeuta. Con la excepción de que este fumaba un poro de marihuana.

-Es extraño, ¿Crees que sea una infección? -adquirio en jugarreta mirando a su amigo.

- No, No, lo que pienso es que estás muy drogado -hablo levantándose de su lugar para comenzar a empacar sus cosas- se que estamos un poco cansados, lo mejor será salir del país antes de que nos atrapen.

-¡Recién llegamos! -exclamo Stan agobiado.

- Colombia ya no es lugar para nosotros. Ya nos arrestaron dos veces en los últimos tres meses. Este país agradecerá que nos vallamos -susurro con un poco de pena hacia Stan. Pena de que se irían y dejarían de ganar dinero fácil- creo que somos un problema para la economía o algo así.

Stan bajo la mirada. Rick podría tener razón, estaba demaciado drogado como para saber qué estaba haciendo las cosas mal. Tal vez una pisca de decencia quedaba dentro suyo y eso era lo que molestaba.

O, era que Ford estaba en problemas.

Se acercó a su maleta que estaba más parchada que su abrigo, y con algo de descontento comenzó a llenarla. Pero, al mismo tiempo buscaba su teléfono americano en alerta de alguna llamada de Ford. Debería estar por esa habitación, mala suerte que según su amigo de cabello azul tenía razón con que tenían seis horas para abandonar el país.

-¡Fiddleford! -grito el chico de cabello castaño al notar como su amigo comenzaba a flotar en el aire. En un intento desesperado se acercó hasta el y sujetando la cuerda trato de atraerlo. La cabeza de su amigo se había sumergido en el portal, tal vez algo ya se había comido esa extremidad pero por nada del mundo lo dejaría ir. No a él ahora.

Un grito agudo por parte de fiddleford llamo más su atención. Su amigo estaba en serios problemas y el necesitaba ayuda. El portal era demaciado fuerte para él.

-¡Necesito TÚ ayuda! -adquirio Ford en un intento desesperado de encontrar ayuda de su Musa.

- Adoro los finales felices -susurro Bill ante la lejanía mirando como fiddleford se metía cada vez más al portal y las huellas de los zapatos de Stanford marcaban más distancia en muestra de que ahora, era el portal quien aplicaba física contra suya.

Cada acción tiene una reacción. Recordaba toda su vida desde que comenzó a leer de Newton como un ejemplo. O bueno, como uno de sus ejemplos a seguir.

Tenía miedo, no podía evitarlo. Sus palmas sudaban y su amigo se le iba de las manos.

Entre las luces del portal pudo reconocer unos ojos amarillos, esos que tantas veces trato de retratar de nuevo y que estos últimos días salían en su diario como si nada. ¿Era acaso esa persona que tanto odio?

En un último intento de Ford. Se hizo de la palanca del portal y con esfuerzo comenzó a dar vuelta a la cuerda en este como un tipo de polea. Tratando de atraer a su amigo para de la misma forma ejercer presión sobre la palanca y poder apagarlo sin necesidad de regresar hasta el laboratorio.

Su amigo comenzaba a regresar, tal vez esos segundos que pasó ahí había parecido horas pero estaba seguro que eso había dañado a su amigo. Rogaba que no fuera psicológicamente.

Lo siento en los huesos.

Dijo una voz en medio de la habitación que abrió los ojos de Stanford. Sin que dejará pasar un momento más su amigo salió y al salir proyectado del portal fuera directo a la palanca para así apagar el proyecto.

Ford cayó unos metros más lejos. Se encontraba acostado y le tomo unos segundos recorporarse. Se sentía un poco cansado pero la adrenalina fue más fuerte. Se levantó de sopeton y corrió hacia su amigo que se encontraba de rodillas frente a la palanca. Parecía que quería entender algo pero al mismo tiempo su mirada perdida y un ojo en constante parpadeo no le daba buena espina.

-¿¡Funcionó!? -exclamo tratando de regresar a su amigo.

Fiddleford giró su cabeza de golpe noventa grados y lo miró con una furia espeluznante. Un escalofrío recorrió la espalda de Ford, en un intento de ayudar a levantar a su amigo le ofreció su mano.

Este la tomó pero en unos segundos, cuando apenas la rozo. Se hizo hacia atrás y comenzó a combulcionar. Hacia movimientos raros que Ford interpretó como una señal de alerta.
Asustado agarró los hombros de su amigo y comenzó a agitarlo y (aún que no era la mejor manera) a gritarle.

-¡DIME ALGO! -grito asustado y desesperado.

Su amigo se levantó y volvió ese tic de que solo un ojo parpadeará.

- Cuando Gravity falls y la tierra sean destrozos, teman a la bestia de un solo ojo -dijo fiddleford como si se tratara de un cántico de una leyenda.

Ford tomó su hombro en busca de consuelo. -No entiendo fiddleford. Lo que dices carece de sentido -confesó preocupado.

Su amigo se giró enojado y en señal de ofensa se levantó. - Esto es el fin del mundo, Stanford. Debes acabar con ella si no quieres que él nos destruyá -hablo exaltado haciendo movimientos con sus manos.

-¿Él? -pregunto haciendo énfasis en la palabra.

- Bill, esta de regreso.

Ford dejó caer su mandíbula, pero recobro las palabras. -Imposible. Él está... muerto.

- Es horrible haya dentro. Necesito olvidar todo esto. ¡Me largo! -exclamo paranoico y lanzando su bata de laboratorio.

Ford estaba destrozado, el era su amigo y ahora también lo abandonada.
Sin que pasara más tiempo comenzó a escuchar voces. Pequeños tormentos que comenzaron a molestar.

¿Listo para jugar? Pequeño peón...

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Lean todo 🖤

Lo sé, me estoy tardando en actualizar. Aún así estoy intentando pero como todos los escritores decimos: no have time.

Estoy practicando inglés ya que me acabo de mudar a estados unidos, tengo muchos cambios y aún que no salgo mucho de casa intento seguir en contacto con mi ciudad natal.

Well, una noticia es que estoy muuy activa en la comunidad oficial de GFA (Gravity falls amino) ¿Ya descargaste? ¿Ya me sigues? ¿¡Ya viste las hermosas historias que estoy subiendo!?

- inhales - seré más activa, intentaré prometerlo y adoro con toda mi alma sus comentarios, me alegran la existencia y es ahora cuando más soledad me rodea por el hecho que si me dicen una oración en este país solo entiendo "hola"

Bien, cuidense, coman patatas y síganme en amino que puede que pronto su servidora sea la voz de la radio oficial de la comunidad 👀🍃