45. Te amo, te amo, te amo...

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Los temores de Yuri habían regresado. Una simple platica con Wang Hong y su pasado oscuro regresó, los recuerdos que pensó que estaban perdidos, llegaron. Yuri pudo recordar el rostro de uno de los sujetos que lo mancilló.

Piel morena, bronceada, ojos color verde, pestañas largas y chinas, cejas gruesas, y barbilla ancha.

Celestino.

Cómo podía ser esto? Acaso esto era una mala broma del destino? Celestino, el hombre que marcó la vida de Yuuri y de Viktor era la misma persona que marcó la de Wang Hong y la del mismo Yurio.

Cuando Wang Hong describió a su primer amor y padre de su hijo, Yuri sintió un escalofrío correr por su espina dorsal. Su cuerpo temblaba y sudaba en frío. Era él, era el mismo hombre qué le violó cuando niño. Celestino era la misma persona que violó a la hermana de Viktor. Ahora Yuri entendía la obsesión de Viktor, él debió saber todo esto desde el comienzo. Esto también explica la obsesión de Otabek por Celestino. Yuri tuvo que utilizar una fuerza sobrehumana para que los invitados no notaran su malestar. Yuri quería salir rápido de ahí, quería estar solo, quería llorar, quería llorar.

Cuando llegaron a casa y acostó a Lev en su cunita, Yuri sintió paz en su corazón. Lev le brindaba la paz que Yuri necesitaba. La paz no le duró mucho pues en cuanto cerró sus ojos y sucumbió al sueño los recuerdos que creyó perdidos regresaron.

Tres hombres, uno de piel morena con cabello castaño y peinado de una coleta, le sujetó fuertemente de las manos contra la pared. Yuri estaba experimentando su primer celo, acababa de salir de la mansión de Viktor dónde tuvo una pelea con el ruso mayor minutos antes. Yuri salió corriendo de ahí cuando Viktor utilizó su voz de alfa con él. Yuri corrió por las oscuras calles hasta que repentinamente sintió un gran acaloramiento que le nublo la vista. Lo que siguió, Yuri lo recuerda muy apenas. Lo siguiente que vio fue como el hombre moreno al cual los otros dos llamaban Celestino le besaba mientras ejercía fuerza en sus manos.

Yuri volvió a vivir el frío de la pared tocando su piel, su cuerpo temblando y sintiendo qué se quemaba, su entrada lubricante y punzante, pero ante todo, el asco que sentía con los besos de ese alfa. Yuri intentó zafarse y mordió a Celestino en la mano, lo que provocó que este se enfureciera y lo aventó contra el suelo. Yuri perdió el conocimiento por unos momentos y cuando despertó los hombres lo sostenían de las manos y los pies. Yuri gritaba e intentaba liberarse del agarre, lo que sintió después fue un desgarrador dolor en su entrada, ya no virgen. Yuri afortunadamente perdió el conocimiento después de unas cuantas estocadas de Celestino. Para su fortuna, no tuvo que estar consciente cuando los otros dos pidieron su turno. Cuando Yuri abrió los ojos ya estaba en el hospital con Viktor a su lado.

Yuri volvía a vivir todo eso en sus pesadillas. Cuando abrió los ojos y sintió su cuerpo apresado por un abrazo se asustó. Por unos momentos creyó que eran esos hombres, pero al escuchar la voz de Otabek se tranquilizó un poco y por fin pudo llorar desahogándose en los brazos de Otabek. Se estaba tranquilizando cuando se escuchó el llanto incesante de Lev. Al principio Otabek ignoró el llanto del infante, pero al notar que el menor no paraba, se levantó de la cama y dejó a Yuri acostado. Pareciera como si Lev sentía el dolor que su madre sentía.

—Ya bebé, ya... Aquí está papá. Te asustó el llanto de mamá? Es así?—Otabek tomó a Lev y lo mecía en sus brazos alrededor del cuarto.—Tranquilo, tranquilo—Lev parecía no querer cesar su llanto.

—Dámelo a mi.—Dijo un rubio con los ojos muy hinchados y la voz ronca de tanto llorar. Yuri estiró los brazos para recibir al pequeño.

—Yura, no creo que sea buena idea—Yuri hizo caso omiso y siguió estirando sus brazos para tomar al menor—Está bien, no te preocupes.—Otabek entregó el cachorro a los brazos de su madre. Mágicamente el infante paro de llorar.

Juegos Del Destino❄️💙[Terminado]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora