Doble Apuesta

Parte 3

Llevamos una media hora mas o menos desde que llegamos al parque de diversiones y por el momento solo hemos subido en las tazas gigantes y los carros chocones.

---¿Qué te parece si empezamos a subirnos en juegos mas extremos?---Dice Hipo señalando la montaña rusa---Los carritos chocones ya aburren un poco.

Sonrío tomando lo ultimo de mi algodón de azúcar y llevandolo a mi boca.

---Me parece genial. ¡Vamos antes de que la fila sea mas larga!

Corro en dirección a la fila de la montaña rusa y para mi sorpresa solo hay cuatro personas, dos chicos y dos chicas. Hipo llega a mi lado y las cuatro personas que estaban enfrente de nosotros entran y se ubican en los primeros vagones. Muestro mi manilla al chico que, al parecer, maneja la montaña rusa y me deja pasar sin problema. Me siento en el vagón de la mitad y Hipo toma asiento a mi lado.

---Espero que no te den miedo estas cosas---Habla el castaño, poniéndose la seguridad.

---Nop, es más, me encantan las cosas extremas.

Termino de ponerme mi cinturón de seguridad y lo miro.

---No te lo creo, apuesto a que no seras capaz de llegar a lo más alto de la montaña rusa sin haber gritado.

La baranda de seguridad se baja automaticamente, dandome a entender que ya esta por arrancar.

---Apuesta aceptada---Digo mirando hacia el frente en cuanto siento que nos hemos empezado a mover.

El "tren" avanza lento y poco a poco comienza a subir hasta lo mas alto de la montaña rusa.

---No puedo creer que aún no hayas gritado---Habla el ojiverde cuando estamos a pocos metros de llegar a la cima.

---Ahora reclamaré mi premio por haber ganado la apuesta---Digo volteando a mirar al castaño.

---¿Y cual es tu premio?---Indaga en cuanto el "tren" para en toda la cima.

---Esto---Respondo dándole un corto beso en los labios para que después el "tren" baje en picada a toda velocidad.

Después de unos minutos nos encontramos bajándonos de la montaña rusa, que a mi parecer, fue un recorrido muy corto.

Salgo por completo de la atracción y siento como toman mi muñeca y me voltean, choco con un pecho y al subir mi mirada me encuentro con la de Hipo.

---¿Qué fue eso de hace rato?---Pregunta sin poner distancia entre nosotros.

---Estaba reclamando mi premio---Respondo sintiendo sus manos soltarme la muñeca para después pasarlas por mi cintura---He ganado la apuesta.

---Me parece que no ha sido un buen premio ¿Que tal si te doy uno mejor?---Pongo mis manos detrás de su cuello y acaricio su cabello.

---¿Cual seria ese premio?

---¿Te gustaría ser mi novia?

---Sí, aceptaré este premio, me gusta mas que el anterior.

Él baja un poco la cabeza para quedar a mi altura y luego besarme. Es un beso lento y suave, muy diferente a otros besos que he tenido. Su agarre en mi cintura se afirma y yo lo atraigo más hacia mi (si es que es posible).

Ahora se que tengo a Haddock en la palma de mi mano. Nueva York, nos veremos muy pronto.

♡♡♡

---¿Ahora que harás si ya son novios?---Me pregunta Heather saliendo de su cuarto y entrando al mio.

---No lose, comenzaré a ser muy melosa. A Hipo no le gusta la gente así, me lo dijo una vez---Respondo entrando detrás de ella.

---¿Y si no funciona?

---Ya inventaré algo.

Me acuesto en mi cama mirando hacia el techo.

---Llamalo, comienza a ser intensa, todas las personas odian eso, hasta yo odio a la gente intensa---Aconseja la pelinegra.

---Buena idea.

Tomo mi teléfono y busco el de Hipo, él mismo se ha auto-guardado como hombre sexy, pero en cuanto llegue a mi casa le puse Haddock. Suena una, dos y a la tercera vez contesta, pongo el altavoz.

---Hola Astrid ¿Que pasa?

---Nada, solo quería saber si habías llegado bien a tu casa---Miro a Heather en busca de ayuda.

Ella mueve sus labios intentando decirme algo, pocos segundos después le entiendo, "Dile que lo extrañas" me vuelve a decir sin voz alguna.

---Sí, he llegado bien. Gracias por preocuparte.

---Es que te extraño---Hablo haciendo caso a Heather, ella se ríe y levanto una ceja en su dirección.

---Hace media hora que nos despedimos, cariño---Tapo mi boca para no soltar una risa en cuanto escucho su apodo, Heather hace lo mismo.

---Sí, tienes razón---¿Nos veremos mañana en la universidad?

---Sí, claro cariño. Ahora debo descansar. Hasta mañana.

---Hasta mañana...cariño---Dudo un poco antes de decir lo ultimo.

En cuanto corto la llamada, las carcajadas de Heather suenan por todo el apartamento.

---No puedo creer que enserio esto, este pasando---Comenta la ojiverde parándose de la silla para después acostarse a mi lado.

---Ahora tengo tres meses para que rompa conmigo ¿Cierto?

---Cierto y para eso necesitas energías, así que me iré a dormir, mañana hay clases.

---Van a ser unos meses muy largos---Digo apagando la luz de mi habitación.

---¡No lo dudes!---Exclama Heather desde alguna parte del apartamento. ¿Porque vivo con esta loca?

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¿Les está gustando la nueva historia?
Díganme lo que piensan sobre esta historia, los estaré leyendo.

Los quiero!!

Au revoir.