Memories 1 Inicia el viaje

3.6.9 Club de amigos de Tim

—Maney ya es noche ¿Por qué aun estás aquí?—Empezaba a oscurecer y por fin después de una tremenda regañiza Tim salió de su casa al jardín.

—Por la misma razón que tú.—Ella seguía sentada en aquel árbol, y volteó su cabeza para mirarlo con una sonrisa.

—Gracias por esperarme pero ¿Qué estuviste haciendo tanto tiempo fuera? ¿No te dio frío? Recuerda que estamos por meses fríos...—Comentaba Tim preocupado caminando hacia ella.

—No te preocupes, siempre me las he arreglado. —Reía discretamente, apoyando sus brazos cruzados en su rodillas, Tim se sentó juna su lado.

— ¿Quieres una bebida caliente o un suéter?—Le ofreció su amigo.

—No, así está bien. Muchas gracias. —Volteó a verlo. — ¿Qué pasó con tu mamá?

—A ti te odia más y dijo que no quería que volvieran a entrar a la casa...

—Jijiji Qué novedad. —Ella se rio cautamente, llevándose una mano a la boca. — ¿Recuerdas cuando dijo lo mismo de mí?

— ¿Cuál de todas las veces?—Él también se reía.

—La primera. —Continuó hablando con una sonrisa en su cara.

—Sí. Jamás podré olvidar ese día. Fue muy gracioso, aunque en ese momento no...—Su sonrisa bajó un poco.

—Pues claro que no. cuántos años teníamos... ¿Ocho, nueve?

—Algo así. —Miró al cielo, recordando. —Pero volviste, al día siguiente...

—No iba a dejar a mi amigo... Y menos si ya pertenecía al "Club de Amigos de Tim". Además ya había pagado mi membrecía, y de por vida...

— ¡Maney! ¡Todavía te acuerdas de eso!—Tim se llevó las manos a la cabeza, frotando su gorra. Se alegró mucho cuando se dio cuenta de que Maney recordaba ese juego de niños.

— ¿Cómo podría olvidarme? El pago es invaluable y... Es una de las cosas más importantes de mi vida...—Y cuando acabó la frase, abrazó a su amigo que estaba sentado a su lado.

—Yo soy el que tiene que decir eso...—Tim sonrió y también la abrazó. En ese instante, el celular de Maney sonó. —Es mi tía, ya tengo que irme a casa...—Dejó escapar un suspiro, y su cara cambió a tornarse una más triste. Se levantó del árbol y se puso frente a Tim.

—Claro. Nos vemos el lunes.—Dijo Tim tratando de sonreír, él también se levantó del árbol y caminaron en direcciones opuestas, Tim hacia su casa y Maney a la calle. La noche había caído, y el frío ya había comenzado...