Capítulo 11

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Clarke se fue a su celda a coger el paquetito. Estaba cansada de todo aquello, se lo entregaría y no se volvería a meter en más líos. Estaba harta de esas dos presas que la trataban como una marioneta. Como una criada a la que pedir favores. Le daría la droga y se olvidaría por completo de Lexa y Octavia. Bastante había aguantado ya.

Mientras caminaba observó a Bellamy que paseaba entre las celdas.
El chico al verla, la llamó para que se acercara.

La cogió del brazo y se la llevó sin que nadie se diera cuenta. Entraron en un pequeño cuarto de la limpieza.

-¿Que pasa?- preguntó extrañada al ver la discreción del funcionario.

-Me apetecía verte.- Dijo acariciándole el arañazo de Clarke. -¿Qué tal estás?

Clarke sonrió. Le cogió por el cuello y le atrajo hacia ella chocando sus labios. -Perfectamente.- Susurró en ellos.

El beso se hizo más intenso. Bellamy la acariciaba la espalda mientras sus lenguas bailaban entre ellas.
El chico se dispuso a quitarle la camiseta a la rubia cuando el walkie sonó.

-Hay una pelea en la segunda planta. ¿Bellamy donde estas?- Dijo la voz.

El chico suspiró separándose de Clarke. -Ahora voy...- Contestó apretando el botón. -Estaba en el baño.

-El deber te llama.- Comentó Clarke.

Bellamy suspiró al ver que no podían continuar y la volvió a besar. -Seguimos en otro momento...- Susurró en sus labios.
Clarke asintió mordiéndose el labio. -Tengo tiempo de sobra...- Bromeó.

Bellamy le dio un último beso y salió de la sala. -No vemos luego.- Se despidió dándola un último repaso con la mirada.

Clarke sonrió y continuó su camino a la celda. Una sonrisa tonta apareció en ella. Bellamy siempre estaba ahí. Siempre conseguía que su día de mierda cambiara a ser un buen día.

La chica salió de sus pensamientos y entró en su celda. -Hola.- saludó alegremente a Raven que estaba sentada en su cama rodeándose las rodillas.

-Hola.- Contestó seria mirando un punto fijo tambaleándose de un lado a otro ligeramente.

-¿Estás bien?- Preguntó Clarke al ver a Raven tan rara. -Tienes los ojos rojos...- Comentó.

-Tengo catarro.- Se apresuró a contestar Raven todavía con la mirada perdida y con una voz entrecortada.

Clarke no le dio más importancia, se acercó a su cama y cogió el neceser de baño, donde había guardado el paquetito.

Su cara de felicidad cambió a una alterada al no encontrarlo ahí. La rubia empezó a perder la calma buscándolo por toda la celda. Miró debajo de la cama, entre las sábanas, debajo de la almohada...
-No es posible...- Se repetía a si misma nerviosa. -Me lo han robado... Mierda mierda...
Clarke se puso una mano en la frente y cerró los ojos intentando relajarse. -A ver... Nadie sabía el escondite...- Reflexionaba en alto intentando encajar las piezas. -Nadie... Nadie excepto...- La rubia miró a Raven. La morena seguía perdida en sus pensamientos mientras se movía y tiritaba con lágrimas en los ojos.

-Mierda Raven dime qué no has sido tu.- La gritó Clarke desesperada sentándose a su lado y cogiéndola la cara obligándole a mirarla a los ojos.

-Yo...- Tartamudeó la chica.

-Porfavor dime qué no has sido tú... - Insistió Clarke mientras se la cristalizaban los ojos.

Raven rompió a llorar. -Te juro que no quería... Te lo juro... Pero me estaba llamando Clarke. Lo intenté pero yo...

Clarke se mordió los labios. Una mezcla de enfado y tristeza se apoderó de ella. Octavia la iba a matar. Literalmente. Pero ahora tenía que preocuparse en algo más importante. Su amiga había vuelto a caer en la oscuridad...

-¿Te duele algo...?- Preguntó con miedo.

-Solo estoy un poco mareada...

-Mierda Raven te podría haber dado una sobre dosis... Te podrías haber muer...

Raven se lanzó a sus brazos sin dejar de llorar. -Lo siento...- Sollozaba. -No quería... De verdad que no quería...

Clarke la rodeó con sus brazos. Estuvo así varios minutos. Esperando a que la respiración de su amiga se calmara.
Raven termino quedándose dormida. Clarke se levantó y caminó de un lado a otro de la celda mordiéndose las uñas. Definitivamente todo la salia mal. ¿Que iba a hacer ahora? No podía presentar en el baño sin nada... Pero quizás era peor quedarse en la celda... Octavia se cabrearía aún más.

Suspiró. De cualquier forma, esa noche sería un completo infierno.

***

Clarke se movía nerviosa por el baño. Eran una gran sala en la que había un banco en el centro, y a los lados pequeños aseos y duchas.

Se sentó en el banco y pensó en qué le iba a decirle a Octavia. Obviamente no iba a decir la verdad. No podía hacerle eso a Raven, Octavia la mataría. Tragó saliva imaginándose su reacción. Si se tenía que defender, iba a hacerlo. Solo llevaba una clase de lucha pero no era tonta, todo el mundo sabía dar puñetazos.

Oyó un ruido y se levantó rápidamente. Octavia y Lexa entraron en el baño, pero para sorpresa de Clarke, la castaña se quedó apoyada en la puerta mientras se encendía un cigarrillo.

Clarke respiró ondo al ver como Octavia se iba acercando poco a poco hacia ella.
Esa mirada asesina hacia ella hizo que todos los pensamientos de antes se esfumaran. El miedo la estaba invadiendo.
-Tengo prisa. Dámelo y acabamos con esto.- Ordenó la morena.

Clarke se mordió el labio intentando buscar como decírselo. -¿Estás sorda?- Preguntó enfadada al ver que Clarke hacia oídos sordos a su orden. - Aquí no hay cámaras. Dame mi puta droga si no quieres llevarte una torta de regalo.

-Es que...

Octavia la empujó contra la pared. -¿Me estás vacilando?- Gritó. -¡He dicho que me la des!

-Me la han robado.- Soltó Clarke.

Octavia se separó de ella y dibujo una sonrisa tonta. -No me hace ni puta gracia. Deja de mentir y dámelo.

-No estoy mintiendo.

La sonrisa de Octavia desapareció de su rostro. -¿... Qué?

-Que no la tengo.- Repitió Clarke intentado alejarse de ella disimuladamente.

Octavia perdió la calma y se lanzó a Clarke agarrándola de los pelos y soltandola un puñetazo en la cara. Clarke intentó defenderse colocando sus brazos delante para protegerse el cuerpo. Esquivando los puñetazos y las paradas que le brindaba la morena. Pero a la vez llevándose varios golpes por todas partes.

En una de los puñetazos que soltó Octavia, Clarke aprovechó para cogerla del brazo y retenerla para luego pegarla un rodillazo en la cara.

Octavia retrocedió escupiendo sangre.
La rubia miró de reojo a Lexa que seguía fumando como si nada, observando la pelea y con un rostro sorprendido ante aquel último golpe de la rubia.

-Ahora sí que estás muerta.- Octavia fue a por ella pero Clarke huyó rodeando el banco central del baño. Haciendo círculos sin parar en los que Octavia no la alcanzaba debido a su mareo por el golpe en la cabeza.

-Te juro que no vas a volver a ver la luz del día.- Amenazaba Octavia sin dejar de perseguirla.

-Octavia viene alguien.- Alertó Lexa desde la puerta.

Pero la morena seguía con su mente fija en su objetivo. Una Clarke que estaba herida, pero que continuaba huyendo con éxito.

Lexa se asomó al pasillo y vio como la luz de una linterna se acercaba.
Rápidamente fue a por Octavia agarrándola de la cintura y arrastrándola hasta la puerta mientras está seguía soltando insultos y amenazas.
Sacándola del baño y dejando a Clarke sola. Jadeando e intentando recuperar la respiración mientras intentaba aguantar el dolor de sus golpes.

ENTRE REJAS | clexaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora