Capítulo 26

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-Oye Clarke ¿Te queda mucho?- Se quejaba Lexa sentada en una silla del taller de arte.

-No te muevas. Ya casi está.- Decía Clarke detrás del lienzo dando pinceladas y pinceladas concentrada.

Lexa suspiró aburrida. -Se me está durmiendo un pie.

-Quieta.

-¿Puedo verlo ya?

-Aun no...

-¡Venga quiero verlo!

-Espera...

Lexa se apoyó molesta en la silla de brazos cruzados.

-¡Ya está!- Gritó Clarke alzando el pincel. Rápidamente Lexa dibujó una sonrisa y se levanto acercándose al cuadro.

Nada más verlo, Lexa se quedó boquiabierta. -Clarke es precioso...

La rubia se sentó a su lado observando el cuadro. -¿Te gusta?

Lexa lo examinó detenidamente. Era un retrato de ella. Estaba sentada en una especie de trono hecho de ramas de árboles. Tenía el pelo recogido de una forma peculiar, un vestuario extraño y una pintura negra al rededor de sus ojos que caía en forma de lágrima haciendo que sus ojos verdes resaltaran aún más, además de un símbolo circular con doce puntas entre ellos.

-Era una historia que me contaba mi madre.- Explicó Clarke al ver a Lexa confusa. -Habla de una chica que viaja a la Tierra en una nave para averiguar si es habitable.- Lexa escuchaba con atención sin dejar de mirar el cuadro. -El caso es que la Tierra ya estaba habitada por terrestres organizados en clanes, y ella es la comandante de todos ellos.- Lexa sonrió imaginado aquel mundo. -Cuando la chica del espacio y la comandante firman la paz y empiezan a conocerse, las dos se enamoran.- Clarke hizo una pausa y se inclinó apoyando su cabeza en el hombro de Lexa mientras las dos observan el cuadro. -¿Y qué pasó con la comandante?

-La asesinan y muere en manos de la chica prometiendo que siempre estará a su lado para protegerla.

-Y eso haré.- Lexa acarició la cara de Clarke. -Como comandante, siempre protegeré a mi princesa.

-Que idiota eres...- Rio Clarke dándola un beso y acurrucandose en ella.

Estuvieron unos minutos en silencio sonrientes notando la respiración de la otra.

De repente la sonrisa de Clarke desapareció. -Lex... Hoy sale Octavia de aislamiento...

Lexa se puso seria y la miró. -El otro día me amenazó en el patio.- Siguió Clarke observando el cuadro. -Me quiere muerta...

-Clarke.- La llamó Lexa. -Clarke mírame.

La rubia obedeció. Lexa la rodeó la cara con la manos. -Octavia no va a hacerte nada.- Dijo segura. -No lo voy a permitir.

Clarke sonrió y volvió a saborear sus labios. -¿Por qué eres tan increíble?- Susurró.

-Porque me haces serlo.

***

Clarke caminaba por el módulo perezosamente. Ese día había estado ayudando en la enfermería y había sido agotador. Lexa se había quedado en el gimnasio ejercitándose y la rubia había decidido darse una ducha para relajarse y descansar.

Entró en el baño extrañada de que estuviera vacío y  se dirigió a uno de los lavabos para colocar su neceser y sacar el gel.

Se miró al espejo y sonrió al pensar en esas últimas semanas. Desde que estaba junto a Lexa no se sentía atrapada y se sentía la chica con mas suerte del mundo por estar a su lado y por haber conocido su verdadero interior.
Bajó la mirada para cerrar el neceser y sintió a alguien detrás de ella. Al subir la mirada vio en el reflejo del espejo como Octavia aparecía por detrás y la agarraba del pelo tirandola al suelo haciendo que Clarke gritara de dolor.

La rubia rápidamente se levantó asustada y observó cómo Echo y Octavia la miraban con ira y maldad.

La castaña se lanzó a por ella dándola un puñetazo que Clarke logró esquivar para luego devolvérselo en la garganta lanzándola hacia atrás. Pero antes de que pudiera reaccionar, sintió como Octavia la agarraba por detrás y la empujaba haciendola chocar contra los lavabos. Echo se levantó cargada de rabia y la pegó un puñetazo en la boca haciendo que Clarke se quedara quieta y mareada.
Sintió como el labio empezaba a sangrar y su cabeza daba vueltas. Observó cómo Echo se acercaba hacia ella y levantaba el brazo para golpearla de nuevo pero rápidamente Clarke se agachó y la pegó una patada en la tripa tirandola al suelo.

-Basta de juegos.- Octavia gruñó y se lanzó a por la rubia apisionandola contra la pared y colocando sus dos mando en su garganta. Clarke empezó a notar que la faltaba el aire. Sintió como su cuerpo no la respondia y su músculos se debilitaban impidiendo moverse. Intentó hablar pero su voz se cortó.

-¿Que pasa? ¿Quieres pedir ayuda?- Rio Octavia. -¿Quien te va a salvar? ¿Tú amiga drogadicta?

Clarke apretó la mandíbula y con las últimas fuerzas que la quedaban la brindó un rodillazo a la morena separándola de ella.

La rubia perdió el equilibrio y cayó al suelo respirando con dificultad y tosiendo con la mano en la garganta a punto de perder la consciencia.

-Hija de puta...- Octavia y Echo se incorporaron y se acercaron lentamente a Clarke dispuestas a repetir el ataque cuando de repente Lexa entró por la puerta con los puños apretados y se colocó entre medias de Clarke y sus atacantes.

-Quitate de ahí.- Ordenó Octavia. -Esto no va contigo.

-No vas a tocarla.- Espetó.

Octavia pareció entender la situación y soltó una carcajada. -Ay Lexa... Qué bajo has caído...

La castaña gruñó apretando los dientes y mirando a Octavia con odio. -Mas bajo vas a caer tú porque te voy a hacer comer el suelo.

La castaña se lanzó a por ella placandola y empujándola contra las duchas. Echo se acercó a atacarla pero Lexa logró esquivarla y la agarró de la pierna haciéndola una llave y la inmovilizó para luego golpearla en la cabeza y dejarla fuera de combate.

Octavia se acercó pegándola dos puñetazos en la cara y rematarla con un golpe en la tripa haciendo que Lexa se alejara de ella.

La castaña se incorporó notando como la sangraba la boca y escupió al suelo sin dejar de clavar su mirada en Octavia que sonreía con superioridad.

Lexa se lanzó a por la morena pegándola en la barbilla y recibiendo otro puñetazo en la ceja. Llena de furia la agarró del pelo y la hizo chocar contra la pared para luego golpearla varias veces en la cara y lanzarla al suelo. Octavia parpadeó confusa sintiendo como perdía la consciencia.

Lexa se colocó encima de ella y la rodeó la garganta con una mano y con la otra la agarró la cara para que la mirar fijamente. De reojo observó cómo Clarke se recuperaba y se levantaba del suelo.

-Mirame.- La ordenó a Octavia. -¡Mírame!- Gritó la castaña al ver que la morena intentaba aparta la vista de ella.

Octavia acabó obedeciendo y la miró dolorida.

-Ni se te ocurra volver a tocarla...- Advirtió. -Ni siquiera quiero que la mires...

Octavia sonrió. -Así que con la niña pija ¿Eh?- Carraspeó. -Eres una caja de sorpresas...

-Como la hagas algo te juro que te mato.- La retó.

Octavia gruñó de nuevo al ver como Clarke se acercaba y se colocaba al lado de la castaña.

-¿Y por qué coño te tengo que hacerte caso?- Preguntó Octavia con las últimas fuerzas que tenía queriendo desafiarla.

Lexa apretó más su garganta haciendo que la morena se retorciera y pidiera piedad con la mirada. Rindiéndose al ver que era incapaz de hacer nada para liberarse.

Lexa sonrió y se acercó aún más a ella susurrando en su oído. -Porque soy la comandante.

ENTRE REJAS | clexaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora