2. Cuidados

11.9K 1K 196
                                    

Aristóteles estaba atento a todo lo que Temo podría llegar a necesitar.

La fiebre de Temo aún no bajaba como esperaba pero al menos había dejado de sentir tanto frío.

-¿Qué harán las calcomanías en su campamento? -preguntó para tener algo que conversar mientras esperaban a que la toalla mojada que tenía en su frente dejara de estarlo.

-No edhtoy segudo -dijo con voz ronca, ese era otro síntoma que intentarían aliviar luego de que la fiebre no fuera prioridad- aphrender cosas y jugahd.

-Tendrán una linda semana entonces. Pero no te preocupes que intentaremos que la tuya también sea divertida -Temo le sonrió- pero primero tenemos que quitarte está fiebre, ¿Cómo te enfermaste?

-Quizás fue la lluvia de la odhra tahde -Aristóteles concordó con eso.

-A la próxima le haces caso a tu Papancho y llevas un suéter -dijo de manera autoritaria aunque luego de un par de sonrisas dejo de sonar tan severo.

Temo sonrió, hablar con Aristóteles era la mejor medicina que podía tener.

Aun no digería que su Papancho eligiera a Ari para cuidarlo pero no podía quejarse. El que Aristóteles estuviera ahí cumpliendo todos sus caprichos.

Luego de unos minutos más, y de varias toallas mojadas pasadas por la frente de Temo, habían logrado menorarle en gran cantidad la fiebre por lo que la atención de Aristóteles se centró ahora en la garganta de Temo.

-¿Podhque tengo que tomar esto? - Temo miraba con algo de desagrado la taza que tenía en sus manos.

-Porque tienes que aliviarte -dijo el rizado con obviedad.

-Lo se pero...¿Té de ajo? -Temo hizo una mueca al olerlo- ¿Podhque no miel y limón?

-Esto es mucho mejor. Solo si quiedhes dejah de hablahd adsi -dijo burlándose de la forma de hablar de Temo, quien lo miro con algo de enojo.

Sin quejarse más dio el primer sorbo del té que Aristóteles le había preparado.

No quería ser descortes pero su olor no le agradaba y agradecía no poder sentir muy bien los sabores, ya que aseguraba que sabía peor de lo que olía.

-No fue tan difícil -dijo luego de que terminará el té- tomando esto por un par de días y tu voz volvera a ser normal.

-¿Qué tiene de malo mi vohdz ahodra?

-Me gustas más con tu voz armoniosa que con esta tan grave -comentó.

Temo desvió su mirada de la de Aristóteles.

Sabía que no lo decía con la intención que él esperaba, lo venía sabiendo desde que salió oficialmente del closet, pero escucharlo hacia que su corazón palpitara con mayor intensidad.

-¿Tu me cuidaras ehdtos días hahdta que me mejodhe? -preguntó para desviar la frase dicha anteriormente por Ari.

-Si tu Papancho y tu me necesitan aquí estaré -Aristóteles le sonrió.

-¿Tendhé que tomar ehdto por siempre? -Aristóteles rio ante eso.

-Solo hasta que mejores, mi misión de esta semana es cuidarte.

•~~~~~~~•

Hacer la voz ronca y constipada de Temo escrita me da risa, no se porque.

Los capítulos serán cortitos pero me gusta como quedan así que así serán :3

Sick for the love || AristemoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora