Sick for the love || Aristemo

4. Cocinero

Luego de tomar todas las medicinas que debía Temo tuvo una temperatura normal, aunque eso no quería decir que ya se encontraba mejor.

Además de la fiebre y su nariz constipada sentía su cuerpo pesado y con diversos escalofríos, pero el doctor le había dicho que con el tratamiento todos los síntomas se irían pronto.

-¿Tienes hambre? -preguntó el rizado luego de tomarle la temperatura, habían roto un nuevo récord al lograr que Temo estuviera en una temperatura normal por mas de tres horas.

-No en readidad -Temo se acomodó en su cama.

-¿Hace cuanto que no comes algo?

-Desde ayed por la nodche, pero no tedbgo hambre -contestó, no era mentira ya que su Papancho había intentado darle algo antes de irse pero el apetito inexistente de Temo era otro síntoma.

-No puedes quedarte sin comer nada -Aristóteles se levantó.

-¿A dódnde vas?

-A traerte algo de comer, no puedo dejarte morir de hambre -le sonrió- descuida sólo tengo que ir a mi casa, no tardaré.

Temo asintió, hace unas horas había aprendido que con Aristóteles no podía negarse mucho.

Reviso un poco sus redes sociales pero no había nada interesante más que varios de sus amigos poniendo las increíbles cosas que hacían en sus vacaciones mientras él estaba recostado en su cama. Odiaba estar enfermo.

Luego de unos minutos escuchó la puerta de  su casa abrirse, oír movimiento en la cocina y muy pronto ver a Aristóteles entrar a su habitación con una bandeja, no podía ver bien su contenido pero traía un plato hondo y un vaso.

-¿Qué es? -preguntó con curiosidad, tampoco podía oler.

-Caldo de pollo y jugo de naranja -Aristóteles se acercó para darle la bandeja.

-G-gradcias pero, en veddad, no tengo hamdre -Temo sonrió un poco apenado, se vería delicioso si su salud fuera otra pero ahora no le apetecía nada.

-Te aseguro que te va a gustar -el rizado se sentó más cerca de él para tomar la cuchara- no puedes negarte, mi mamá ayudó así que te aseguro que sabe bien.

-¿T-tú hiciste edto? -Temo observó el plato unos segundos- ¿Pada, mi?

-Claro, no me parecía responsable de mi parte hacerte un simple sándwich como ayer -tomó una cucharada del caldo- así que le pedí a mi mamá ayuda para hacerte algo, y el caldo de pollo es la mejor opción para ahora que estas enfermo -Aristóteles carraspeo un poco- ahora señor López no rechace mi comida.

Temo río leve ante la manera formal de hablar de Aristóteles mientras tenía la cuchara frente a él, sin negarse más abrió la boca para tomar la primer cucharada de caldo.

Podía no sentir muy bien el sabor pero el que estuviera caliente ayudaba un poco, haciendo que luego de unas cuantas cucharadas más dadas por Aristóteles fueran suficientes para quitarle la cuchara y comer un poco más rápido de lo que él le daba.

Aristóteles sonrió victorioso al ver que el apetito de Temo volvía, su misión había sido cumplida por el día de hoy, más una extra, hacer reír a Temo por lo menos una vez.

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¡Hola!

Había pensado subir esto luego del capítulo de hoy pero si Yolo llega a interrumpir un beso Aristemo iba a estar molesta y no disfrutaría escribir, así que me puse a terminar el cap y aquí lo tienen :D