LOVE KILLS ▪|SLAVE|▪

✿ 36 ✿

|Normal|

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Uhm, ¿No está aquí?  

— Ya veo... ¡Agh! —   

Una frustrada Lisa miró al cielo sin poder hacer nada más que resignarse.  Hoy tampoco Jungkook había asistido  a la escuela.  Dando media vuelta dejó caer sus hombros. 

Al parecer se había equivocado. 

Creyó que por haber pasado el día anterior (que había sido un día  de ensueño para ella)  junto a su flamante,  guapo, pero algo excéntrico novio las cosas volverían a ser "normales" entre los dos. 

Pero espera, para empezar.... ¿Cuando las cosas habían sido normales con Jungkook en primer lugar?

Nunca lo fueron  que ella recuerde. 

Pff. Lisa resopló cerrando la puerta de la azotea sintiéndose de mal humor. 

Con Jungkook no había nada, nunca, que podría considerarse  "normal". 

Solo hace un mes atrás este mismo chico del cual ahora podría llamarlo -su novio- le había obligado apunta de chantajes que actuara como si fuera su perro y él,  el amo... 

Sí, has oído bien. ¡Un maldito perro!  ¿Era una locura solo pensarlo, verdad?

¿Qué clase de historia de amor como esa podría contarle a sus futuros hijos? 

"No, nena, tu appa y yo nos conocimos en la escuela, cuando me chantajeó con la carta que le escribí al chico que me gustaba en ese entonces. 

¿Y sabes que fue lo más romántico entre appa y yo? que me obligó a actuar como su perro." 

Descabellado... totalmente. 

Todavía podía sentir escalofríos de solo recordar a los dos gorilas que tenía por guardaespaldas su novio apuntarle directo a la  cabeza dispuestos a volarle los sesos. 

Cómo habían cambiado las cosas... 

Lisa caminó de vuelta a su salón de clases. Había aprovechado  el primer receso para comprobar si Jungkook estaba holgazaneando en la azotea, (como siempre hacía), ya que al cerciorarse, las compañeras de Jungkook le habían dicho que ese día tampoco había ido a la escuela. 

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Otro día que no viene... ¿En qué está pensando? ¿Y si repite el curso? Claro que lo puede repetir, ni siquiera el dinero podrá salvarle el pellejo. 

Ni siquiera piense que haré sus tareas otra vez, ¡porque no lo haré! aunque las cosas ahora sean diferentes entre nosotros, ¡definitivamente que no le ayudaré!