Capítulo 2 💜

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Observo a Jamie comer chocolates sentado en el sofá de la oficina, suelto un suspiro, mí hijo se ve realmente contento y tranquilo con sus chocolates y realmente  ¿Quien soy yo para quitarle esa felicidad y tranquilidad?

- ¿Y cómo te trata la vida como madre? - Pregunta James y decido voltear a verlo.

- Bien, Jamie es muy tranquilo y obediente. No me ocasiona ningún problema.

- No sé parece a Stephen. - Dice y su mirada es  seria.

Decido guardar silencio, por supuesto que le voy a decir que no es hijo de Stephen, que es su hijo, pero no ahorita, no hoy.
Mí celular comienza a sonar y lo saco rápidamente, es una llamada de Paulina.

- Dime - Respondo de inmediato.

- ¿En donde están? Vine a la  casa para que vayamos a comer  y llevemos a Jamie a el zoológico.

- Estamos en el trabajo de Leila, le preguntaré a Jamie si quiere ir.

- Jamie ¿quieres ir al zoológico y a comer amor? - Pregunto aún con el celular en mi oreja.

- ¡Sii! ¡Animales bonitos! - Grita mientras se pone de pie emocionado.

- Creo que ya lo escuchaste. - Respondo riendo.

- Bien, ¿nos vemos aquí o paso por ustedes?

- Nos vemos en la casa, nos tenemos que cambiar. Nuestra ropa no es la más cómoda  para ir al zoológico.

- Bueno, con cuidado. 

Cuelgo la llamada y me pongo de pie, James también se pone de pie sin dejar de  mirarme.

- Jamie por favor recoge la basura de los chocolates que te comiste y dale las gracias a James.

Jamie se levanta y hace todo en el orden en el que se lo dije, lo observó a lado de James y joder, realmente son igualitos.

- Cuidate mucho y cuida a tu mamá. - Dice James a Jamie.

- Mamá ¿puede James ir un dia a jugar conmigo a casa? Tengo muchos juguetes

- Mi amor, nosotros no vivimos aquí y son muchas horas de vuelo para que James vaya a nuestra casa.

Jamie hace un ligero puchero mientras observa a James.

- No te preocupes campeón, sí un dia voy, con gusto paso por tu casa.

Sonrió un poco ante las palabras de James y veo como se dan un leve abrazo, Jamie camina hasta mí y me da la mano.

- Nos vemos James, muchas gracias por los chocolates.

Salimos de la oficina y siento un aire mucho más fresco, bajamos para poder irnos a cambiar e ir al zoológico.

■■■■

Llegamos a casa y me siento realmente cansada, a Jamie le llaman la atención todos los animales y corre para todos lados, realmente me gustó mucho pasar esos momentos con mí pequeño.

Me acuesto a un lado de Jamie y me dispongo a dormir.
Cierro los ojos y a  mi mente  llega la imagen de James a un lado de Jamie, son completamente iguales, Jamie tiene la nariz, los ojos y los labios de James, también la frente, de mi sólo saco los cachetotes y las cejas, las tenemos igualitas.
Sonrió aún con los ojos cerrados, Jamie tuvo una conexión muy bonita con James y sin saber que es su padre.

Escucho unos fuertes golpes en la puerta de la entrada, asustada me levanto de golpe, me coloco un suéter y salgo para ver que sucede.

Al salir veo a James parado, al parecer está un poco tomado por la postura que tiene.

- ¿Qué haces aquí? - Pregunto al abrir la puerta.

- Vine a hablar contigo ahora. - Su aliento me confirma lo borracho que se encuentra, veo detrás de el y veo su auto muy mal estacionado.

- ¿Venías manejando y en este estado?

- Dije que vamos a hablar. - Dice subiendo el tono de voz.

- James por favor calmate, voy a dejarte pasar  sólo porque no quiero que manejes en ese estado.

Le permito el paso, James observa el lugar y entra a la casa, en la luz de la casa puedo ver lo mal que luce, su ropa está hecha un desastre y lo peor de todo es trae un zapato negro y el otro café.

- ¿Estabas tomando en tu casa? - Pregunto por lo de los zapatos.

- Sí pero decidí venir. 

Asiento y camino hasta la cocina para prepararle un café.

- ¿Por qué no esperaste hasta mañana? - Pregunto entregandole la taza con café.

- Ya no quería esperar más tiempo, no aguanto más, necesito saber si Stephen es realmente el padre de Jamie.

- Lo hablaremos mañana que estés mejor James.

- ¡Carajo Jenny! - Grita James y tira la taza de café al piso, está de inmediato se rompe. 

- James cállate, Jamie está durmiendo y tu con tus estupideces. - Digo molesta en un tono de voz bajito.

- Shhhh - Dice James y se deja caer en el sillón

Ruedo los ojos fastidiada, limpio el tiradero que acaba de hacer.
Regreso y veo a James durmiendo en el sillón, entró al cuarto y tomo una cobija, regreso y tapó a James.

- Ay James, a veces no sé sí te quiero cerca o lejos para siempre.

Regreso a la habitación y me acuesto a un lado de Jamie, el comienza  a despertarse y lo abrazo para que continúe dormido.

Siempre Fuimos tu y yo. (COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora