Al día siguiente.
Despierto y observó hacía la ventana, me encanta mucho ver como empieza a asomarse la luz del brillante sol. Son pequeñas cosas que valen totalmente la pena.
Ver el sol salir es algo que influye mucho en mi estado de animo durante el día.Me levanto y ordeno por completo mí habitación, me voy directo al baño para darme una ducha y arreglarme. Hoy no tengo mucho trabajo pero sí tengo que ir.
Salgo del baño con una toalla en la cabeza y otra un poco corta en mi cuerpo. Bajo así como todas las mañanas por una crema para el rostro que guardo en el refrigerador. Jamie aún duerme, normalmente lo despierto cuando estoy casi lista.
Entro a la cocina y siento como mi cabeza y mi cuerpo son golpeados por otro cuerpo mucho mas grande que el mío. Mantengo los ojos cerrados y trato de pensar quien puede ser.- Perdón, iba distraido. - Escucho la voz de James, gruesa y ronca como todas las mañanas.
- ¿James? - Me separo de golpe un poco sorprendida.
- Sí, ¿que pasa? - Me mira confundido.
- Lo siento, olvide que estabas aquí. - Digo recordando y dando un pequeño golpe en mi frente.
- Me imagino, si lo hubieses recordado, te aseguro que no saldrias en toalla a la cocina.
James da dos pasos y me hace retroceder, da dos más y retrocedo hasta tocar la pared. James me encierra entre la pared, su cuerpo y sus brazos a cada lado de mi cabeza.
- A menos de que quieras terminar lo que empezamos en ese cuarto de limpieza. - Dice James en mi oído.
Puedo sentir como toda mi piel se eriza por completo, mi respiración falla un poco y mi vista solo se concentra en los labios de James.
- No sé de que estás hablando. - Digo nerviosa y muerdo mi labio.
- Puedo recordarte.
James coloca su mano en mi cintura y hace un poco de presión, un suspiro involuntario sale de mi boca. James me regala una sonrisa y sin pensarlo más me besa.
Recibo sus labios con un poco de dificultad por las ganas con las que James me besa, coloco ambas manos en su cintura, James aprovecha y se pega más a mí.- No sabes cuanto he extrañado tu cuerpo. - Dice James y comienza a besar mí cuello.
Cierro los ojos dejandome llevar por sus caricias, James no para de besar mi piel.
- ¡Mami! - Escucho la voz de Jamie desde su cuarto.
James y yo nos separamos de golpe, ambos tenemos la respiración agitada.
- Mandé - Respondo desde ahí.
- Ya me voy a bañar.
- Con cuidado amor.
Jamie siempre me avisa por cualquier cosa, supongo que se desperto por su reloj biológico.
Suspiro un poco y comienzo a subir a mi habitación, al entrar a ella tomo una gran respiración y observó mis manos temblar.
ESTÁS LEYENDO
Siempre Fuimos tu y yo. (COMPLETA)
Romance¿Cómo sabes que es el amor de tu vida? ¿Cómo puedes estar segura de que no te harán daño? ¿Cómo sabes que te estas entregando a la persona correcta? Son preguntas que no tienen respuesta, pero bien se sabe que el que no arriesga no gana. Y aunque e...