FLOR SALVAJE #Wattys2017

CAPÍTULO 15

Mia despertó. ¡Qué calor! El brazo de Harry la rodeaba y su pierna aprisionaba las de ella.

Se revolvió con cuidado y salió de la cama sin despertar a Harry.

Bajó hasta la cocina. Podía hacerle el desayuno a Harry.

Cocinar era una de las cosas que Mia hacía muy bien.

Abrió la nevera. Allí dentro había todo lo que una amante de la cocina podía desear.

Decidió hacer unas tortitas con frutas silvestres y un revuelto de huevos con beicon.

Se dirigió hasta el sofá y desde su bolso sacó su IPad. Le inspiraba cocinar con música.

Esa era la cosa más valiosa que había heredado se su madre. El amor a la música. Su madre siempre decía.

«Lo único que amansa a las fieras es la música»

Estaba inmersa escuchando a Calvin Harris y haciendo las últimas lonchas de beicon cuando sintió una mirada fija en su espalda.

Se giró y se encontró a Harry Styles sentado en un taburete mirándola y sonriendo, con su torso al descubierto.

—No pares por mi.  Era entretenido lo que estabas haciendo — dijo Harry en voz ronca

—¿Cocinar? — dijo Mia.

—Bailar.

—Me gusta bailar.

—Y lo haces bien. ¿Hay algo que hagas mal? —preguntó Harry

—Un par de cosas...

—¿Te ayudo? — preguntó Harry

—Puedes poner la mesa. No sé donde tienes las cosas.

           * * *

—Mmmmm....cocinas bien.Muy bien —dijo Harry comiendo el último trozo de tortita con moras y fresas.

—¿Puedo hacerte una pregunta?

—Eso ya es una pregunta —dijo Harry sonriendo.

— ¿Tú nunca trabajas? — preguntó Mia.

—Si ,de eso vivo.

—¿Entonces por qué no estás en la oficina?

—Por que hay días que trabajo desde casa.

—Mmmm... de acuerdo — dijo Mia

—¿Tienes hoy planes? — dijo Harry

— Si por la noche trabajo en el Rooney's — dijo Mia.

—¿Hoy no .... mmm...bailas?

—Los miércoles y jueves no —dijo Mia revolviéndose incómoda en su taburete.

—Podemos ir a comer tu y yo juntos — dijo Harry cambiando de tema

—No tengo ropa aquí — dijo Mia dándole vueltas a su plato con huevos

—Puedo llevarte a casa para cambiarte

—De acuerdo —dijo Mia.

Ambos terminaron de comer su desayuno en un incómodo silencio.