23. ¿Importa?

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—No vamos a dejar que se la lleven así, es parte de la ciudad, no puede simplemente venderse como cualquier cosa. ¡Es una escuela, Alcaldesa!— grité haciendo mi voz resonar por todo el despacho.
—Lo entiendo señorita Andrews pero negocios son negocios, además, no se quedarán sin escuela. Todos serán transferidos a Riverdale High.— explicó y se levantó de su silla — Ahora, Skye, te pido que regreses a casa y descanses un poco.— sonrío falsamente y me llevó de los hombros hasta la puerta, donde fui vetada con un portazo.
Regresé a casa furiosa y en el camino llame a Jughead, no estaba dispuesta a dejar ir mi nueva vida así de fácil, sabía que siempre tendría Riverdale High como un refuerzo y que siempre podía volver al lado Norte, sin embargo eso haría cierto todo aquello que he desmentido, todo por lo que luchado; las ideas que he intentado cambiar y las mentes que he intentado abrir. No volvería al lado Norte porque entonces sería la definición gráfica de debilidad en su máximo esplendor y me negaba rotundamente a representar tal concepto.
Mi chico surgió con una idea maravillosa que, claro, yo modifiqué un poco. Nos encadenaríamos a la escuela, así nos oponemos a las represalias por parte de la alcaldesa, la indiferencia de aquellos que decidieron comprar la escuela para construir alguna cosa menos útil y el dolor de los padres, trabajadores e hijos que pierden, no solo una parte de su ciudad, sino de sus propias vidas. Llámenme exagerada pero estaba dispuesta a poner en evidencia toda aquella historia que alguna vez se contó de mi, esas que me mostraban como una líder nata, o esas otras que demostraban mi rudeza y persistencia o incluso aquellas que dejaban ver mi lado sensible y dañado. No iba a dejar que mi nueva vida se me fuera arrebatada, que corriera como agua entre los dedos.

Llamé a los chicos y todos estuvieron de acuerdo con el plan, más les valía que no terminaran por arrepentirse y dejarme sola porque no se la acabarían.

Todo estaba listo, tenía las cadenas y estaba por cerrar mi candado.
—Skye, espera.— gritó mi hermano que venía haciéndose pasó entre la multitud de personas que defendía nuestro ideal.
—¿Archie?¿Qué haces aquí?¿Hiram Lodge te envió?— pregunté enojada debido a su impresionante cantidad de tiempo e importancia al señor Lodge. Me jaló fuera del centro de la multitud.
—No hagas esto, ya todo está más que organizado, no cambiarás nada en los papeles con un par de cadenas.— habló entre dientes.
—Tal vez no en los papeles, pero si en las mentes y en los ojos, tú me enseñaste que nada pasa de la noche a la mañana, pero se empieza por algo.— sonreí y le ofrecí una cadena —Únete conmigo... con nosotros.— volteé a ver al resto de los chicos, me sentía orgullosa y optimista de que podríamos hacer el cambio, uno pequeño tal vez, pero al menos no nos quedaríamos de brazos cruzados viendo cómo desaparecía una parte de nosotros.
—Estás paredes tienen tanto significado para mi como Riverdale High, por favor, Archie.— tenía la esperanza de que mi hermano, con los ideales que él tenía, que eran justo los que me había enseñado, se uniría a nuestra causa y tomaría las cadenas. Mucha fue mi decepción cuando me dedico una mirada lastimera y esbozó un "lo siento" con los labios, apenas audible, una caricia al aire; giro sobre sus talones y se abrió paso sin problema entre la multitud latiente. Me había dejado, me había abandonado a pesar de que el mismo me había enseñado a pensar de esta manera, no estaba triste ni decepcionada, últimamente se había vuelto habitual el recibir algo muy diferente a lo esperado por parte de mi hermano, simplemente me sentía incompleta, algo había ahí que yo no estaba viendo, había movimientos bajo la mesa que no me dejaban ver que estaba pasando en realidad.
—Voy a descubrirlo.— susurré para mi y comenzó la huelga, llamada así porque no nos moveríamos de ahí hasta conseguir algo. Si querían tirar la escuela, nos tirarían con ella, pasara lo que pasara iba a llegar al fondo de esto sin importar el costo, porque estaba bastante segura de que tenía que ver con los Lodge, aquella familia que lentamente consumía a la mía. Sabía que tenían algo que ver porque en el despacho de la alcaldesa yacía el contrato de la escuela con las iniciales "L.i". Archie siendo consumido por los planes del señor Lodge y su querida novia, y mi padre, siendo minimizado por la señora Lodge, el pequeño títere de Hiram, en las elecciones a nuevo alcalde de Riverdale.
Honestamente sabía que todo se nos iba de las manos, pero yo estaba dispuesta a recuperarlo a cualquier costo.

La lluvia comienza a caer, ya no hay tanta multitud como hacía unas horas, el cansancio y la pesadez de las cadenas comienza a notarse pero aún faltaba mucho y de eso estaba segura. Habían desertado los primeros dos, un par de candados abiertos yacían en el suelo junto con sus cadenas recordándonos que podíamos dejarlos en el mismo lugar e ir a casa, pero escogíamos ser lo suficientemente fuertes para resistir un poco más, aunque reconocía el que ponerse las cadenas ya era acto de valentía. La pregunta era ¿De verdad importa?

Out of a Mystery || Jughead JonesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora