Él, un chico que no ha tenido suerte en la vida, se reencuentra con su mejor amiga de la infancia, de la cual siempre ha estado enamorado.
Ella, una chica sobreprotegida por su padre y consentida por su madre, desgraciadamente eso no duró mucho, ya...
Decidimos cenar fuera, no teníamos contaminación lumínica Y estábamos en la montaña.
Después de cenar estábamos un poco aburridos, él estaba tocando la guitarra una de mis canciones favoritas, obviamente el mundo tenía que verlo así que hice un directo desde Instagram.
Lo interrumpí y le dije que empezase de nuevo para cantarla juntos y coloqué el móvil en la mesa para salir los dos.
T: Mandy, ¿puedes ir a la cocina y traer algo para beber, por favor? Me tienes seco de cantar. - Soltó una carcajada-.
Le sonreí tiernamente y asentí.
Estaba cansada de cantar y él de tocar la guitarra.
A: Feo, ¿te apetece sesión de fotos para subirla?
T: Claro. -sonrió-
Me muero en esa puta sonrisa.
En fin.
Me levanté con el para hacernos fotos.
T: Ah, pero ¿son contigo las fotos?
A: Obvio imbécil, ¿con quién sino? No hay nadie más.
T: Es que tú me vas a estropear la foto con esa cara. Dios. No puedo mirarte.
A: ¿Acaso quieres morir Antonio? - Dije alzando una ceja-.
Se puso serio, no le gusta que lo llamen por su nombre completo.
Nos pusimos en la orilla para hacernos la foto.
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Quedó demasiado de novios... Pero es Tony, así que no.
Álex me había contestado la historia. ¿Qué mierda le pasa?
Así que le dije que se echara novia y me dejase en paz, obviamente después de mandarle eso estuve el resto del día sin tocar mi móvil... estaba tan mal que no tenía ni ganas de comer.
Él lo notó, pobre, sabe que cuando estoy así no quiero hablar, así que simplemente se sentó a mi lado y me abrazó.
Lloré mucho.
Al día siguiente cogí mi móvil y entré al Instagram, lo que vi me dejó ko.
Álex con una chica, besándose, él escribiendole que la ama y que es el amor de su vida.
Eso fue lo que me faltó por ver, para amargarme un poco más el día.
Estaba deseando irme lejos y no tener que ver a nadie, sólo por un tiempo, el suficiente para desconectar y encontrarme.
Me necesitaba a mí misma, necesitaba a la chica de hierro, la inquebrantable, la indomable, la que no se deja llevar por sus sentimientos, la que piensa antes de actuar, la que actúa en frío ... Necesitaba volver a ser yo.
Tony se había ido a trabajar, cuando entonces Álex hizo un directo en Instagram y estaba con la chica, ¿Nadia? No puedo creérmelo.
¿En serio? ¿ELLA?
Álex se dio cuenta de que estaba conectada a su directo y vi como ella intentaba no salir en el vídeo, pero él no dejaba de enfocarla.
Me desconecté del directo.
Entonces me sonó el móvil, era un mensaje de Luke.
Casi me olvidaba de él.
Luke:
Hola Mandy, supongo que estás ocupada por España, los días se me hacen muy largos sin ti. Te echo de menos, vuelve pronto.
Mandy:
Hola. Sí, ya me queda muy poco tiempo aquí, pronto estaré en París de nuevo.
Entonces llegó mi padre, pude ver en su mirada que las cosas no iban bien.
A: ¿Pasa algo papá?- Dije preocupada-.
P: Recoge tus cosas, nos tenemos que ir.
Rápidamente fui a coger mis cosas aún sin poder creérmelo.
No sabía dónde íbamos a ir, al puto aeropuerto, volvíamos a París.
