Un Mafioso Protector

Amanda

L: Es Álex

A: ¿Álex?

L: Sí, Álex -confirmó-

A: Vuestra broma no tiene gracia, ¿lo sabéis?

T: ¿Qué broma?

A: ¿Cómo que "qué broma"?

T: No entiendo qué estás diciendo

L: Yo tampoco

A: Dejad de haceros los estúpidos. O sea, lo sois pero no hace falta demostrarlo tanto.

L: Amanda, entiende que no hay ninguna broma.

A: No os creo..

L: Pues no te lo creas, ya lo verás tú misma.

Decidí cambiar de tema.

A: ¿Y qué ha pasado con Coraima? ¿Tiene algún problema?

T: Sí, en la cabeza

A: Eres gilipollas, Tony.

Alguien interrumpió nuestra amigable charla.

Vi entrar a Harry sonriendo y con un ramo de rosas.

H: Hola -sonrió aún más-

A: Adiós.

Harry me ignoró.

H: ¿Cómo estás?

A: Coraima se ha ido, como puedes ver, aquí no está.

H: Es que no busco a Coraima, te busco a ti.

Me sorprendí por lo que dijo.

A: ¿Qué tipo de droga tienes en el cuerpo?

H: Tú eres mi única droga.

Las palabras no salían de mi boca, estaba muy sorprendida.

A: ¿Esto es otra broma? Estoy hasta el coño de las bromas.

L: Amanda, nada de lo que te decimos es broma.

A: ¿Sabéis qué? Irse todos a la mierda.

T: ¿Qué significa eso?

A: QUE OS PUTO VAYÁIS TODOS, CREÁIS MUCHO ESTRÉS EN MI PERSONA.

L: Pero si no hemos hecho nada.

T: Anda, exagerada.

H: Pues yo no me voy a ir  perdona que te diga.

A: No lo volveré a decir, iros todos de aquí.

H: Me iré cuando mis sentimientos por ti se vayan.

A: Harry me das diabetes y vergüenza ajena, mejor que pares.

H: Amanda, tengo que decirte algo, ¿puede ser a solas?

A: No.

H: Es muy importante.

A: Nada que tenga que ver contigo es importante.

H: Amanda escúchame.

Luke y Tony salieron.

A: PERO LLEVAROS A ESTE TÍO TAMBIÉN.

No me hicieron caso y cerraron la puerta.

A: Hazme el favor y vete.

H: Amanda, ¿cómo te digo que eres lo único que quiero?

A: ¿Y cómo te digo yo que lo único que quiero es que te vayas a la mierda?

H: Amanda, dame una oportunidad.

Me empecé a reír.

A: ¿Qué? -Dije secándome las lágrimas producidas por la risa-

H: Déjame ser tu todo.

A: Anda, petardo.

H: ¿Quieres salir conmigo?

A: Quiero que salgas de aquí