Sucy: Mmm, no.... esto... tampoco, ¡oh! Quizás este... mmm, no. Ahg, no hay nada aquí que me sirva, ojalá hubiera un portal a mi cuarto en la academia- se quejó, botando hacia alguna parte el tibo de ensayo.
Akko y Diana se miraron entre sí con una mueca. Estaban en la habitación de la amante de hongos desde temprano, habían faltado a muchas horas de clase solo por buscar soluciones al problema de Diana. Pero nada resultaba ayudarle.
Las pociones que Sucy llevaba haciendo desde la mañana solo le cambiaban la voz, o le volvían la mitad del cuerpo a un animal. Nada arreglaba que el cuerpo de la bruja fuera el de un chico. Y eso comenzaba a frustrar a las tres jóvenes; una quería su cuerpo de vuelta, y confiaba que la alquimia resolvería el problema, otra deseaba ver a la británica contenta, y la última quería poner aprueba sus teorías.
Ninguna llevaba el mismo objetivo en mente, pero si estaban fuertemente relacionadas como para que Sucy les ayudara.
Sin embargo, eso no impedía que se impacientaran, sobre todo cuando veían que quien les ayudaba tomaba mucho tempo en desarrollar una sola solución.
Casi parecía a propósito.
Akko: ¿Ya está lista la siguiente?- preguntó, mirando con seriedad a su amiga.
Sucy negó, agitando el vaso con sutileza, observando bien pegada al envase el procedimiento. Diana prefirió darse la vuelta y mirar hacia otra parte para no impacientarse más, pero Atsuko no podía ignorar el tiempo que llevaban tratando de lograr algo y simplemente no avanzaban. Por lo que, con molestia, decidió alejarse de su amiga y acercarse a la rubia que desde la noche anterior se comportaba distante con ella, tomando asiento sobre una mesa a lado de la ventana por la cual la británica observaba.
Akko: ¿Estas bien?- preguntó curiosa.
Diana volteó a verla, con una expresión pensativa, Atsuko ladeo su mirada.
Diana: Esta... todo bien. ¿Por qué preguntas?
Akko: Te veo muy distraída.
Diana sonrió diminutamente, sintiéndose extrañamente bien por tener la atención de la castaña sobre ella, pero antes de poder contestarle, Sucy las interrumpió pidiendo que se acercaran a ella. Ambas hicieron caso, poniéndose a cada lado de la bruja para observar el contenido de la nueva poción en la botella. Un rojo intenso, tanto como el de los mismos ojos de la asiática, burbujeaba lentamente en el tubo. Los ojos de la amante de hongos se iluminaron con emoción, y sin esperar un segundo más, se volteó hacia la rubia, dándole una mirada que le indicaba que ya iniciarían con la prueba.
Diana: Bien, hagámoslo- dijo, asintiendo con determinación, acercando su mano para tomar el tubo, pero la amante de hongos lo alejó antes de que pudiera tomarlo- ¿Qué sucede?- preguntó confundida, sin entender porqué no la había dejado tomar la poción.
Sucy: Esta vez, no haré que la tomes, sino que la echaré sobre ti- respondió.
Diana: ...De acuerdo.
Akko: ¿No es peligroso?- preguntó, mirando con duda a su amiga.
Sucy: Lo peor que puede pasarle es que su carne se desprenda de su cuerpo y se derritan sus huesos- mencionó, provocando que la castaña la mirara con horror- Pero no sucederá- concluyó, pasando su atención a la británica- ¿Lista?
Diana asintió lentamente, y ya con el consentimiento, Sucy regó todo el líquido sobre la rubia, esperando que esa fuera la pocion correcta. Akko cubrió su rostro con temor, pues no quería ver cómo su rubia favorita era desintegrada por su otra amiga favorita; sin embargo, en cuanto no oyó alguna queja, descubrió su rostro, hallando a la rubia con la misma apariencia que antes, y a Sucy negando con molestia ante otro fracaso para nada usual en ella.
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SOLO A MÍ [EDITANDO]
FanfictionSe dio cuenta de lo bella, encantadora y serena que era. Le juro amor eterno sin mencionarlo y la admiró todos los días como si fueran los primeros. Porque sólo ella podía hacerlo, y ambas lo sabían. 🚫Esta es una historia no apta para homofobicos�...