SOLO A MÍ [EDITANDO]

Tan bella y encantadora

Había sido una mala idea decirle a Akko sobre Diana, la chica se encontraba tan sorprendida que se había desmayado más de dos veces en esa noche, Chariot se sintió culpable. Le habría dicho a las demás chicas pero temía que reaccionaran igual o peor que la asiática.

No era algo fácil de procesar, menos cuando creías que todo estaba pérdido. Chariot entendía eso y lo respetaba, dándole espacio a su alumna después de que despertara de su tercer demasyo.

Croix: ¿Cómo lo tomó?- preguntó, sonriendole con calma.

Chariot: Parece que bien- suspiró desanimada- No dijo mucho, sólo palideció y se desmayó algunas veces.

Croix rio y caminó hacia la pelirroja, abrazándola con cariño.

Croix: Me lo esperaba.

Chariot: Yo también pero... pensé que se alegraría y me exigiría verla.

Croix: Oh, no dudes que lo hará en cuanto vea la oportunidad- sonrió y acarició su mejilla con delicadeza- ¿Les dijiste a las demás?

Chariot negó y escondió su rostro en el cuello de su acompañante, suspirando con cansancio y pensando en los acontecimientos anteriores. Quizá no había sido tan malo decirle a la castaña, lo procesaría y vería a Diana, eso si lo procesaba.

Todo dependía de la castaña, siempre dependía de ella.

Croix: Diana no habría despertado sino hubiera sido porque Akko soñó con ella.

Chariot: ¿Qué?- preguntó extrañada, alejándose para escucharla con claridad.

Croix: Diana me contó que vio a Akko en uno de sus muchos sueños, y que gracias a ella despertó- soltó un suspiro lleno de alivio y sonrió- Parece que Akko siempre la salva.

Chariot: Tienes razón... siempre lo hace-guardó silencio un momento y negó al recordar- No, de hecho, siempre salva a todos.

Ambas asintieron con una sonrisa y salieron a registrar el estado de las otras alumnas, dejando a la rubia descansar.

(...)

Akko: ¡Necesito verla!- exigió con molestia a lado de su maestra pelirroja.

Finnelan: Primero la veré yo, no creo que la señorita este dispuesta a escuchar sus gritos tan... escandalosos.

Akko: ¿Por qué? ¿Qué tiene que decirle que sea más importante? ¡Yo soy su...

Chariot: Hemos entendido, directora Finnelan. La veremos después de usted- interrumpió, cubriendo la boca de su alumna con nerviosismo.

Finnelan miró a ambas con curiosidad y se retiró sin decirles nada, pensando en lo parecidas que eran.
La castaña resopló molesta y pateó lo primero que vio en el suelo (la bota de la profesora Nelson). Chariot y Akko elevaron su mirada y se encontraron con el ceño fruncido de la profesora.

Nelson: Maestra Chariot, sería mejor si controla el nerviosismo de la señorita Kagari. ¿Por qué no van a recibir al Conde Hanbridge?

Akko: ¿Andrew? ¿Por qué está aquí?

Nelson: Si vas lo sabrás.

La castaña miró a su profesora pelirroja con duda y ésta le sonrió sin poder darle una respuesta.

Akko: Bueno, iré.

Nelson: Podrá ver a su amiga Diana más tarde, se lo aseguro.

Akko: Eso espero, me dijeron lo mismo hace horas y aquí sigo.

Chariot se disculpó con la profesora y siguió a su alumna malhumorada, llegaron a la entrada de la academia y vieron a muchos trabajadores hablando con otras profesoras. Akko caminó hacia Andrew y lo saludó con una sonrisa ligeramente notable.