Capítulo 11

1.9K 243 101
                                    

Lena

Es viernes y por fin ha llegado el momento. No sé cómo fue a suceder que todas las chicas tuvieron su oportunidad con Jake antes que yo; eso definitivamente no entraba en el plan.
Pero, por supuesto, los últimos serán los primeros. Estoy segura de que con nadie la pasará mejor que conmigo. Y aunque es verdad que no sé lo que ha hecho con las demás chicas, yo seré su favorita. Porque es fin de semana, porque he planeado algunas cosas y porque lo adoro más que ninguna.

Una vez que han dado las 2:25 y he cambiado mis zapatos por unos pequeños tacones, corro a la salida para esperar a Jake antes de que termine su clase. Me recargo casualmente sobre una de las rejas que da al estacionamiento y relajo mis hombros.
Alzo la barbilla.
Cruzo los pies con aparente sencillez.
"Ni me estoy esforzando".
Enderezo la espalda.
Observo casualmente mis uñas perfectamente pintadas.
Regreso la mirada al horizonte.
Vuelvo a alzar la barbilla. 

Cuando han pasado más de veinte minutos comienzo a preocuparme.

«No te pueden dejar plantada si no hicieron planes»

Y eso es verdad, no le dije nada porque me hunde en el vacío social y emocional admitir que no tengo el número de Jake Harvey.
Esperaba interceptarlo basándome en su horario escolar. Se suponía que saldría a las 2:30.

Sé que no está con ninguna de las otras chicas, pues especifiqué claramente que este fin de semana era mío. Además, todas ellas tuvieron su día. Ayer estuvo con Bethany y debo admitir que me puso los nervios de punta no saber de ella hasta las 11 de la noche que contestó en el grupo.

Sacudo todo pensamiento que cruza por mi mente y recuerdo enderezar la espalda de nuevo.
En situaciones normales, acudiría a revisar mi teléfono para fingir estar sumamente ocupada contestando mensajes. Lo que pasa es que si pierdo mi vista del terreno no veré a Harvey cuando pase.
Sin embargo, también comienzo a ponerme nerviosa mientras reparo en que toda la escuela me está viendo sola en una esquina.

Entonces recurro a la otra vieja confiable: fingir que estoy en una llamada telefónica.
Pongo el teléfono sobre mi oreja y comienzo a asentir, intercalando risas cada 5 segundos.

—Claro, amiga —digo al fantasma de la línea cuando unos chicos de sexto pasan junto a mí.

Eso tiene que significar que...
Justamente, Jake viene unos pasos detrás de ellos.
Comienzo a sentir cómo mi estómago se electrifica y me quedo sin aire por unos segundos.
Para disimular un poco, mantengo el teléfono en mi oído y me acerco a paso lento antes de que siga con su camino.

—Podríamos ir a esa fiesta, querida —suelto cuando estoy bastante cerca del chico. Sin embargo, sigo hablándole a mi "amiga".

De pronto los nervios comienzan a ganarme y me obligo a esconderlos por completo.
Penosa y nerviosa no se consigue la cosa.

—Hola, Jake —digo como si no me importara demasiado, pues sigo "en la línea" con el teléfono pegado a la mejilla.

—Hola —contesta con una sonrisa, acomodando el asa de su mochila sobre su hombro.

«¿Así o más perfecto?» Estoy que me muero. Jamás imaginé tener a Jake tan cerca, mucho menos que me estuviera saludando a mí.

—Soy Lena McDale —afirmo, volviendo a recordar enderezar la espalda.

—Lena McDale —repite sin más. Solamente su preciosa y masculina voz diciendo mi nombre.

Entonces comienzo a mirarlo durante más tiempo del que me gustaría. Estoy seriamente perdida en sus ojos verdes y la alineación de su sonrisa.

¿Quién da más por Jake Harvey? ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora