Capítulo 37

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Eleanor

No podía. Simplemente, no podía. Mi hija. Tan indefensa, secuestrada por dos brujas. Mi niña no tiene la culpa de nada. Y Perrie. Dios, solo espero que esté bien. Louis me estaba abrazando mientars lloraba desconsoladamente y Zayn iba de un lado a otro pensando que podía hacer.

-Hay que llamar a la policía-dijo deteniéndose.

-Zayn, esto es cosa nuestra. Si alguien va a ir a por ellas, somos nosotros-dijo Louis mientras me acariciaba el cabello.

-¡Ni siquiera sabemos donde están! ¿Se te ocurre un sitio?-dió una calada al cigarrillo y volvió a caminar de un lado a otro.

-No, pero juro que cuando las encuentre haré que paguen por ella.

-No podemos estar quietos sin hacer nada. A saber que podrían hacer con ellas. Louis, nuestra hija...

Louis me limpió las lágrimas y acunó mi rostro en sus manos.

-Amor, no te preocupes que todo esto se arreglará. Hay que llamar a los demás. Necesitaremos ayuda.

Zayn sacó su teléfono y salió al patio mientras iba a marcando.

-Tengo miedo de que a Jane le pase algo-susurré.

-No le pasará, pronto estará con nosotros, ¿si?

-¿Me lo prometes?

-Te lo prometo-dijo enrollando con sus brazos mi cuerpo y volví a romper en llanto.

Mi hija....

Perrie

Mis muñecas ardían muchísimo, las cuerdas estaban bastante apretadas. Antes vi que la estantería que tenia al lado había varios cuchillos, pero no podía mover los pies. Nadie había bajado aqui desde hace rato.  De pronto, escuché la puerta abrirse y vi a Alan bajar con una bandeja.

-Tu cena-dejó la bandeja en el suelo.

Habia un sandwich que cro que era de jamón, un Coca-Cola y una manzana.

-¿Como pretendes que coma si no puedo ni mover las manos?

-Ya te apañarás-se encogió de hombros y dió media vuelta para irse.

-Oye, ¿podrías aflojar la cuerda un poco? Me voy a quedar sin muñecas con este apretón.

-Órdenes de las señoritas Jenner y Jauregui. No puedo.

Subió las escaleras y cerró la puerta. Mierda, me moría de hambre y deseaba devorar aquella bandeja. Y también estaba preocupada por Jane. Solo espero que no se asuste cuando vea todo esto.

Lauren

Kendall y yo cenábamos tranquilamente mientras Alan salió a fumar fuera. Oigo un sollozo desde arriba y suelto un bufido.

-La mocosa ha despertado.

-Ve tu, eras la que se encarga de ella.

Me levanté sin ganas y subí arriba. Jane estaba sentada en la cama con los ojos llorosos abrazada a su peluche.

-¿Lauren?

-Hola, nena-fingí una sonrisa mientras me sentaba con ella en la cama.

-¿Donde estoy? ¿Y donde están mami y papi?

En sus ojos podía ver miedo y angustia. Lo cierto es que me dió algo de pena, pero no podía hecharme atrás. Debo cumplir mi venganza.

-Mami y papi han salido y me han pedido que te cuide.

-¿Y la tia Pezz? Recuerdo que estaba con ella. Íbamos a casa de mi amiga Maya.

-Ehm...se tuvo que ir. Tuvo unos asuntos que resolver. ¿Por que no descansas un poco? Al rato te subo algo para comer.

Antes de verla asentir o decir algo me fui de allí. Bajé hasta la cocina y miré a Kendall.

-Le diré a Alan que ponga escopolamina en la comida para que vuelva a dormirse.

-¿No crees que es ya fue suficiente con lo de esta mañana? Solo tiene cinco años-fruncí el ceño y ella me miró con una ceja alzada.

-Cuánto mas dormiste esté, menos problemas tendremos. ¿No te estarás hechando atrás, no?

-No, pero hubiera sido mas fácil traer a Eleanor en vez de a la niña-se encogió de hombros.

-Si, pero amabas sabemos que esa mocosa es su punto débil. Y ahora deja encariñarte y subele la cena a la mocosa-se levantó de la silla limpiando la boca con una servillera-. Y no olvides la escopolamina-salió de la cocina y suspiré.

¿Que demonios hago yo preocupandome por una mocosa que lo unico que hizo ella y su estúpida madre es arruinar mi relación? Definitivamente se lo merecían.

Le preparé la comida y con ayuda de Alan pusimos la escopolamina y se la subí al cuarto. Al principio dudó un poco, pero después acabó comiendo todo. Y al rato terminó durmiendo.

Zayn

-Llamé a todos, cogerán el primer vuelo que vaya a Florida. Menos Jade que esta embaraza-dije entrando a la sala.

-Bien, ahora lo único que nos hace falta es esperar-dijo Louis.

-No, mientaras podríamos pensar donde podrían estar en estos momentos-dijo Ele mirando a Louis molesta.

-Podrían estar en cualquier parte-dije mientras encendía un cigarrillo.

-A ver, pensemos. No hay muchos sitios en donde podrían estar. Que yo sepa, Lauren no tiene ninguna casa aqui.

-Kendall tampoco.

-Lauren se hospedó en un hotel aquí cuando vino. Pero dudo que estén allí sin que alguien las haya visto-dijo Louis mirando al vacío.

-Creo que va a ser mejor esperar a que los demás vengan-dije y Ele me asesinó con la mirada-. Eleanor...

-No voy a estar quieta ni un segundo hasta que mi hija y mi mejor amiga estén lejos de esas dos-se levantó y se fue escaleras arriba.

-Ire con ella-Louis se levantó y la siguió.

Heche un suspiro y le di una calada a mi cigarrillo. Ojalá esto se acabe pronto.





























































¿Me amas? -Segunda TemporadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora