Eres mía. [ Justin Bieber ]

NUEVE.

Llegamos al restaurante, hoy tengo planeado estar hasta las doce de la noche para ser yo la primera en desearle feliz cumpleaños y también tengo planeado decirle lo que he estado sintiendo por él desde hace ya un tiempo, estaba nerviosa e inquieta no deseaba asustarlo y mucho menos ser rechazada.

Cuando nos bajamos con Justin de su carro, íbamos caminando tranquilo hasta dentro del bonito lugar, lo había reservado únicamente para nosotros y poder estar tranquilos sin fans, sin paparazzis y dramas.

Nos sentamos en la mesa decorada bonito y nos atendieron con educación.

— Voy a pedir espaguetis ¿Y tú, Brooke? — Me preguntó Justin con felicidad.

— Me lo suponía. — Reí junto con él. — Una Lasaña. — El camarero escribió nuestras órdenes y se retiró.

Conversamos unos buenos minutos bebiendo de nuestro jugo ya que Scooter y nuestras madres nos prohibían beber alcohol, aún si sea la celebración más importante.

— Bien ¿De qué se trata esto? — Lo miré confundida con una sonrisa.

— ¿A qué te refieres? — Murmuré aún confundida.

— La cena, todo. — Explicó.

— Ah, sí, es por tu cumpleaños Justin. — Saqué de mi pequeña cartera unos lentes morados sin plásticos que el deseaba, me miró feliz cuando se los entregué.

— ¿Mi cumpleaños no es mañana? — Se los puso y reí emocionada pues se veía bien.

– Sorpresas, Bieber, paciencia. — Le guiñó mi ojo provocando un bufido de parte de él.

— Bien. — Murmuró tranquilamente y al ver que el camarero llegaba con las ordenes entregándonos esta y comenzamos a comer.

[ ... ]

Después de cenar fuimos a la terraza de aquel lugar, ya quedaban dos minutos para las doce y ya estoy desesperada por decirle feliz cumpleaños diecisiete.

— ¡Feliz cumpleaños Justin! — Dije más bien grité cuando dieron las doce, mientras lo abrazaba y daba pequeños besos en su mejilla

— Gracias Brooke. — Correspondió mi abrazo.

— Estoy orgullosa de ti Justin, de todo lo que has logrado a sido gracias a tus esfuerzos aún recuerdo cuando te ayudaba a grabar los vídeos, siempre te apoyaré. — Coloqué mis manos en su sedoso cabello castaño deseando que jamás se lo cortara.

— Gracias nena, gracias por todo sin ti no se que hubiera sucedido, eres uno de los soporte de mi vida, te quiero Brooke. — Sonreí conmovida a sus palabras, lo abrazo nuevamente suspirando nerviosa.

— Justin yo... — Corté mis palabras dudando bastante si decirle o no a Justin sobre lo que sentía.

— ¿Qué ocurre nena?

— No sé como decir esto, es algo complicado, Justin. — Susurré ligeramente nerviosa. — Hace ya un largo tiempo... Comencé a experimentar ciertos sentimientos que nunca antes había sentido a una cierta persona.

— ¿Hacia una persona? ¿A quién , nena? — Dijo tranquilo pero con la mandíbula apretada, me sonroje a su apodo y suspiré.

Lo miré fijamente pensando si sería bueno decirle, si sería bueno contarle lo que sentía y no arruinarlo. Cerré unos segundos mis ojos y los abrí sonriendo levemente para armarme de valor.

— Esa persona... Eres tú Justin, me gustas. — Él silencio incómodo era el que reinaba la situación en ese momento y aquello provocaba que la ansiedad golpeara mi cuerpo.

— ¿Estas bromeando? — Lo miré confundida y ladeé mi cabeza. La ansiedad y el nerviosismo rápidamente fueron reemplazados por la tristeza y la desilusión.

— ¿Crees que te estoy mintiendo? — Él asintió y mi corazón se hizo ligeramente más pequeño haciéndome sentir realmente triste. — No jugaría con algo así, Justin, creí que me conocías. — Solté negando.

Me di la vuelta y caminé a la salida de esa terraza para luego salir del restaurante, no entendía no lograba comprender como la persona que me conoce muy bien pensaría que mentiría con algo así, mi corazón latía rápidamente mi maldito enojo estaba floreciendo en aquel momento junto con la tristeza, era un sentimiento tan difícil de explicar sólo quería irme en ese momento.

— ¡Brooke! — Escuché gritar detrás de mí, no volteé estaba tan avergonzada y a la vez tan enojada.

— ¿Qué quieres? — Susurré con la voz afligida, me sentía sumamente mal, en ese minuto me arrepentía de haberle dicho a Justin, me regañaba internamente repitiéndome que debería haber guardado silencio, no debería haber hablado.

— Lo siento Brooke, tú eres la chica que quiero, mi mejor amiga no sé que decir con esto, eres una chica increíble pero no sabría si puedo corresponderte, solo sé que hay algo en ti que hace que me vuelva loco, una parte de mi me dice que te quiero sólo para mí y no compartirte, no lo sé es algo confuso. — Me intentó explicar agitado, claro que me sorprendí pues los sentimientos de Justin eran confusos ¿Solo para él? ¿Qué quería decirme con eso? Suspiré evitando las ganas de llorar.

— Lo siento Justin. – Susurré intentando retener mis lágrimas, lo abracé y su embriagante olor que se estaba impregnándose en mis fosas nasales, provocándome más ganas de querer soltar las lágrimas que retenía, acaricie su cuello pasando a su cabello, ese cabello que tanto amaba, me enamore Justin y eso nadie me lo podía negar. Nunca espere un rechazo como el que me acababa de dar el chico que más amo ¿Cómo es que en tan poco tiempo se puede pasar de la felicidad a la tristeza?
Justin me había rechazado, Justin no me correspondía y no supe que eso iba a doler tanto hasta este momento donde él me abrazaba con temor y yo con desconsuelo.

Onlyygreen.
886 palabras.