Esquizofrenia «Vkook»

X. Besos y un ojo morado.

Sus labios no se movían, era un simple beso, casi un roce de labios, el típico primer beso de adolescentes. Pero no era el de Taehyung.
Se quedaron un rato con sus labios juntos, hasta que el oxígeno fue más importante. Sus ojos se mantuvieron cerrados unos segundos después de separarse, y al abrirlos ambos se sonrieron mutuamente. Taeyung dio el primer paso y se le acercó nuevamente, robándole un beso. Al volver a separarse Jungkook lo veía sonrojado a tal punto que uno pensaría que tenía fiebre.

-¿Tan mal fue?- Negó rápidamente, el castaño no sabía que decir al respecto. Definitivamente quería besar al mayor, pero el beso que le robó lo dejó en las nubes. El silencio dejó a Taehyung expectante a una respuesta más justificada a la mudez del menor. -Bien, lo sien...-

Los ojos de Taehyung se abrieron a más no poder al sentir los finos labios de Jungkook apresar los suyos y su cuello siendo rodeado por los brazos del mismo. No se hizo de esperar y correspondió el inexperto beso del menor, guiándolo un poco. Cuando se separaron, ambos tenían sus respiraciones agitadas, habían alargado el beso lo más humanamente posible.

-Wow, eso fue... Wow.- Las mejillas de Jungkook no podían estar más rojas, definitivamente no podían.

-C-cállate.-

-Sería feliz si me volvieras a callar.- Jungkook abrió la boca a modo de protesta, pero ninguna palabra salió de su garganta. Estaba muy avergonzado. - Jungkook~- Miró mal a su "amigo" y este solo rió. Llevó su mano al mentón de Jungkook y acarició su labio inferior con su dedo pulgar mientras mordía el propio con leve fuerza.

-No me mires así, pervertido.-

Taehyung comenzó a reír vagamente y se acercó a Jungkook, atrayéndolo con su otra mano hacia su cuerpo. Y no se hizo de esperar para volver a besar al menor.

Jungkook solo se dejaba hacer por el mayor, que al parecer tenía mucha más experiencia que él. La mano de Taehyung bajó hasta su cintura, que comenzó a acariciar con delicadeza y parsimonia mientras que la otra acariciaba suavemente una mejilla. Jungkook solo jugaba con los pequeños cabellos de la nuca del que ya no era su amigo, no después de todo lo que estaba sucediendo.

- Sabes, comenzaré a molestarte más seguido para que siempre me calles así.- susurró el rubio una vez volvieron a separarse, Jungkook solo respondió con una sonrisa tímida. Taehyung sabía donde golpear para que el menor enrojeciera.

-Entonces no te prestaré atención.- sacó su lengua victorioso por su respuesta, pero nuevamente tenía los labios de Taehyung sobre los suyos, y sin rechistar correspondió.

-Pues te robaré besos de todas formas.

-Taehyung... Cállate de una vez.- Jungkook hizo un leve puchero inflando sus mejillas enojado. Lo más tierno que había visto Taehyung a lo largo de toda su vida.

-No.-

Jungkook golpeó el pecho de Taehyung a lo que el rubio solo pudo reír, haciendo enojar más a su acompañante, que solo lo golpeó más fuerte buscando dañar físicamente a su compañero que explotó en risas. Jungkook buscó otra forma de vengarse, y no encontró nada mejor que subirse encima de Taehyung como ese día en su habitación, las mejillas del rubio se encendieron al tener al chico que le gustaba en esa posición.

-¿Q-qué haces?- preguntó un nervioso Taehyung al notar que Jungkook lo miraba con ojos divertidos al ver que su plan estaba surtiendo efectos favorables.

-¿Yo? No estoy haciendo nada.- la sonrisa de Jungkook creció al notar como la manzana de adán de Taehyung subía y bajaba con dificultad, supo que su amigo había tragado con dificultad. Sintió las manos del contrario cernirse a su cintura. Esta vez fue Jungkook el que trago grueso, las manos de Taehyung lo estaban acariciando, y eso estaba sacando a Jungkook de sus casillas. Estaban en medio del instituto, en las gradas, donde todo aquel que saliera al patio del edificio los podrían ver. Sería una situación completamente embarazosa y que muchos podrían sacar de contexto. Terminarían en el despacho del rector y podrían ser expulsado. No gracias, Jungkook quería terminar sus estudios.