Esquizofrenia «Vkook»

XXIV. Asesino.

Taehyung tragó saliva, produciendo un sonido que solo hizo sonreír a su novio. Una sonrisa que lo colocó inquieto.

Jungkook lo miraba impaciente por recibir una respuesta, estaba demasiado extasiado por hacerlo en el salón de clases.

—Tae~... ¿No vas a responder?... — Hizo un puchero, dando un pequeño saltito, comenzando un pequeño berrinche sobre las piernas de su pareja.

—J-jungkook, es arriesgado...— Susurró el rubio esperando a que su novio entrara en razón, pero este seguía con su puchero.

—Una aventura es divertida. — Tae estaba a por ceder, si no fuera por las voces que se escucharon en el pasillo.

—Jungkook, alguien viene. — Hongjoong apareció en el salón, con Tae presente, lo cual le asustó. Se levantó y tomó sus cosas, caminando hasta las cortinas para subirlas rápido.

—Es Yoongi, viene con sus amigos. — Esta vez apareció Mingi, y detrás de ellos estaba otra persona, pero no la pudo dilucidar bien porque Tae tomó su mano para salir del salón rápido, pero el grupo de matones los lograron intersectar de todas formas.

—¿De verdad vas a seguir con esto, Yoongi? — Preguntó Jungkook, molesto por que no dejaba de molestar, y porque había arruinado su posible cogida con Tae.

—Seguiré hasta matarlos a ambos. —

—¿Te convertirás en asesino solo porque dos homosexuales no se sienten intimidaos por un Umpa Lumpa como tú? — Atacó Tae, quién había sido golpeado por todo el grupo, pero si hubiera un encuentro cara a cara con Yoongi, ambos sabían quién saldría ganando.

—¿Cómo me acabas de llamar, maldito teñido? — Gruñó Yoongi, acercándose peligrosamente a Tae, pero el más alto ni se inmuto.

—Umpa... Lumpa...— Jungkook casi explotó en risas. Tomó la mano de Tae y comenzó a caminar lejos de ellos, tirando de su novio.

—Dejen de joder... Ya superen que no les tenemos miedo, ya nos han golpeado, y seguimos aquí. — Jungkook les guiñó un ojo y ambos se fueron del lugar, hacia su próxima clase.

Una vez en el salón, que, por supuesto estaba vacío, aún faltaban un poco para la siguiente clase. Jungkook dejó su mochila en su asiento y se subió a las piernas de Tae.

— No te vas a salvar de cumplir mi fantasía, Kim Taehyung...— Jugó con su cabello rubio con raíces. Tae sonrió levemente.

—Bien... Última clase... Salón de artes, te esperaré ahí. — Besó sus labios con ferocidad hasta que los alumnos comenzaron a entrar. Jungkook estaba más que feliz.

—¿Has pensado en cambiar su color de cabello? — Le preguntó viendo su cabello con un poco más de ahínco. — Te verías muy guapo con un color ocre... O con rojo... ¡Azul! — Gritó, llamando la atención de algunos de sus compañeros.

—¿Azul?, ¿no es un poco llamativo? — Preguntó Tae. —Creó que podría ser castaño. — Jungkook asintió.

—Con cualquier cosa te verías hermo...— Jungkook dejó de hablar, un fuerte mareó lo atacó, tal así, que se tuvo que afirmar de los hombros de Tae para no caer hacia atrás.

—¿Jungkook?, hey, ¿qué sucede? — tres voces se hicieron presentes, su novio y sus dos alucinaciones.

—Es por que aparecí. — Habló una cuarta voz. Era grabe, de ultratumba. Mingi y Hongjoong se dieron vuelta, pero había desaparecido, al igual que el mareo. Jungkook estaba demasiado asustado... estaba tiritando y lágrimas corrían por sus mejillas. ¿Qué había sido eso?