Esquizofrenia «Vkook»

VIII. Cállame.

Jungkook se detuvo en cuanto escuchó las palabras de Taehyung. Ciertamente era muy probable que le dijera que tenía novia, que no era homosexual, o algo por el estilo. Quizá también se equivocó, y tal vez mucho al haberse dejado llevar por sus acciones de adolescente confundido con su amigo de hace pocas semanas que se había enterado hace solo unas horas que padecía esquizofrenia. Jungkook inventaba cada escenario en su mente en tan solo segundos de los que había pasado desde la pequeña frase de Taehyung. No sabía porqué le había dado ese pequeño beso, solo estaba confundido con él, o eso quería creer, nadie puede empezar a sentir cosas por alguien que recién comienzas a conocer, ¿o sí?
No, para Jungkook eso carecía totalmente de lógica, esas cosas solo pasaban en películas y novelas cursis, de las que solía ver y leer su madre, respectivamente. — ¿Qué sucede Tae?— el nombrado soltó un suspiro y desvió la mirada, aún no estaba seguro si debía decirle o no la verdad al menor, no sabía cómo se lo tomaría, o si le creería. Tenía miedo, y no lo iba a negar.

— Yo...— sólo una palabra salió de su garganta, la cual se encontraba seca debido a los nervios. Comenzó, al igual que Jungkook, a inventar posibles escenarios y respuestas que pudieran ocurrir después de lo que le diría, pero aún así no quería. Tomó una bocanada de aire, llenando sus pulmones del mismo, y exhaló, pensando aún, si debía ser sincero o no serlo. — Creo que es muy rápido... Aún no nos conocemos lo suficiente...—

Cobarde, pensó. No había sido capaz de decir la verdad, pero al menos había dicho algo de ella, pero no era que de verdad le acomplejaba. Debía contarle sobre su inicio, pero no se atrevía.

—Oh, entiendo... Lo siento.— se bajó del regazo de Taehyung un poco desanimado y a la vez aliviado de que el mayor no le hubiera rechazado, o no totalmente. Se sentó al borde de la cama, mirando y jugando con sus manos. No sabía que decir o hacer, se sentía un poco mal.

— Hey, Kookie... No quiero que pienses que te he rechazado ni cosas así... Sólo que es muy rápido, solo llevamos un par de semanas, y con suerte...— Jungkook asintió, desviando la mirada, intentando evitar largarse a llorar sin entender la razón.

—Lo sé Hyung, lo siento así lo incomodé por mi repentino actuar.— habló un tanto bajo, aún no sabía como tomar la situación que estaba ocurriendo en su dormitorio. — Perdón por mi precipitada acción, solo estoy confundiendo sentimientos... No creo que alguien pueda gustar de otra persona en tan poco tiempo...—

Por alguna razón, el corazón de Taehyung dolió un poco frente a la última frase dicha por el azabache. —Está bien, no te preocupes.— se levantó y se paró frente a Jungkook, quien seguía sentado en su cama. — Creo que debería irme...— se inclinó un poco y dejó un beso en la cabeza de su amigo. — Nos vemos mañana Kookie.— se disponía a salir de la habitación, cuando repentinamente giró sobre sus talones con una enorme sonrisa. — Por cierto... No quiero que confundas sentimientos ni los niegues, porque yo no lo estoy haciendo.— le sonrió por última vez y salió de la habitación y posteriormente de la casa, soltando una pequeña risa al escuchar un grito ahogado por una almohada proveniente de la casa de su vecino, la que acababa de abandonar.

Jungkook no entendía por qué Taehyung se enfermaba tan seguido, y tampoco entendía por qué lo molestaban cuando estaba sin él, pero dejaban de hacerlo cuando estaban juntos.

Habían pasado un par de meses desde el suceso en la casa de Jungkook, pero en ningún momento se habló del tema.
Su relación, como cualquier otra, se había vuelto más estrecha y especial. Eran más unidos y de veces en cuando se les salía lo meloso. Ya estaban catalogados por ellos mismo bajo las palabras mejores amigos.

Jungkook ayudaba a Taehyung en todas las clases, menos en historia. Su amigo llegaba a corregir al profesor de historia, lo cual le causaba gracia al menor. — ¿Cómo sabes tanto de historia?—

Taehyung entró en pánico, debía encontrar una respuesta rápido y que fuera lo suficientemente creíble. — Desde muy pequeño me ha interesado la historia, por lo que comencé a leer sobre esta. — en parte decía la verdad, pero no completamente.

— Kim, Jeon. En mi clase no se habla.— el profesor Choo les llamó la atención cuando estaba pasando el por qué la Revolución Francesa había comenzado. Ambos se disculparon, escuchando las risas de sus compañeros de clases, no les importó en lo más mínimo. De hecho, siguieron conversando mediante mensajes en el cuaderno de Jungkook.

Jungkookie~

¿Qué sucede Hyung?
Si nos descubren nos despacharán a la oficina del director.

Ay, que amargado. Eres malo conmigo :(

¿Yo, por qué?

Porque ni me dejas decirte lo que quiero :(

Tae, me pasas el cuaderno sin escribir lo que quieres decirme...

...

¿Qué quieres decirme?

Taehyung estaba por escribir cuando el profesor habló. — Kim, Jeon, a la oficina del director. Les advertí.— Jungkook iba a protestar, le había venido un cambio de humor radical, pero sintió el leve tacto de Tae, y fue como si le hubieran inyectado un calmante intravenoso. Fulminó al rubio, solo recibiendo una sonrisa inocente. Ambos amigos se levantaron y salieron del aula con sus mochilas, escuchando el murmullo de sus compañeros y luego el grito de su profesor para hacerlos callar.

Al salir, lo primero que hizo Jungkook, fue golpes al mayor en la cabeza. — Te dije que nos despacharían.— volvió a agredir la cabeza del más alto.

— Ya, ya. Lo siento, pero quería decirte algo importante.— la cara del menor le dio a entender que quería que prosiguiera. — Te quería decir que te ves lindo cuando no entiendes al profesor Choo.— Jungkook desvío la mirada avergonzado por culpa del comentario de Taehyung.

— C-cállate tonto...— se quejó, cruzando sus brazos por sobre su pecho e inflando sus mejillas, logrando producir una imagen totalmente adorable de su persona, robándole otra de tantas sonrisas al mayor.

Era la oportunidad de Taehyung. Ambos tenían claros sus sentimientos, pero ninguno se digna a a dar el primer paso, pero Taehyung estaba aburrido de tantos titubeos, caricias retenidas, miradas que demostraban más que amistad. Sonrisas únicas que solo entre ellos entendían. Risas y tantas otras cosas más, que se habían convertido en algo más que una simple amistad. — Cállame.—

💉💊

Hola :3

Estoy en "hiatus" indefinido debido a que me han confiscado el teléfono debido a mis notas :^).

Lamento si hay errores ortográficos.

Por lo que las actualizaciones serán lentas... Más de lo normal.

Greenie.