Dulce Luna Mía ©

Cap 25. Desilusión.

POV. Lena White Jacobsson.

- Felicidades Luna. Todo quedo hermoso. - Me felicita, observando el camino decorado con flores que daba al lago que se estaba descongelando y mostrando un poco de verde, la madre de Tyler, Ana quien tiene las mismas pecas que su hijo.

- Y la comida esta deliciosa. - Le sigue Noah padre de Tyler. Asentí.

- Muchas Gracias, espero que lo disfruten. Ha sido el esfuerzo de todos los chicos. - Sonreí sin más, yendo a ayudar a Michael a seguir sirviendo un poco de la comida junto a Cindy la Omega de Graciela. En el camino choque con ciertos ojos grises.

- Luna. - Me vio con admiración y luego leí en sus ojos que quería decirme algo.

- Te escucho. - Dije sonriente esperando por lo que tenía por decir.

- Yo mmm, creo que debo disculparme porque no creí que sería bueno que una humana sea nuestra Luna y... - Tragó fuerte.

- Tranquilo Jean. Yo tampoco estoy muy segura de todo esto. Pero intentaré esforzarme. - Este sonrió.

- Lo sé. - Dijo apenado. - Gracias por todo. Y la comida esta deliciosa. - Confiesa siguiendo con su comida. Rió un poco.

- Las chicas también ayudaron. - Dije sonriente. - Disfruta el resto del festival te veo luego con los demás. - Dije siguiendo mi camino.

- ¿Todo bien? - Pregunte atando mi cabello y poniéndome unos guantes para servir algunos platillos.

- Todo bien Luna. - Asintió Cindy. Yo abro los ojos sin querer asombrada por lo que he visto en sus ojos, luego de leer en sus ojos una verdad maravillosa, está en cinta.

- ¿Cuánto tienes? - Le pregunto con una sonrisa acercándome a tocar su vientre. Me sonríe.

- Tres meses. - Asiente totalmente feliz.

- ¿Por qué no lo había notado antes? - Pregunto porque bien podría haber leído en sus ojos mucho antes de ponerla a trabajar en servir la comida, ella tenía que cuidarse.

- Porque yo tampoco lo había notado agacha la mirada con un sonrojo. Tenía mareos y demás pero no creía posible esto. - Me sonrió acariciando su abultado vientre.

- Si estas cansada mejor ve a dormir un rato o ve a degustar de los platillos. - Pedí un poco asustada por haberla puesto a hacer el trabajo.

- No se preocupe Luna esto me distrae mucho. Además los embarazos en lobos no son iguales a los humanos. - Abrí los ojos con asombro. - Somos más fuertes, así que no se preocupe por algo como esto. - Asentí convencida. Ella realmente no parecía nada estar embarazada, de hecho la había visto corriendo temprano, y levantando unos adornos pesados en la mañana con muy poco esfuerzo.

- Bueno al parecer hasta lo imposible es posible aquí. - Ella devolvía mi sonrisa. - Gracias a ustedes. Ahora que lo estaba pensando para el siguiente festival de Otoño. Podríamos hacer concursos gastronómicos y concursos de disfraces. -

- Buena idea Luna. Es una lástima que no tuviéramos más tiempo para preparar todo. - Asintió Cindy dándome la razón.

- ¿Qué es una lástima? - Llegó Graciela a abrazarla por la espalda sobando por debajo de la tela su vientre.

- Luna piensa hacer concursos gastronómicos para el festival de otoño. Ya que en el verano la mayoría nos reunimos en el lago no es necesario que se haga uno. -

- Enviare a imprimir los avisos la siguiente semana. - Digo con alegría. Esto me estaba gustando demasiado.

Seguí haciendo lo mío porque mientras algunos se iban a de regreso a su lugar en el pueblo y sus negocios, otros ingresaban sobre todo ahora que el horario les indicaba a los trabajadores de la fábrica que era su hora de salida. En el atardecer había mucha más gente, pero no tenía una sola queja.