1930
«Has visto demasiado...»
Luego de ver cómo su familia fue asesinada, Jeon Jungkook a su edad de trece años fue llevado a un monótono psiquiátrico donde el trato hacia los pacientes es completamente malo y los castigos parecen basados del mismís...
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«¿No saben que los malvados no heredarán el reino de Dios? ¡No se dejen engañar! Ni los fornicarios, Ni los idólatras, Ni los adúlteros, Ni los sodomitas, Ni los pervertidos sexuales, Ni los ladrones, Ni los avaros, Ni los borrachos, Ni los calumniadores, Ni los estafadores heredarán el Reino de Dios!
—1 Corintios 6:9-10»
Cuando la pureza se pierde...
—Dios mío, Creo en ti. Fortalece señor mi fe. Afirma mi esperanza. Los amo con todo.. Ahhh~ —Gimió cuando la lengua del demonio pasó ágilmente por su cuello.
—Continúa. —Le ordenó en un susurro.
—... Con todo mi corazón. Enciende mi amor. Me pesa... Mhg... Haberlos ofendido. Aumenten mi dolor... Ah~ Más. —Jadeó cuando los dientes del mayor comenzaron a mordisquear sus pezones—. Los adoro como mi primer principio, Los deseo como mi último fin. Les doy gracias.... Ah~ Tae~
—Sigue rezando, Hermoso. Déjame escucharte.
Se acercó a la boca del impuro y sacó su lengua, Rozándola con sus labios. Sonrió cuando el pequeño debajo suyo también sacó la suya y comenzaron a juguetear con las puntas de sus lenguas.
Tan sucios...
Tan jodidamente calientes.
—... Como a mi continuo bienhechor, Los invoco como mi soberano defensor. —Continuó recitando enredando sus dedos en las hebras oscuras del mayor, Haciendo que juntaran sus frentes.
Taehyung comenzó a frotar con su mano la erección de su pequeño por encima del pantalón. Jungkook gimió en alto.
—Dígnate, Dios mío. Dirígeme con tu sabiduría; Contenme con tu justica, Consuélame con tu misericordia y ampárame con tu poder ahhhh~ ¡Tae! Ahí n-no... Oh, Joder.
El demonio comenzó a desprender los dos botones del pantalón, Bajando el cierre con lentitud. Luego, Dejó que dos de sus dedos se introdujeran en el bóxer y comenzaran a juguetear con el glande goteante de pre-semen.
—Les consagro... Hmmm... Oh, Joder, Continua.... Ahhh~... Les c-consagro todos mis pensamientos, palabras, obr... AHHHHH~, ¡Taehyung! —Gritó cuando sintió como empezaba a ser masturbado—. Obras y t-trabajos; a fin de que... Ah~ h-hoy en adelante piense en ti, Hable de ti, Obre en ti y padezca por... T-ti.
—Bebé, ¿Por qué paras? Amo cuando rezas mientras te estoy haciendo mío. —Le susurró mirándole con su único ojo que le quedaba después del incidente. En donde suponía debía verse su ojo izquierdo, reposaba un parche de cuero negro.
—Fóllame ya. —Pidió—. Taehyung.
—Si terminas de rezar mientras lo hago hacemos una segunda ronda.
—Como sea. —Tan frío...
Tan indiferente...
Taehyung sonrió y comenzó a bajar con su lengua por el abdomen de Jungkook, Sacándole un jadeo. Una vez estuvo en la zona pélvica, Despojó las piernas del menor de su pantalón y ropa interior. Se relamió los labios por la hermosa vista e hizo un ademán con su mano para que el menor se girase. Jungkook obedeció en silencio.
—Señor, Hágase en mí... Ahhhh~ Joder, Sigue así...
—¿Que te coma el culo? ¿Quieres eso?
—¡Cállate y continua! —Exclamó, Sacándole una carcajada al demonio que continuó con su trabajo—. Y en todas mis cosas tu Santísima voluntad en tiempo y e-eterni.. Ahhh~ eterni-dad. Te suplico que ilustres mi entendimiento, Abraces mi voluntad, purifiques mi corazón y santifiques mi... Ahhhhh~ ¡Joder, Taehyung!
—Amor, ¿Qué te dije?
—Agh, Al menos déjame recitar esa mierda rápido para poder disfrutar en paz. No me puedo concentrar cuando mi novio me está follando. —Replicó rodando los ojos.
—Bien. En ese caso esperaré a que termines. —Dijo Taehyung sonriente.
—No te creo.
—Amor, Continua. Yo espero.
Jungkook volvió a rodar los ojos y apoyó su cabeza contra su puño para continuar.
—... Y santifiques mi alma. Socórreme, Señor con tu gracia para vencer La soberbia con la humildad. La avaricia con la generosidad. La pereza con la diligencia. La luju... AHHHHHH~ ¡OH, JODER, TAEHYUNG!
El demonio de la lujuria esbozó una sonrisa sombría mientras extendía sus alas negras e introducía su pene en el ya lubricado ano de su, ahora pareja. Jungkook se aferró de las sábanas, Gritando del placer y suplicando por más.
—Continua, Jungkook. Vamos. —Gruñó Taehyung embistiéndolo más rápido.
—Ahhhh~ Joder. La lujuria, con la m-mortificación. —Taehyung soltó una carcajada ante esas palabras—. La envidia con la caridad. La ira con la paciencia. La gula con la abstinencia. La tibieza con el fervor... ¡Más, Taehyung, Más!
El demonio aumentó el ritmo.
—Y todas mis i-inclinaciones y afectos desordenados con tu santo temor y amor.... ¡Taehyung, Me voy a correr!
—Aún no terminas. —Dijo sintiendo su orgasmo llegar.
—¡Oh, No me estés jodiendo, Taehyung!
—¡TERMINA, JUNGKOOK! —Gritó Taehyung.
—¡AMÉN! —Gritó permitiendo a su miembro derramar un torrencial de semen al mismo tiempo que Taehyung.
Ambos hombres jadearon tratando de recuperar el aliento. El demonio salió del impuro permitiendo que este se girara mirando al techo.
—Repite... Cómo vencer a la lujuria.
—La lujuria con la mortificación. —Dijo—. ¿Por qué no me besas de una vez?
Taehyung rió, Acercando sus labios a los de Jungkook, Abriendo sus bocas en el acto para permitir a sus lenguas enrollarse.
