1930
«Has visto demasiado...»
Luego de ver cómo su familia fue asesinada, Jeon Jungkook a su edad de trece años fue llevado a un monótono psiquiátrico donde el trato hacia los pacientes es completamente malo y los castigos parecen basados del mismís...
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"Cariño, Te voy a acechar esta noche.
Te voy a cazar, te comeré vivo.
Como los animales.
Tal vez piensas que puedes esconderte.
Puedo oler tu aroma a millas.
Como los animales".
—Animals. Maroon 5.
✝✝✝
Abril 05 de 1930 (Dos días antes)
En el momento que salió del apartamento, Se dio cuenta que no había vuelta atrás y que su tumba ya estaba lista, Esperando por él.
Muchos dirán que tal vez no pensaba con claridad, Puesto a su rol como impuro. Pero desgraciadamente, Jeon Jungkook era completamente consciente de lo que estaba haciendo.
En la ausencia de Taehyung, Había logrado entrar a la escuela y justo ese día iba a comprar sus implementos acompañado de alguien que, Ante los ojos del demonio, era el menos conveniente.
Fue entonces cuando lo vio allí, Esperándolo en aquel parque sentando en una de las bancas mientras observaba jugar a los niños. Esa visión era una metáfora de la línea que estaba cruzando, Del peligro al que le estaba apostando y la entrada al verdadero infierno.
No tomó en cuenta en riesgo y caminó hacia allí, Hacia el chico.
—¡Jungkook! No pensé que vendrías.
La reacción del castaño fue sonreír ligeramente con los labios, Metiendo sus manos a su abrigo.
—Esta vez no estoy enterrando a nadie, BamBam. —Dijo, Recordando el día donde no pudo encontrarse con el pelinegro debido al funeral de su mejor amigo y su psiquiatra.
El hecho de que ellos estuviesen ahí uno frente al otro se trataba de muchas casualidades que la vida puso en el camino de ellos, Siendo la más grande encontrarse el mismo día y a la misma hora en la escuela durante las inscripciones. Fue ese día del primero de abril donde se propusieron verse para compensar aquel sábado que se había echado a perder y para que Jungkook pudiera despejar un poco su mente de sus problemas.
—En ese caso, Vamos. —Expresó el mayor sonriéndole cálidamente.
Toda la tarde, Se la pasaron en el parque de atracciones de la ciudad, Subiendo a los pocos juegos que habían y comiendo diversos dulces que le compraban al primer vendedor que vieron. No compraron ningún implemento escolar.
Una vez cayó la noche, Jungkook y BamBam caminaban por una acera completamente desierta de cualquier persona, Mientras reían a carcajadas. Ese momento, El pelinegro mayor entendió que un ser impuro aún mantenía sentimientos bastante ocultos como lo eran la alegría y la sensibilidad, y que la cuestión era que este aprendiera mantenerlos consigo, Cosa que en la situación del menor no pasaba debido a las mil y un desgracias que le ocurrían en su diario vivir y que ya había acostumbrado a tener.
