Secret sex- Joel Pimentel

Capitulo 10.

Dos de sus dedos masajeaban mis labios vaginales, tratando de suavizarlos y poder penetrar, pero mi líquido y apenas salía, y creía que Joel quería un lubricante mejor. Saco sus dos dedos y los chupo, empapandolos de saliva sin quitar  su mirada de mis ojos. Los observó y los separó, una sonrisa curvo sus labios. Me dedico una mirada, y después se inclinó depositando un beso en mi monte de Venus, luego su lengua acarició mi firmeza. me arquee, recargandome en mis manos, levanté el pecho y lance un suspiro

Cerré los ojos y mordí mi labio inferior dejándome llevar por aquella ardiente sensación que me proporcionaba la cálida de lengua de Joel. Su miembro bucal, siguió acariciando mi firmeza y a veces la puerta en forma de raya , que permitía la entrada en mi. Dejé caer mi cabeza hacia atrás, me volví a estremecer cuando sentí que los dedos de Joel empezaban  a acariciar mis labios vaginales. Despegó sus dedos, abriendo mis labios, los dos dedos de Joel me penetraron suave y lento. Sentí un vuelco en mi corazón, y un escalofrío recorrer todo mi cuerpo, jadee, mi vagina gustosa acepto.

Sus dedos entraban y salían, cada vez más rápido. Se movían circularmente haciéndome desfallecer. Sentía como gran parte de mi excitación salía a vista de Joel, y como lo envolvía, el gimió y fue algo que me erizo más los pezones, sentían que hasta me dolían y no podía pensar como estará a él, seguro que su bragueta se le marcaría por un buen tiempo. 

—Oh...ah, ah, ah sí...¡Joder, si!—grite, mientras movía mi cintura también. Estaba apunto de llegar a un orgasmo, y es que sus manos eran mágicas. Cerré los ojos  y me sentí mareada, me sentí débil, el orgasmo se avecinaba y Joel lo supo, aumento los movimientos.

—¡Joel! ¡Oh Joel, si! — y el orgasmo llegó, llevándose todas mis fuerzas. Me deje caer en la cama, reposando mis espalda, cerré los ojos  y comencé a normalizar mi respiración. Lance un suspiro y cuando me sentí realmente bien, sonreí. Abrí mis ojos y me encontré con Joel, totalmente desnudo. Mordí mi labio inferior y sonreí.

—No se te escapa nada.—dije con una sonrisa, hicandome en la cama y atrayendolo hacia a mi.

—¿Qué esperabas? Soy Joel Pimentel.— reímos y golpeé su bajo levemente. Me estrecho entre sus brazos, y sentí su cálida piel. El fuego volvió a encenderme, al rozar mis pezones con su piel, enseguida  se erizaron, con un ágil movimiento, quedo sobre mi. Acostados en la cama, me beso el cuello nuevamente, con un beso lleno de pasión, gemi....

Sus labios besaron mi cuello con desefrenada pasión. Distrayendome de todo, hasta que sentí la punta de su pene entrar, segundos después su pene estaba dentro de mi. me arquee y su boca tomo uno de mis pezones, lo chupo, succionó y probo. Empujaba con más fuerza cada segundo más, me sentía en cualquier parte pero menos en ese lugar, disfrutaba tanto hacer el amor con Joel.

—Oh...ah, ¡Jo, joel!— el orgasmo estaba a punto de llegar, aumento la velocidad y me aferre a sus hombros. Con un gemido brutal me avisó que había llegado al orgasmo, mientras yo estaba por hacerlo, empujó con más fuerzas, hasta que me sentí más débil de lo normal.

Y llegue.

El orgasmo nos destrozó y nos envolvió en un cálido abrazo. Se dejó caer sobre mi, mientras yo sonreía. Hasta que perdí la noción del tiempo y me quedé dormida.

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