Capítulo siete.

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Era increíble. Afuera estaba lloviendo, y adentro de esa habitación, sobraba el calor. Joel beso mi cuello, con delicadeza. Envolví mis brazos en su cuello, y el se coloco entre mis piernas una vez más. Me miró a lo lejos, y me besó. Luego me penetro. Deshice el beso para soltar un gemido. Fue delicado. No fue nada brusco, ni agresivo. Entro en mi fácil y lento. Sin dejar de mirarme a los ojos, hice un esfuerzo para no cerrarlos y también mirarlo.

—Más rápido —murmure entrecortadamente.

Me miró con ojos de "¿Estas segura?" y entonces enrede mis dedos en su cabello.

—Por favor.

Él suspiro y las embestidas comenzaron a hacerse más fuertes y rápidas. El dolor disminuyó y el placer aumento.

Ahora solo no eran mis gemidos, se incluían los de Joel. Dejé que me tomara.
¡Al diablo con mis pensamientos! Luego los aclararía.

—¡Oh ____—Gimio de lo más excitante y contribuí envolviendo mis piernas a su cintura, pegándolo más a mi.

—¡Oh, oh, oh! —Gemia mientras lo sentía dentro de mi. Volví a sentir espasmos en mi cuerpo. El de Joel igual temblaba. Me aferre más a su espalda, como si me fuera a caer. Joel salió y después entró bruscamente, haciéndonos llegar al orgasmo. Con un grito al mismo tiempo, nos hicimos notar agotados. Joel dejo caer su cabeza en mis pechos mientras yo temblaba, nuestros pechos subían y bajaban agitadamente.

—¡Wow!—exclamo él, sin moverse para nada.

—¿Qué?—murmure.

—Dios esto ha sido...

—¿Traumante?

—No—suspiro—Maravilloso. Es el mejor sexo que he tenido en mi vida.—Me sonroje y bostece.

—Vamos a dormir, muñeca—se acomodo a mi lado, y me atrajo hacia él. Suspiré y me deje abrazar por sus cálidos brazos. Cerré los ojos.—Descansa. —susurro en mi oído, y besó mi mejilla. Lance otro suspiro más y después ya no sentí, ni escuche nada.

Los rayos del sol dieron directo a mi cara, trate de abrirlos pero no pude, sentía los párpados como dos rocas. Traté de estirarme, pero algo me lo impedía, con mis manos toque y sentí el brazo de alguien.  Abrí bien los ojos y me encontré con Joel.

Aún dormía. Me detuve a observarlo. Sus labios carnosos, sus ojos cerrados, su pausada respiración. Deslice uno de mis dedos por su hombro, el cual abrazaba mi cintura. Su piel era suave, su cabello estaba enmarañado. Se veía tremendamente bien. ¡Dios! Bien le queda poco. Perfecto.

Y luego me vi a mi, en la cama de él.
'Caíste y él lo dijo'. Eso era lo peor, él me había advertido que tarde o temprano caería y así fue. Sentí asco de mi misma, y  odio hacia el. Exacto, ¿dónde quedó el odio que decia tenerle?

Asustada de mi misma, me levanté sin hacer ruido. Di vueltas por toda la habitación varias veces y tome una decisión. Me iría. Si, era mejor.

Me coloqué mi ropa interior, y tome 'prestada'  una camisa de Joel.  Lo cual me quedo gigantesca, pero no importaba, no quería ponerme el vestido, me puse mis tacones, y guarde el vestido en una bolsa que estaba tirada. Me mire al espejo y empecé a cepillar mi cabello después tome mi celular.

Mire a Joel y sin que se despertará besé sus labios en un corto beso, suspire y salí de su cuarto,  segundos después de su casa, y también tendría que salir de su vida.

[...]

Llegué a casa y mis padres no se encontraban 'como siempre', seguro ni se dieron cuenta que no pase la noche en casa. Saque mi celular y lo prendi.

10 llamadas de Itzel y 5 mensajes, 4 de Itzel y uno de un número desconocido.

Abrí los mensajes y los leí: '____, ¿dónde estas?' 'Cariño, me estás asustando no te encuentro' 'Erick dijo que te fuiste con Joel, picarona' 'Recuerda el preservativo y si quiera me hubieses avisado ¡mujer!. Reí al imaginarme la cara de Itzel, abrí el mensaje desconocido y mi corazón dio un vuelco; 'Te fuiste, ¿por qué no me levantaste? No sabes el susto que me diste, tuve que mandarle mensaje a Erick para que me pasara el número de Itzel y ella al tuyo. Creo que la he asustado, en fin, te veo en la escuela, cuidate'.

Suspiro riendo y guarde el número de desconocido como Joel, subí a mi habitación y me di un baño al término me puse algo atrevido.

Me deje el cabello suelto, y con unas ondas, brillo labial y sonreí. Segundos después mi celular comenzó a sonar, mi corazón dio un vuelco "Es él"

15 votos y sigo.

Secret sex- Joel PimentelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora