Dolor de Cabeza (LP)

-24-

Laura había hablado con helena, la chica había estado muy rara, algo le pasaba, lo único que le dijo al contestar su llamada era que estaba algo resfriada, que hiba a dormir y se despidió sin mas.

-Laura-dijo una sueve voz sacándola de sus pensamientos- Lauren te envia esto.

Le extendió un sobre, últimamente lauren se había tenido complicaciones en su salud por lo que los detalles sobre el nuevo álbum los discutia con Catherine.

-Gracias, estaba esperando esto- dijo al hojear los papeles.

-No quisiera molestarte pero quería invitare a almorzar, me has ayudado mucho, debo hacer algo por ti, si no te incomoda.

-Catherine, muchas garcias pero no puedo.

-Lo entiendo, no te preocupes- y la chica con una sonrisa en la boca se retiro del lugar.

"Enserio te gusta tanto" pensó Catherine al observar como Laura marcaba sin obtener respuesta el número de Helena. ¿Por qué podían llegar a quererla tanto?, Helena no tenia nada, nada bueno, era tan normal, ¿Que histe pequeña estupida?

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-Ya me voy, regreso el lunes- dijo con su maleta en la puerta mientras veía llegar el taxi.

-Solo vuelve y has tu trabajo-fue lo único que dijo Lauren.

El vuelo fue horrible para Catherine, no le gustaban los aviones y menos si no era en primera clase.

Tenia un plan muy bien elaborado en su mente, talves agobie tanto psicológicamente a Helena haciendo que terminara como su hermano o podría inventar algún chisme que hisiera que Laura la dejara, las ideas eran miles, pero tenia que hacer algo primero, una forma de quebrar a Helena era Santiago.

Al llegar acasa no encontró a nadie, "que alivio" pensó, necesitaba dormir un poco.

-Catherine, tu y yo tenemos que hablar- la voz de Helena era fría, algo intimidante.

-Claro, dime hermana.

-Se todo sobre Javier, vas a pudrirte en el infierno.

-Todos lo haremos, no creo que haya alguien lo suficientemente bueno en el mundo para ir al cielo, todos somos una mierda, unos mas que otros, pero todos estamos enlodados.

-Deja en paz a mi familia.

-No quiero, ¿Por qué lo haría? Porque tu me lo dices. ¿Qué haras? Lloraras como cuando eramos niñas, eso no funciona ahora, y sabes porque, porque la única perona a la que le importabas esta muerto, tu padre nisiquiera regresa a verte.

-Ya fue suficiente.

-Soy yo quien definira eso. Dime, si sabes todo entonces que sentiría Santiago si se entera que su madre no era mas que una ramera y que Dios sabe quien es su padre, que todo lo que tiene es por simple lastima de un viejo que tiene miedo a quedarse solo.

- ¿Cómo puedes ser asi? ¿Cómo puedes odiarnos tanto?

-No tienes ni idea por todo lo que he pasado, pero conseguire lo que quiero, que tal si hacemos un trato Helenita.

-¿Qué quieres?

-Yo dejo en paz a yu familia y tu dejas a Laura, sencillo.

Aquello le había caido como un balde de agua fría, todo el odio que tenia, todo lo que planeo decir se desplomo.

-¿Laura? ¿Cómo sabes de Laura?
-Eso no te interesa- hablo secamente- Tu padre se enojo mucho cuando supo que su bastardo era homosexual, dime que sentiría si se enterara que tu también lo eres, sabes que ese hombre te odia.

-Solo responde lo que te pregunte- dijo Helena decicida a saber como Catherine se había enterado de su relación.

-A donde se fue toda esa valentía Helena, pareces un cachorrito, como cuando eras niña, ¿vas a llorar Helena?

-¿Por qué?

-Porque quiero que llores sangre, nunca te soporte, era tan estupido ver como mi madre y yo nos moriamos de hambre cuando tu niña rica peleabas con tu padre por no querer comer, tu cuarto era el doble de grande que mi departamento completo, lo tuviste todo helena y aun asi nunca fuiste feliz, eras tan dichosa, tenia todo lo que soñé en la vida, todos estaban para ti y aun asi llorabas todos los días, me enojaba tu actitud.

-No lo entiendes, de que me valía todo esto, de que me vale todo esto, mi padre no me habla, era una niña, extrañaba a mi mama, no sabes lo que se siente perder todo lo que tenia.

-De que sirve la gente, todos se van, todos pueden traicionarte, incluso tu madre era una puta, tu hermano un fácil, y tu padre es un maldito rencoroso, sabes porque te odia tanto, es porque eres la fiel copia de tu madre, te pareces tanto a esa perra que para el es imposible verte sin sentir ese odio, la amaba y ella lo traiciono, otro ejemplo de lo que te digo.

-Yo me ire con Santiago, tan solo espero que se gradue, Sebastian, el prácticamente no pasa en casa, tendrás todo para ti, tal solo ya déjame sola- Helena estaba haciendo un esfuerzo sobrehumano para no llorar en ese momento.

-Que te parece mejor si le agregas a eso unos cuantos miles, tengo que renovar mi armario.

-Lo haré, solo dime cuanto.

-Espera un segundo, tratas de hacer que olvide por lo que vine, Helenita, te hise una pregunta, ¿Aceptas?