La Tormenta Azul

Capítulo 8

Seth me había golpeado.

Se había atrevido a levantarme la mano y dejar caer toda la rabia que tenía sobre mí.

El impacto del golpe hizo que perdiera el equilibrio y cayese sin remedio desplomada al suelo. Lleve mi mano donde había recibido la cachetada y sentí como mi piel ardía, en unos segundos comenzaría a hincharse la zona para luego adoptar un color rojo o morado.

Con lágrimas a punto de salir de mis ojos, levante la vista y vi que Seth seguía parado en frente mío apretando sus puños. Si hubiese sido por él me habría molido a golpes desde un primer instante.

-Edeline- Dijo Seth con la voz ronca- ¿A qué hora dije que debían estar aquí?-

-Antes de medianoche- Musite sin levantar la vista.

-¿Y por qué tú llegas con tu equipo a las dos de la madrugada?- Preguntó.

-Se me hizo un poco tarde...-

-¡Esa no es excusa!- Grito- ¡Estas entrenada para cumplir con tus objetivos y vienes a decirme que se te hizo un poco tarde!- Dijo golpeando la puerta.

Seth siempre ha tenido un carácter muy fuerte y duro. Es considerado uno de los mejores y más fuertes guerreros que tenemos en la base; por ello es que es el líder de la subterránea. Con sus 20 años de edad debe ser todo un honor, pero confunde lo profesional con lo personal, y da la casualidad de que sea solamente conmigo; ya que a los demás los trata medianamente bien.

O al menos no intenta golpearlos.

-Seth para de gritar- Dije haciendo esfuerzos para contener las lágrimas.

-¡Es que me sacas de casillas Edeline!- Dijo entrando en la habitación- Siempre todo lo que haces lo haces mal. Iremos a la ruina si sigues con tus errores ¿Hasta cuándo piensas creer que esto es un juego?

-Me lo tomo enserio Seth. Igual que los demás- Dije con la voz quebrada.

-Pues déjame decirte que no se nota en lo más mínimo- Dijo sarcástico. Su mirada se cruzó un segundo con la mía y sentí que había sido mala idea hacer contacto visual.

Seth se agacho y puso sus manos en mi ropa y de un tirón me puso nuevamente de pie justo en frente de él. Sus manos eran como dos pinzas en mi ropa y no me soltaba por más de que yo hiciera esfuerzos por zafar de su agarre.

-Mírate- Dijo sacudiéndome violentamente pero sin soltarme- Debería darte vergüenza llamarte "Evolucionada" no puedes cuidar ni de una mosca-

-Seth suéltame- Dije forcejeando en vano.

-Eres una inútil Edeline. Tu equipo será el primero en caer- Dijo empujándome y haciéndome caer nuevamente.

Seth intento acercarse nuevamente a mí, pero alguien lo llamo desde la puerta.

-Seth- Era Jaden.

Tenía una expresión furiosa en su rostro. La misma expresión que solía poner cuando Seth insistía en humillarme frente a los demás.

-¿Por qué no me sorprende que el príncipe azul venga a salvar a su princesa?- Dijo irónicamente.

-Deja en paz a Edeline- Dijo Jaden- Y sal de este cuarto-

-¿Disculpa? ¿Tú estás ordenándole al líder de la base que es lo que debe hacer?-

-No voy a repetirlo de nuevo Seth. Vete de aquí-

-¿Siempre piensas ensuciarte las manos para defender a esta idiota Jaden? Te recuerdo que no te conviene tenerme como enemigo- Advirtió Seth.

-Escúchame una cosa Seth. Seria capas de caminar por el mismísimo infierno si de defender a Edeline se tratara. Y no creas que te tengo miedo. Soportare a los enemigos que sea pero voy a protegerla con mi vida ¿Te ha quedado claro?- Dijo Jaden