--A THOUSAND YEARS--

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Por fin podía tener paz, cumplí la promesa que le hice a mi madre de formar una familia, Eleanor dejó ese peligroso trabajo y ahora yo velaría por ella y por Adam. Todo lo malo parecía perderse tras una cortina de humo, sería un buen padre como el que yo no tuve y les daría la mayor felicidad que pudiera. Lastimada igual que yo, ahora podíamos sonreír y vivir felices.

- ¿Ahora tendré que decirte papá?; preguntó Adam mirándome con esos ojos avellana

-esa es tu elección, a mí no me importa que me digas Jake o.... p.... papá; confesé acariciando su mejilla mientras lo arropaba; como te sientas mejor campeón ¿De acuerdo?

-entonces lo haré; sonrió dando un gran bostezo

-hasta mañana Adam; su manita tenía atrapados mis dedos

-hasta mañana papá

Decir que un hueco se formó en mi estómago, fue poco, era como una tenue frase con un gran significado, deposité un beso en su frente y me asegure de que estuviera bien tapado. Cerré la ventana y luego bajé las cortinas, dormía con tranquilidad, su pechito subía y bajaba al compás de una suave respiración en un sueño de inocencia e ingenuidad.

Salí de la habitación y fui por el pasillo escuchando los ruidos de la cocina, Ella, lavaba los trastes que se habían juntado luego de cenar, su cambio de estilo le había sentado de maravilla. Nueva casa, nueva apariencia, nueva vida.

Su cabello largo, ondulado y rojizo ahora era corto, lacio y azabache, sus ojos verde olivo ahora lucían más, gracias a que esas ojeras habían desaparecido de su rostro, la preocupación en sus expresiones se había esfumado. De haber sido una mercenaria, ahora era un ama de casa.

- ¿Necesitas ayuda con eso?; pregunté avanzando hacia ella

-nop, ya casi termino; volteo a verme y sonrió; si quieres adelántate

-te esperaré; dije cruzando los brazos mientras me recargaba en la barra de madera

-está bien ¿Se ha quedado dormido?; preguntó volteando un momento

-sí, profundamente dormido; cerro el grifo y se secó las manos en el delantal; ven aquí

Sonrió un momento y avanzo hacia a mi pasando sus brazos por mi cuello, me miro y pude ver tristeza en su mirada, puse mi mano en su mejilla y esperé a que me dijera que la tenía así.

-quiero un nuevo nombre; negué con la cabeza y me miro extrañada

-lo siento, pero ya me casé con Eleanor...; hizo un mohín con los labios al entender mi broma y rio un momento

-Eliza; me confeso el nuevo nombre y asentí; quiero ser Eliza, quiero dejar mi pasado atrás, todo ese sufrimiento

-está bien; la abrace con todas mis fuerzas; mi Eliza

Alejarla de todo lo que la lastimo, darle esa vida nueva, esa tranquilidad que tanto ansiaba y la seguridad que quería para Adam, yo iba a darle todo eso y más y daría mi vida por ello.

The reflection into mirrorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora