Añil

Capitulo 23

De nuevo mi despertar es a las ocho, ya esta establecida la hora, tengo unas ganas locas de salirde aqui, para poder vivirde dia de nuevo, ya falta menos, con eso me consuelo, y conque a cada minuto que pase fante menos ya soy feliz.

Me levsnto de la cama y salgo de la habitación con la toalla en la mano y me sorprendo bastante al ver la escenita de la sala común.

Cierto imbecil esta dormido en el sofa en una posición que no debe ser comoda, eso como poco, levanto una ceja mientras le observo ¿Que hara alli?

Me acerco al sofa con cuidado de no despertarle y me asomo por la parte de atras, dormido hasta parece agradable, venga, dormido es perfecto, sus ojos cerrados dejan que sus pestañas casi toquen sus mejillas bronceadas, su pelo negro esta despeinado, pero su maldito tupe no desaparece, eso no desaparece xon nada, ya lo tengo claro, sus labios entre abiertos estan rosados y entre ellos asoman sus perfectos y blancos dientes, su pecho se mueve en ascendente y descendente de forma pausada, no se ni para que respira.

Pero no estoy alli para apreciar lo guapo que es el maldito Nate, si no para despertarle y que me explique que narices hace alli.

Ruedo los ojos y me acerco a tocarle el hombro, antes de que esto ocurra el me agarra la muñeca y me mira, mi rirmo cardiaco se acelera, le miro a los ojos grises y el me debuelve la mirada, me suelta la muñeca y se incorpora un poco,  y emite un pequeño sonido, mientras saca los pies del sofa y se recuelve el pelo.

-¿Que haces aqui?-pregunto en tono frio.

-Cuidarte-dice y yo me derrito, cosas como esa matan a una chica, procuro mamtener las formas y carraspeo.

-¿De que?-prefunto.

-¿Has olvidado dos intentos de asesinato?-pregunta y me mira.

-No, pero tengo las ventanas cerradas-indico- y si algo me fuera a pasar en mi habitación este internado seria mas inseguro de lo que pienso.

-No es inseguro-dice serio-pero no sabemos a que nos enfrentamos.

-No te momtes peliculas-digo-- esto es algun vampiro que se aburre y quiere matarme, como mucho uno con cuentas con mis padres.

-Ya te dije que por avurrimiento nadie mata, y no creo que por temrr cuentas con tus padres intente con matarte,

-Tu mismo-me encojo de hombros-pero deberias dormir en tu habitación y eso...

-Me quedo mas tranquilo aqui-levanto amnas dejas y rodeo el sofa hasta quedar a un lado de el.

-¿Has comido?-pregunto y el me mira sorprendido.

-Me acabo de levantar-dice.

-¿Tienes reservas?-pregunto.

Vale, el practicamente me exiguio mi sangre, pero debo admitir que tras pensarlo un dia de sueño,  le estoy bastsntr agradecida por salvarme el pellejo, ademas de que no es precisamente facil olvidar el momento de el claro, vamos si hasta empezo a llover, como en las pelis baratas, y ni me si cuenta.

-Tengo que ir a la ciudad est noche-dice y se pone en pie quedando a mas altura que yo, tornas invertidas.

-Vamos-digo pasando por delante de el en dirección a mi habitación y abro la puerta, me giro a mirar, y el ni se ha movido.

-¿Que dices?-pregunta y noto cierts emoción en su voz, vampiros y sangre, son como un niño con una piruleta, y en este caso, la piruleta es lo que yo tengo para ofrecer.

-Venga te voy a dar mi...-se mueve con rqpidez y me tapa la boca encerrandonos a ambos en mi habitación.

-No lo digas,  nadie sabe quien puede estar escuchando-me destapa la boca y se aleja un paso- y no, no voy a hacerlo, tenias razon tu ayer, el lio en el que principalmente tu te puedes meter no te resultara agradable.